Round 43: Una historia

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Estaba observando a la mujer que dejaba atrás pero no me percate en donde estaba.
Observé mi al rededor y el auto ya sabía de quién era, mire hacia adelante y conducía Khalan.

No me había percatado de quién me había levantado, me tiró en su auto y trabó la puerta impidiéndome salir.

- ¡Khalan! - grite furiosa y comencé a golpearlo en el hombro

Salte del asiento trasero al delantero y él parecía sonreír.

- ¿Si sabes que tus puños no me duelen no?

- ¿Porque diablos hiciste eso? - estaba echando humo por la nariz

- ¿El que? ¿Detenerte? - me miró alzando las cejas - ibas a matar a esa mujer si te dejaba, eras una cabra descarriada.

Entonces ahora entendí, comprendí que esa mujer era mi madre, que había vuelto y que haría de mi vida un infierno.
Me lleve una mano a la frente y había comenzado a llorar como una niña.

Khalan estacionó el auto de golpe provocando que me sacudiera, abrí la puerta del copiloto y quise vomitar, pero fue peor, porque no había comido nada en todo el día.
Me reincorpore y Khalan hecho su asiento hacia atrás y como si fuera una muñeca de trapo me sento encima suyo.
Coloco mi cabeza en su pecho dejándome llorar al rededor de diez minutos mientras él acariciaba mi cabello y espalda.

- No puede ser - salte de golpe de su pecho y revolvi en mi bolsillo buscando mi teléfono. Marque el número de Ayden

- ¿Mal? ¿Dónde estás?

- Ayden, la bolsa con las compras está afuera, tómala, cierra todas las puertas y ventanas con traba...

- ¿Mal que sucede?

- ¡Ayden has lo que te digo y en unos minutos estaré en casa para explicarte por favor!

- De acuerdo

Cuando Ayden colgó, me seque las lágrimas algo avergonzada y Khalan tomó mi rostro entre sus manos.
Acariciaba mi rostro con su dedo pulgar y secaba mis lágrimas al mismo tiempo.

- ¿Que sucede Mal? - pregunto al cabo de minutos

- Esa mujer... A la que iba a matar, era mi madre - intenté reír pero solo salió un ruido extraño

Volví a romperme en llanto, sin embargo Khalan no pregunto nada, sino que me dejó llorar en su hombro tanto que me quedé dormida.

- Mal - me sacudían - Mal, despierta - me levanté de golpe sobresaltada golpeando mi cabeza contra el techo

- ¿Que hora es? - tanteaba mi teléfono pero no lo encontraba

- Tranquila solo pasaron 40 minutos ¿Estás mejor?

- Quiero vomitar - le dije mientras me volvía a mi asiento y abría la puerta para vomitar un nudo de nervios.
- me siento fatal

- Vamos a un lugar - puso el auto en marcha y comenzó a conducir

- Debo volver a casa

- Esto será rápido

Condujo menos de 10 minutos y llegamos, cuando paró su auto pude ver qué estábamos en el gimnasio.
Se giró para tomar algo del asiento trasero y se bajo.
Aunque me baje del auto algo mareada camine detrás de Khalan y abrió las puertas para entrar.

El salón era oscuro y frío, estaba algo maltratado pero habían grandes canchas de boxeo ubicadas y una zona de entrenamiento en la que habían muchas bolsas de boxear.
Nos dirijimos hacia esa zona y Khalan fue a buscar algo.

No espere a que regresará y había comenzado a golpear la grande bolsa, mis nudillos me dolían pero ahora entendía porque habíamos venido acá, esto era más relajante que llorar.

- ¡Espera! - corrió hacia mi con un par de guantes en sus manos - quieres molerte los dedos loca

Me coloco los guantes y luego señalo la bolsa apartándose, se fue a sentar en uno de los ring y me observo.
Golpee la bolsa tanto tiempo que sudaba y gemía del cansancio.

Al final cuando ya no aguante más me tiré al piso acolchonado a respirar.
Khalan vino a mi lado sonriendo.

- Verte hacer eso me ha excitado más que otras cosas - me reí y él me tendió un vaso de agua que tome en un segundo

- Fue de mucha ayuda - dije agitada

Se acercó a besarme y no me contuve, junte nuestros labios rápidamente y sentía el deseo que teníamos el uno por el otro. Sin embargo me aparte.

- Lo siento no...

- No es un buen lugar para sexo?- me interumpio

- Iba a decirte que no me siento bien mentalmente para tener sexo pero... - solamente rió y me observaba con una sonrisa en el rostro

«Ella me abandono cuando yo tenía... Al rededor de 15 años.
Mi hermano tenía 10 años, y Ghalen apenas tenía 3 años.
Dijo que ya era grande, que sabría mantener una familia, que no sería tan difícil.
Ghalen lloraba todas las noches, Ayden lloraba porque tenía miedo, y yo lloraba mientras acunaba a mi hermano.
La familia de Makena me ayudó a sobrevivir al rededor de un año, no tenía plata asique hice lo imposible para que me contratasen con 16 años.
Cuando conseguí el empleo pude subsistir un poco pero tuve que buscar otro para devolver la plata.
Mis hermanos enfermaban y yo no sabía que hacer, si yo enfermaba no me importaba, simplemente tenia que trabajar.
Por eso nunca tuve novio, nunca salía de fiestas, era yo, mi amiga y mis hermanos.
Mis abuelos nos olvidaron, fueron mi única esperanza por un tiempo, pensé que ellos nos acogerían y yo podría irme a la universidad como siempre quise, pero lo único que hicieron fue darme 1000 dólares para sobrevivir un año.
A mí papá lo mataron cuando yo tenía 12 años, Ghalen era un bebé, Ayden era un niño, al igual que yo.
Pasaron por fuera de la casa y comenzaron a disparar hacia dentro.
Mi papá corrió a tomar a Ayden y lo dejo a mi lado, cuando fue a buscar a Ghalen una bala lo alcanzó.
Encerré a Ayden en mi cuarto y fui hacia mi papá, me metí en su sangre y precione su herida. No sabía dónde comenzaban mis manos y su cuerpo, todo en ese instante era rojo.
Lo único que le dije fue "No te vayas papi" y él respondió "Lo siento hija, eres maravillosa, tu podrás con esto, cuida a tu familia por mi, te amo"
Y entonces se fue, presione su cuerpo inerte hasta que la policía me saco encima suyo.
Mi mamá llegó a las dos horas del casino, venía feliz porque había ganado 2000 y se iba a comprar el whisky más caro.
La muerte de mi papá le afecto hasta el entierro, luego de dos años se dió cuenta que era libre, ya no tenía un esposo y yo ya era adulta.
Asique un día fui a su habitación y la ví con maletas, me dijo que "Se iba a vivir la vida"
Antes de irse tuvo la generosidad de dejarme 10 dólares en la mesa y nunca más la volví a ver» ....

El knocaut del amor (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora