Mark mira más allá de lo físico.
Las emociones.
El tacto.
Los sentimientos.
El era capaz de percibirlo pero de una forma peculiar.
Colores. sonidos. sabores. el era capaz de asignarle a cada emoción un adjetivo.
Pero al ver a ese muchacho sus...
La semana de exámenes estaba en curso, cuarto día de la semana, un miércoles por la mañana en el Instituto Nacional de Seúl.
El profesor pasaba entre los pupitres de los jóvenes los cuales resolvían los ejercicios de matemáticas velozmente, ya no tenían mucho tiempo para resolver la prueba. La sinestesia en estos momentos no es que se apagaba ni nada de eso, simplemente era como si entendiera que Mark no tenía que ver colores pero claro en algunos momentos algunos números como el 1,4,5,9 y 0 tenían sus colores respectivos y en la papeleta el no los veía en negro si no con respectivos colores y eso a veces lo distraia por admirar los colores.
Anunció que se entregarán las papeletas y así aunque no hubieran terminado todos entregaron los papeles al mismo tiempo.
Las personas hablaban últimamente más con Mark, desde lo que sucedió en la fiesta se dieron cuenta de que la mala era Eunbi por opacar y tratarlo mal, Mark sólo era su víctima; Se dieron cuanta que Mark nunca les había hecho daño, por eso se sentían mal y ahora lo saludaban y entablaban una conversación normal con él. Lua ahora se había acercado a ellos, se había disculpado por lo que hizo Eunbi y también por algunas cosas que había hecho dejándose llevar por ella. Lua estaba hablando con Mark con respecto al examen, mientras ellos hablaban Jackson y Jinyoung los vigilaban, aunque Jinyoung era el que más los miraba, pero no exclusivamente al chico, estaba observando a Lua, su cabello café ondulado le caía por los hombros. El chico notó que el líder del equipo no dejaba de mirar a Lua.
- cierra la boca, se te esta saliendo la baba.- se obligó a pausar lo que decía con respecto a lo fácil que estaba el examen y le dijo eso ya que lo estaba ignorando. Río divertido ahora viendo a su amigo.
- ¿Tanto se nota?- preguntó rascándose la nuca nervioso, le gustaba mucho Lua sólo que pensaba que ella al ser del grupo de Eunbi nunca le haría caso.
- Si.- asintió cruzandose de brazos, ver a ese tipo prácticamente violento estar enamorado le daba risa y ternura a la vez.
- Es muy linda, No me culpes, ah y no le digas a nadie, quiero que sea un secreto.- y por primera vez el chico rudo mostró un pequeño sonrojo en sus mejillas, Lo que hizo que se carcajeara el contrario y luego calmaba sus risas para asentir.
- Joder si que te pegó fuerte.- ahora se colocó serio y se encogió de hombros demostrando que si, estaba flechado.
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- ¿De qué color es Lua? - preguntó mientras ojeaba el libro de inglés una vez más ya que el día de mañana tendrían el examen, claramente sabía a lo que se refería, tomo de su café helado mientras pensaba bien.
- Es confuso.- se encogió de hombros. Eso lo hizo imaginarse que quizás Lua era igual que él en el aspecto que cambiaba siempre de color.
- ¿Es como yo?- Mark negó riendo a lo bajo, él era único en su especie.
- Su color es verde pino, no verde chillón como las otras chicas, lo confuso es que nunca lo había notado, Es como si la amplia presencia de verde claro no me dejará ver ese puntito de verde oscuro.- trato de explicar como lo veía, Al ver la cara perdida de su novio trato de explicarlo sin tanta metáfora.- A Lua la opacaban las demás chicas y por eso no resaltaba, nunca la había notado como buena persona hasta que las chicas se fueron.
Ahora se podría decir que había entendido. Ahora que no había nadie que la privara de nada, se mostraba tal como era sin necesidad de fingir nada.
- Es lindo como la sinestesia te permite ver tantas cosas que yo y otras personas no podemos ver, es un don hermoso.- le expuso su forma de ver la condición que padecía, Mark se sintió bien de que alguien notará que lo que padecía no era una enfermedad si no que un don.
- Tienes razón, ya no tengo que pensar en esto como algo malo, es un don, una cosa maravillosa que me permite ver el interior de las personas.- se convenció a él mismo de que era perfecto con su Sinestenia.
- Ese es mi chico, mi chico de los colores.- Le guiño el ojo sólo para que el contrario mostrará su delgada pero muy bella sonrisa.
MARK
Llegué a casa después de estudiar en la cafetería con Jackson, ambos habíamos decidido irnos a nuestras respectivas casas para dejar al contrario estudiar. Me extrañe al escuchar voces provenir de la cocina, sabía que mamá ya estaba en casa pero ¿acompañada? Eso nunca.
Deje la mochila en el sofá junto a mi sudadera, me encamine despacio para no causar revuelo, Al parecer ni siquiera se habían dado cuenta que había abierto la puerta principal, cuando finalmente me asomé a la cocina observe a mi mamá con una sonrisa deslumbrante en el rostro mirando a un hombre.
Dios, no puede ser.
Es él por la mierda.
Después de tantos años.
Ella me miro aparentemente sorprendida al verme ahí parado pero nada fuera de lo normal, él hombre se dio la vuelta, sólo para confirmar mis sospechas.
- ¿P-Papá?-pregunté con una voz casi quebrada y con el corazón en la boca.
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Mañana entro a clases no yei :c
Y es probable que sólo me enfoque en esta historia para terminarla más rápido.
