Capitulo 59

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Samael salió de la universidad a las dos de la tarde, el camino al consultorio eran de casi cuarenta minutos y no deseaba llegar tarde.
Al estar ahí observó el lugar, era una casa bastante vieja, al menos la fachada lo era. Con cuidado de no lastimarse abrió la reja oxidada, caminó un pasillo húmedo hasta llegar a un bello jardín, el sol iluminaba el lugar. Buscó a alguna persona o puerta.Encontró la puerta, la golpeó un par de veces, un hombre de unos 50 años le abrió, un viejo alegre que no aparentaba su edad, pero su barba blanca y cabello coló plata lo delataban, además de varias arrugas.
- ¿Ryman?—
- así es–
- Pase– Se dió la media vuelta y caminó hacia el interior de la casa, muy oscura para su gusto– Pensé que vendría con su pareja– Samael entró y cerró la puerta tras de él–
- Es...complicado–
- Si no fuera así, no estarían aquí ¿verdad?– el señor bromeó, Samael soltó una risita– Ven, siéntate aquí, podemos iniciar–
- Yo...– caminó hasta lo que era la sala de estar, se sentó en el sofá que le señaló, el terapeuta se sentó en el individual de enfrente– es terapia en pareja¿no debería de estar ella?–
- Claro– El viejo sonrió– Eres bastante tímido ¿cierto? ¿Eso le disgusta a tu pareja?–
- Emh...no lo sé, supongo que no–
- ¿y están casados?–
- No, creo que ella se asustaría...–
- Ya veo– Samael trató de no hacer contacto visual, no podía creer que le había sacado información sin darse cuenta–

En la universidad aún se encontraba Dorian, acomodando su privado y dándole tareas a su asistente. A las 3:45 decidió recoger su maletín y algunas otras pertenencias, salir e irse. Caminó al estacionamiento sin prisa. Para su sorpresa, Eleanor abría su correspondía, frunció el ceño, miró su reloj y después a ella. Sabía muy bien que la cita era a las tres, no entendía porqué ella aún estaba en la universidad. Aún confundido siguió su camino.
Eleanor había olvidado revisar su correo, y lo más importante, tenía que ir a la corte, esperaba a que Alex se desocupara y poder irse. Dadas las circunstancias, Alexander tenía ilegalmente a una menor en su poder. Los cortos meses que le quedaban para tener la capacidad de decidir no le servían de nada, pues ella era totalmente dependiente de su abuelo, estudiaba y alguien debía de cubrir sus gastos, Eric había alegado que su hija era totalmente incapaz de vivir sola, que su herencia estaba congelada hasta cumplir los 21, que era necesario que su hija estuviera a su cargo, lo real era que esa herencia podía ser manejada por su tutor, algo que a Alexander no le interesaba, solo la quería a ella. Ahora su padre y Alex luchaban por su custodia como si fueran un fallido matrimonio.

Al salir de la corte tuvieron la mala noticia que ya no era una simple audiencia, si no que aquello se convertiría en un juicio enorme, donde tendrían que llevar testigos, pruebas y demás.
Eleanor aún no lo entendía, pronto cumpliría 18.

