Capítulo 4

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Ya tenían planeado interceptar a Sara en una fiesta benéfica, la mujer era una influencer muy conocida en Redes Sociales, miembro de la Crema Innata del Estado, conocida por ir a reuniones sociales importantes, hacer obras benéficas alrededor del país, Fernando tenía dudas si ella realmente podría ayudarlos a descubrir cosas sobre el Chacal. 
-Tenemos que encontrar la manera- dijo Rubén una mañana de junta previa, Fernando estaba muy pensativo, tratando de encontrar alguna forma, cuando uno de los agentes entró a la oficina del Jefe con un Ipad en la mano. 
-Jefe, agente Shadow- entró agitado, al parecer había corrido para llegar lo más antes posible. 
-¿Que pasa Suárez?- Rubén ni siquiera lo miraba, esta muy ocupado con algunos papeles. 
-Jefe- el muchacho aún no podía recuperar el aliento- Tiene que ver esto. 
Ruben recibió el Ipad y tras unos segundos quedó petrificado, Fernando que andaba muy pensativo volteó a ver a su jefe, Rubén tenía una expresión de enojo y frustración.  
-¿Qué dice ahi Rubén?
Rubén sólo le pasó el Ipad, Fernando al leer cambió totalmente de expresión, se llenó de rabia, cerró su puño con ira y golpeó la mesa, el muchacho saltó unos milímetros con el susto, recibió tembloroso el Ipad que Fernando le pasaba. 
-Debemos actuar rápido. 
Fernando estaba fuera de sí, en el Internet estaba circulando la noticia de la pronta excarcelación del Chacal, su abogado había presentado un recurso de Amparo muy bueno, y el juzgado había decidido darle libertad condicional, sujeto a que se presente cada semana a registrar sus movimientos y a no salir de país. 
-Esto no se queda asi- Fernando no miro a nadie y salió hacia el ascensor, Rubén lo gritó. 
-Shadow, ¿A donde vas?
-Ya vuelvo- Fernando estaba por llegar al ascensor, Rubén iba tras de él. Todos habían dejado de hacer sus cosas al ver como Fernando con paso firme salía de la oficina. Ya se habían enterado todos lo del Chacal. 
-Espera Fer- Rubén trataba de alcanzarlo, Fernando daba pisadas grandes. 
-No me digas nada, déjame ir- Fernando estaba apretando con mucha furia los botones del ascensor. 
-Ir a matarlo no solucionará nada-decía Rubén al alcanzarlo. 
-Tú no sabes eso, no entiendes nada. 
-Te ordeno que te detengas Shadow- Rubén lo dijo con voz enérgica, la puerta del ascensor se abrió, pero Fernando no entró
El ambiente se volvió tenso, todos tenían sus ojos en ambos hombres en la puerta del ascensor. Fernando se había quedado inmóvil, cerraba los puños al no poder desfogarse. 
-No te metas-dijo en voz baja
-Vamos a hablar a mi oficina- le dijo Rubén, ya no tenía voz de mando, quería ser conciliador, le tomó del brazo a Fernando y lo dirigió hacia la sala de juntas principal. Con su otra mano, hizo señas a los demás para que volvieran a lo suyo, todos dejaron de mirarlos y regresaron a sus actividades, y ambos regresarona ala sala donde estaban. 
-Sé cómo te sientes ante esto.- dijo Rubén al entrar y cerrar la puerta tras él.
-No lo sabes, nadie mató a sangre fría a tu familia. 
-Fernando, sé que lo que te pasó fue horrible, pero piensa, si lo matas así nada más, puedes tener más problemas. 
-Se merece  morir. 
-Eso no lo dudo, pero es mejor que pague en vida todo lo que ha hecho, y si ahora vas así nada más y lo matas, quien sufrirá el encierro serás tu, y ¿Crees que eso es bueno? debemos buscar la forma de que caiga y nos de los motivos necesarios para encerrarlo de por vida. 
- No puedo esperar más- Fernando golpeó con furia su puño sobre la mesa, quería tener al Chacal entre las manos y dejarlo sin aire. 
-Tienes que hacerlo, ¿Que te diría Sofía ahora mismo?
-Nunca lo sabré- La ira de Fernando, se vio debilitada, sus ojos se volvieron tristes y de ellos salieron lágrimas, que trató de disimular. Rubén sabía por el trance amargo que estaba pasando su amigo, con algo de temor puso su mano en el hombro de Fernando, pensó que él lo rechazaría, pero no lo hizo. 
-Enfócate Fernando, siempre has sido un hombre prudente, esto es igual que cualquiera de los casos que has tenido como fiscal, debes juntar pruebas, todo indicio es importante. 
Fernando lo analizó, si Sofía estuviera con él le habría dicho exactamente lo mismo. Se secó las lágrimas con un puño y miró a su jefe. 
-Está bien. 
-Volvamos a nuestro plan. 

