—¿Noche difícil?—preguntó Ji Hyun cuándo me vio entrar por la puerta del dormitorio a través del espejo, ella está alistándose para ir al trabajo.—Te esperaba más temprano—murmuró mientras pintaba sus labios, miré mi reloj bremont, un regalo que ella me había dado en mi cumpleaños pasado, marcaba las 08:30 a.m.
—Sí fue una noche difícil—como no tienes una idea—perdón surgió un contratiempo—sentí el pequeño pinchazo de la culpa en mi pecho pero lo ignore desabrochando los botones de mi camisa blanca—me voy a tomar una ducha.
—oh, está bien no te preocupes sentí mucha lástima por ti al ver que no habías llegado, trabajas mucho amor—Se acercó a mí para luego darme la espalda supe que tenía que subirle el cierre del vestido y así lo hice, acaricie la piel de su nuca y ella sonrió mientras seguía hablando.
—Esta noche si puedes ir al trabajo por mí sería estupendo—tarde unos segundos en comprender de qué estaba hablando hasta que recordé que era viernes —si no puedes te paso la dirección—Se alejó yendo a buscar unos zapatos yo me senté en la orilla de la cama para poder sacarme los míos. Sonreí al ver cómo se ponía unos tenis que no combina con su vestido para nada.
Además ¿quién utiliza tenis con vestido? Creo que solo ella.
—¿Ya tienes pensado dónde?—pregunté, se acercó de nuevo a mí ahora parándose delante mío mientras se ponía unos aretes de perlas, la mire se veía hermosa, acaricié su cintura mientras se acomodaba sobre mis piernas sentándose a horcajadas y beso mis labios antes de seguir hablando.
—Encontré un restaurante muy bueno, no está lejos de aquí además esto te va a encantar, tiene un buen bar.
—suena bien—teníamos por costumbre cenar los viernes afuera, con bastante frecuencia quedarnos a beber en algún sitio ya que los sábados por lo general ninguno de los dos trabajaba, o en mi caso mi turno comenzaba recién al medio día por lo que podíamos doarnos el lujo desvelarnos. Me gustaba pasar tiempo con ella Ji hyun es sumamente divertida, aparte de nuestra relación de casados tenemos una buena amistad, ella es el tipo de persona con la que puedes hablar toda la noche sin aburrirte.
Tome sus labios en un beso que inmediatamente correspondió marcando un ritmo lento, después de unos segundos sentí que era demasiado lento, acaricié su cintura con mis dedos subiendo lentamente por su espalda, cuándo inesperadamente el recuerdo de unos labios tomando los míos con una mezcla de anhelo y desesperación me golpeó me froté contra ella casi sin querer, fue solo un segundo pero bastó para que sintiera mi erección, sonrió sobre mis labios para luego mover sus caderas sensualmente.
—No puedo creer que puedas tener una erección estando tan cansado después de trabajar toda la noche ¡ese es mi hombre!
Sonreí aunque la culpa me consumía ya que ella no era la causa de esa erección, omitiendo eso continúe besándola mientras ella acariciaba mis hombros suavemente, nuevamente el recuerdo de unos brazos que me apretaban fuerte y unas manos acariciando mi cuerpo con necesidad y labios besando mi cuello me atacaron, fue suficiente para que negara con la cabeza y alejara unos centímetros a mi esposa rompiendo el contacto de forma abrupta, ella me miró un tanto confundida.
—Creo que deberías irte no quiero que pierdas tu trabajo por mi culpa—dije tratando de recuperar la compostura, ella no se dio cuenta de mi cambio y sí lo hizo no dijo nada.
Me dio dos palmaditas en el pecho luego se alejó, tomó su cartera que estaba en la mesita de luz.
—Tienes razón, ya es tarde, duerme un rato seguimos con eso en la noche ahora tienes que descansar—me tiró un beso con sus manos antes de salir por la puerta. Escuché sus pasos bajando las escaleras a toda velocidad, los ladridos de mumo, luego el golpe de la puerta cerrándose y el silencio.
Me recosté en la cama en la posición que me encontraba, inhale profundamente luego suspiré.
Es la primera vez que le miento a Ji Hyun.
Aunque técnicamente no le mentí, solo le oculte la verdad si me sentía mal por ello pero es definitivamente mejor que decirle;—sí amor llegué tarde por estar con mi ex amante.
Definitivamente cualquier mentira sonaba mejor que eso.
Estaba por subir a mi auto mi reloj marcaba las 5:00 a.m. había terminado mi turno hace 20 minutos atrás, por lo que le di un vistazo a la sala donde Jongin dormía solo para cerciorarme de que estuviera bien, luego me dirigí al estacionamiento del hospital para volver a casa.
—¡Kyungsoo espera!—escuche su voz gritando mi nombre me detuve en seco, casi me caigo de espalda cuándo me giro y veo a Jongin caminado lentamente hacia mi dirección acomodando su ropa desaliñada.
—¿Qué demonios haces aquí jongin? ¿Quién te dejó salir?—pregunté enojado cuando llegó hasta mí tan cansado como si hubiese corrido una maratón.
Con una sonrisa torcida dijo—Me escapé.
—No puedes escaparte yo soy tu médico y te ordeno que regreses—fruncí el ceño aún más cruzándome de brazos cuando se río de algo pero yo no sabía de qué exactamente.
—¿Qué clase de médico eres qué abandonas a tus pacientes?—preguntó con falso enojo, rodé los ojos ante su mirada.
—No te abandoné sólo me voy por qué termino mi turno—contesté sentándome en el asiento del conductor, él se posiciono rápidamente en la puerta impidiendo que la cierre aunque no lo iba a hacer de todas formas.
—Además fui a ver que estuvieras bien antes de salir.
—Sé que lo hiciste te vi pensé que me dirías algo pero solo te fuiste es por eso que estoy aquí— dijo inclinándose estando un poco más cerca de mi rostro. Sentí como los nervios comenzaban a hormiguear en mi estómago, suspiré luego levanté la vista para encontrarme con la suya odiaba esa mirada suya porque no la podía descifrar del todo.
—¿Qué quieres Jongin?—pregunté cansado.
—Que me lleves a casa.
—No puedo—contesté sin titubear—te pediré un taxi—aparte la mirada.
—¿Me dejarás aquí? ¿así?—dijo dolido, aunque yo sabía que probablemente solo me estaba manipulando—no pensé que serías así de frío más si el que te lo está pidiendo soy yo.
Es justamente porque eres tú pensé. Lo observé mientras él seguía parado ahí mirándome con tristeza. No podía dejarlo simplemente ni aunque quisiera ya sé que es un hombre adulto que puede cuidarse solo, pero el deseo de cuidar de él es más fuerte que mi razón.
—Sube—dije con brusquedad, casi sonreí cuándo vi su sonrisa radiante y como camino lo más rápido posible al asiento del acompañante a mi lado, casi pero no lo hice, porqué de solo saber que compartiría un espacio tan reducido con el hombre que causa estragos en mi me ponía demasiado nervioso.
Solo lo llevaré a su estúpida casa y lo dejaré ahí, no es tan difícil Do kyungsoo.
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Un Nuevo Comienzo Suena Bien.
Romancekyungsoo ama a su esposa pero también a su amante...¿Cuál amor será más fuerte?