𝐿𝑒𝑡 𝑚𝑒 𝑏𝑎𝑐𝑘

XXXV

[Woojin]

Me dirigí a la casa de Changbin, necesito que me diga que no es verdad; que me jure que no tiene nada que ver.
Y si es así, seguramente ese niño Felix es el que le metió esas ideas, sé que Changbin no haría algo así jamás.
Apenas llegar, salí de mi auto, cerré la puerta de éste y me dirigí a la entrada de la casa.
Toqué la puerta, tras ésta asomó una cabeza de un chico de cabellera revuelta color naranja.

— Oficial, ¿qué hace aquí a la 1.30am? — dijo aquella persona que se tallaba los ojos.

— Háblale a Changbin — dije en voz firme.
Aquel joven me dejó pasar, mientras se perdía en la oscuridad mientras subía a él segundo piso.

Y muy pesado bajó las escaleras un joven con solo la parte inferior cubierta con un short que le llegaba poco más arriba de las rodillas.

El joven de cabellera naranja había entrado a la cocina, pues Changbin le había dicho que hiciera unos cafés para ambos.

— ¿La policía no tiene horarios? — gruñó sentándose pesadamente en el sofá.

— No vengo como oficial, vengo como tu hermano. — le dije mientras recibía el tibio café que me estaba dando Felix. — La policía vendrá mañana con una orden de cateo. — bebí un sorbo de el café.

— ¿Y? — soltó pientras posaba su mano en la pierna de él joven que se sentó a su lado — Vendrán a buscar ¿qué?

— Más pruebas para incriminate. ¿Qué no ves el problema? Eres el principal sospechoso según MinHo.— vi como sonrió ladino.

— Y por qué él diga que maté a todos esos, ¿realmente lo hice? — sorbió su café. — No tengo nada que ocultar, si vendrán, pues que lo hagan. Estamos limpios.

— Entonces, ¿realmente no lo hiciste? — pregunté para después beber aquel café que me habían traído.

Esperaba una respuesta, cuando comencé a sentir el cuerpo pesado, estaba tan cansado que comencé a bostezar, la vista se me nublaba.
La espera por esa respuesta era exageradamente larga.

— No... Lo... Hicis— ni siquiera pude terminar aquella oración cuándo mis ojos se cerraron viendo por última vez aquella sonrisa que me dio la respuesta.

Él lo hizo, y mi vida ahora ha terminado.