Al día siguiente, recordó lo que Samael le había dicho, revisó su correo, había encontrado el más reciente, era la cita para ir a terapia, de ayer.
- Mierda–
- No groserías frente a mi–
- si, perdón, Alex–regresó al móvil–
- Me iré a la universidad– anunció–
- Espera a los chicos–
- No, se me hace tarde, tengo que tomar el transporte–
- No te preocupes, contraté un nuevo chofer para ustedes– Eleanor giró los ojos–
- Bien, los esperaré abajo, tengo que hablar con Samael–
- Claro, nos vemos para cenar, no llegues tarde, es noche de pizza—
- aquí estaré– Se paró y se despidió de él con un beso en la mejilla–
- El chofer se llama...– Buscó el nombre en su mente– Barton...creo–
- Bien, si nos secuestran no sabrás ni siquiera su nombre– Bromeó—
- No te preocupes, igual contraté guardaespaldas–
- ¿en serio?¿por qué?–
- Después te contaré, vete ya—
- Bien, chao– al estar en la entrada del edificio llamó a su novio. Estaba furiosa con él, pero lo que le había hecho no estaba bien.
- contesta– susurró, la mandó a buzón, intentó tres veces más hasta que la llamada fue tomada–
- ¿si?–
- Samael, acabo de ver el correo, perdóname–
- No te preocupes,¿todo está bien?–
- Si, lo está, yo estoy muy apenada contigo, ¿puedes reprogramar la cita?–
- Si eso quieres, lo haré...¿la quieres para hoy?–
- Estaría bien–
- Trataré que sea a las cuatro, tengo unas cosas que hacer en la universidad–
- ¿estás enojado conmigo?– hubo silencio—
- He hecho cosas peores, tú sólo faltaste a una cita...tengo que colgar, nos vemos en la tarde.
..............
El día fue eterno, esperaba la cita con ansias, quería arreglar sus problemas.
Se sorprendió al bajar del taxi y ver el consultorio, hasta pensó en que se había equivocado de dirección.
- Adentro en muy bello– Samael estaba atrás suyo–
- ¿cómo conseguiste a este terapeuta?–
- Internet– se puso a un lado, la miró divertido– es broma, uno de mis amigos vino a terapia con su esposa, dice que es bastante bueno–
- perdón por lo de ayer–
- olvídalo, entremos– le abrió el portal, lo cerró y sacudió sus manos, un poco de pintura había quedado en sus dedos–
- Ryman– Ambos hombres de saludaron con las manos–
- Doctor–
- Y tú debes ser...Eleanor–
- Lo soy– Ambos sonrieron amistosamente–
- Déjenme decirle que es la pareja más inusual que he recibido, y vaya que he recibido unos muy extraños– ambos seguían al terapeuta hasta la sala– siéntense– lo hicieron al igual que él– Samael, nunca me comentaste la edad de tu pareja–
- Yo...quisiera que dejara muy aparte nuestras edades...–
- Estoy de acuerdo– Eleanor le dió la razón—
- veamos ¿por dónde quieren empezar?–
- usted digamos– Samael habló–
- bien, comencemos con el incidente de ayer, Eleanor ¿por qué no te presentaste a la cita?– Eleanor miró a Samael, este miraba sus manos.
- Yo no pude asistir por algunos problemas...y no hablé porque olvidé revisar mi correo, ignoraba totalmente la cita–
- Samael ¿no quieres decir algo?–
- Pregunté esta mañana si todo estaba bien, dijiste que si—
- y así es, no es nada de que preocuparse, Alexander me necesitaba–
- No contéstate mis llamadas—
- estaba ocupada, llegué a casa exhausta. Déjame decirte que aunque no hubiera estado ocupada yo de todos modos no iba a venir, olvidé el correo, y debo recordarte que tú no querías venir a terapia—
- Cambié de opinión–
- No soy adivina, perdón—
- ¿no querías venir a terapia?¿por qué?–
- Se me hacia estupido–
- Yo acepté su decisión, olvidé por completo la idea—
- ¿tú la propusiste?– Eleanor asintió– díganme por qué creen que necesitan esta terapia ¿cuál es el problema?– Ambos quedaron en silencio por un momento–
- Peleamos todo el tiempo. Samael es bastante...– lo miró– es un buen hombre, dulce, muy tierno...pero aveces es muy agresivo...–
- ¿eso es verdad?– Samael asintió—
- Lo hemos hablado, yo quiero cambiar eso, controlarme, no solo soy agresivo, si no que controlador, posesivo...y celoso, demasiado de todo.Tengo más cosas malas que buenas–
- Eso no es verdad–
- Samael, creo que tienes una baja autoestima, tú no te crees suficiente, ¿crees ser desechable?– Samael tomó aire–
- Ella es joven, bonita, inteligente...Estoy seguro qué hay una larga fila de hombres esperando que me deje–
- Pues déjame decirte que si esa fila llegara a existir, te elegiría siempre a ti– suspiró– Sam, Samael, tú no eres desechable, no para mi–Samael no dijo nada–