Y el día de la salida del Chacal llegó, Fernando y su jefe ya tenían un plan, se iba a inaugurar una exposición de pintura a beneficio de los orfanatos en la ciudad, y Sara como Influencer había sido invitada a promocionar el evento. Fernando sería un invitado en la Fiesta y trataría de acercarse a ella. 
Era obvio que a pesar de ya estar entrado en los Cincuenta, Fernando era demasiado apuesto para que ella opusiera resistencia, ante alguna conversación. Asi que Rubén le indicó que tenía que hacer, y le asignó al agente Suárez para que sea su respaldo desde la oficina. 
-Gracias Señor por la oportunidad- le dijo Suárez a Fernando, cuando estaban viendo la logística para el dia del evento.
-¿Cual es tu nombre?- le dijo Fernando muy serio. 
-Ricardo, señor.- el muchacho estaba muy nervioso. 
-Ricardo esta misión es muy importante para mi, necesito que se ayudes en todo¿De acuerdo?
-Si señor.
-Entonces, ¿Que armas tendré?-dijo Fernando, señalando a todos los artilugios que habían en la mesa. 
-Señor, tendrá el microfono cerca de la corbata y un retransmisor que lo conectará directamente conmigo- Ricardo señaló a dos diminutos dispositivos en la mesa, se los mostró- luego tendría su revolver reglamentario y una micrócamara colocada en la solapa de su frac, con el cual yo pueda ver y grabar cualquier incidencia. 
-Esta bien. Gracias muchacho- Fernando le dio unas palmaditas a Ricardo, el muchacho parecía que se iba a desplomar de los nervios en cualquier momento. 
En eso llegó Rubén llevando en sus manos un revólver nuevo 
-Shadow, esta es tu nueva arma de reglamento. 
-Señor- dijo muy serio y tomó del estuche un arma, una Pistola Glock 43 9mm, ideal para que se oculte bajo el frac, Fernando la devolvió al estuche y lo recibió de manos de Rubén. 
-Confiamos en ti Shadow. 
-El Chacal y su banda caerán o me dejo de llamar agente Shadow. 
Se marchó a su departamento, donde ya su ropa y todo lo que debía llevar estaba listo. 
En una hora. estaba manejando su coche negro, con su traje de frac. rumbo hacia el City Hall, donde se realizaría el evento, llevaba todos los dispositivos bien acomodados y una tarjeta de invitación, con la ingresaría, Su identidad sería Robert Durand, un empresario filántropo. 
Al llegar al lugar el valet le pidió las llaves de su coche, había gente parada en la puerta esperando a entrar, cuando Fernando salió del coche, atrajo todas las miradas de las Asistente, era imposible no voltear a verlo, su porte y elegancia saltaban a la vista. 
-Ricardo- llamó en un susurro a su joven compañero, estaba conectado por el micrófono
-Si señor- dijo Ricardo- a sus ordenes. 
-Es hora del show- Fernando entregaba al guarura de la puerta su invitación, y respiró hondo. 
Estaba entrando a la boca del lobo, pero era mejor atacar desde adentro.

El Agente Shadow Donde viven las historias. Descúbrelo ahora