- Dime, muchacho ¿no crees en su palabra?–
- lo hago...ella dice que está fastidiada de mi y en verdad temo que se harte tanto para dejarme–
- Estaba enojada, ambos decimos cosas horribles cuando enfurecemos– tomó su mano–
- Tal vez presenten un tipo de obsesión, ninguno de los dos se ha marchado ¿ha sido tu primer novio?–
- No, hace un par de años tuve uno–
- ¿y cómo fue ese noviazgo?– el hombre anotaba cosas, era irritante para ambos–
- terrible, él era un patán. Él fue mi primer novio...amor si es que le podemos llamar así. Yo decidí terminar la relación, no me estaba haciendo bien. Eso si era una obsesión, lo adoraba a pesar de lo mal que me trataba–
- ¿y no has querido hacer lo mismo con Samael?–
- ¿Dejarlo? Claro que no, con él es diferente–
- ¿Diferente?–
- Lucas y Samael son totalmente diferentes, no son comparables, Samael no puede ser comparado con nadie, sería algo estupido de mi parte– Samael escuchaba con atención–
- ¿y tú ? ¿Qué tal con tus noviazgos?–
- Yo no he tenido muchos, no he tenido más de 10 novias y con ninguna funcionó, yo soy bastante sumiso ante ellas y...nunca conocieron esta parte de mi, siempre he sido agresivo y temperamental, pero ellas no se toparon ninguna vez con eso, solamente se iban, siempre traté de ser un buen novio–
El terapeuta ladeó el rostro, observó a ambos. Él la amaba tanto que no quería que se fuera pero se sentía poco para tenerla. Él quería que ella sola se fuera pero a la vez la quería para él. En cambio para ella él era lo más preciado, quería que fuera él y nadie más, no era obsesión, si no la lucha por su amor.
- Mira,Samael, tu miedo a ser desechado está afectando tu relación. Le has mostrado la parte más terrible de ti, y eso no está mal, le tuviste confianza, abriste tu corazón, la creíste apta para recibirte, Y que hayas hecho eso benefició un poco a lo que tienen. El amor no es solo flores y arcoíris, y tú novia te lo ha demostrado no solo amando tus virtudes si no también aceptando tu oscuridad. Debes controlar ese temperamento e inseguridades, tratas de sabotear su relación– Samael negó rotundamente— No es consciente, pero lo haces, las personas con baja autoestima son propensas a sabotear sus relaciones y tú tratas de alejarla con tu mal humor, hacer que se canse, darle una razón para irse. Dices que ellas se iban sin razón dime realmente tú razón– Samael apretó la mandíbula–
- se aburrían de mi, ellas merecían algo mejor...creo– Eleanor lo escuchaba sorprendida, no podía creer que su novio tuviera esos problemas, no a ese grado–
- ¿sentiste celos alguna vez?–
- ¿con ellas? No mucho, siempre lo dejaba pasar, si ellas querían irse con sus amigos, adelante. Yo no creo que esté saboteando mi relación con Eleanor– frunció el ceño– Me he preocupado por estar juntos, hice esta cita—
- una parte de ti lo hace, pero otra te obliga a pelear, explotar de celos, esperando que se vaya. Hay miles de maneras para arruinar una relación, en tu pasado le dabas más libertad a tus novias, "si no soy nadie para que obligar a que estén conmigo"– Samael cerró los ojos un momento, en verdad pensaba eso– Les programaré un par de citas más. Hay que trabajar mucho en ti Samael y tú lo vas ayudar– anotó en su libreta– ¿les parece mañana a la misma hora?– Ambo se miraron—
- por mi está bien–
- igual–
- perfecto.
...........
- Estoy confundido, ¿saboteo nuestra relación pero soy posesivo contigo ?  No comprendo, es decir, yo no trato de hacer que me dejes ¿o si?–
- Mira Samael, si tú qué tienes como Seis doctorados en literatura no le entiendes, imagínate yo. Eres inseguro y todo, pero creo que no quieres arruinar la relación, al contrario, me quieres siempre a tu lado–
- a ver, ¿de qué sirve que te cele si quiero que te vayas? O sea no entiendo, si quisiera sabotearla te diría algo así como " si ya no me quieres vete "– Fingió gritar, ella rió–
- Eso nunca lo has dicho, creo que yo te he amenazado más en dejarte—
- si, eres cruel–
- oye, yo no sabias que tu autoestima fuera tan mala–
- Ni siquiera yo lo sabía– se encogió de hombros–  Eres tan perfecta que tú no eres el problema en nuestra relación– hizo un puchero—
- Ambos lo somos, verás que en otras sesiones a mi me atacará–

MY DADDYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora