Crepúsculo

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Clary sabía que ese momento era su única oportunidad de llevar a cabo la parte del plan que le tocaba: marcar toda la fortaleza de Sebastian con runas de debilidad que debía inventar. Su hermano estaba atendiendo asuntos en su despacho que se encontraba en el piso mas alto del castillo por lo que ella era libre de recorrer las demás salas para marcarlas. Sabía que si no lo hacía ahora no tendría otra oportunidad, salió de su alcoba sin provocar ruido alguno gracias a la runa silenciadora que se había colocado en el antebrazo. Sabía que el lugar perfecto para comenzar eran las columnas que sostenían gran parte de la estructura en el ala este. Corrió hacia donde se encontraban y colocó la punta de la estela sobre el mármol de la columna y en esa posición se quedó por varios segundos, no encontraba la inspiración necesaria para inventar una runa. Estaba frustrada y comenzaba a pensar en la idea de rendirse cuando un tintineo en su cuello la alertó, miró hacia abajo y observó al causante del sonido, se trataba del anillo Morgenstern de Jace. El muchacho se lo había obsequiado a ella hacía un tiempo y Clary aún lo tenía, ella lo usaba a modo de collar, con el anillo descansando bajo su clavícula.

Al verlo Clary no pudo evitar pensar en todos los Cazadores  que se estarían preparando en ese momento para la batalla que tomaría lugar cuando el sol se ocultara. Todos dependían de ella y Clary no estaba dispuesta a fallarles, de repente la estela en su mano se iluminó como ocurría cuando su don comenzaba a despertar. Clary sintió como la estela se movía bajo su mano, guiándola, dibujando líneas negras sobre el mármol. En unos instantes la runa estaba terminada y Clary supo que funcionaría. Luego de dibujar la misma runa en las columnas restantes, la muchacha se puso en pie y salió corriendo hacía la siguiente habitación para repetir la runa sobre los muros.

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El sol casi ni se veía al Oeste de Idris, en unos minutos desaparecería por completo. Jace observaba a la enorme estrella desde el prado, dónde se encontraba con todo el grupo que lo ayudaría a atacar el castillo de Sebastian, en total eran doce. En un inicio eran solo siete: Jace, Alec, Izzy, Magnus, Simon, Kaya y Adam pero Luke y Jocelyn se habían enterado del paradero de Clary por lo que obviamente de habían unido a la batalla. Luke había traído consigo a Maya y Jordan. Marysee se había unido luego por pedido de Jocelyn.

Jace se había alejado del grupo a pensar pero su soledad no duró por mucho tiempo ya que Kaya le siguió y se sentó a su lado.

-¿En que piensas?- le preguntó ella.

-En la ironía, ¿sabías que Morgenstern proviene de la frase en inglés Morning Star? significa Estrella de la Mañana. Encuentro irónico que ataquemos a Sebastian Morganstern en la noche- le confesó Jace- acabaremos con la estrella del alba en la más profunda oscuridad.

- ¿Temes por tu vida?- inquirió Kaya casi sin pensárselo.

-No -respondió él sin dudarlo. La miró fojamente y finalizó -no temo por mi vida pero sí por la de los demás.

Kaya lo observó, tan hermoso y distante. Jace siempre llevaba una máscara de indiferencia y frialdad que ella no podía romper. De todas maneras no pudo evitarlo y se inclinó con la intención de que sus labios tocaran los del muchacho.

Jace adivinó sus intenciones y corrió la cara antes de que Kaya cumpliera su cometido.

-Sabes que no lo haré. Mi corazón se encuentra en otra parte y soy fiel a él.-susurró mirando con firmeza la dirección dónde se encontraba el castillo.

-Lo , y debes saber que odio a Clary por eso, aunque no la conozca. La chica tiene demasiada suerte -respondió Kaya, no estaba herida por la reacción de Jace, ella había intentado besarlo sabiendo que él no lo permitiría - de todos modos debía intentarlo. Debo irme, quiero recolectar la mayor cantidad de habilidades posible, en una hora atacaremos.- finalizó poniéndose de pie.

- Excelente idea, avisaré a los demás para que se alisten- dijo Jace- por cierto Kaya, lo que te estoy por decir sonará extremadamente cursi pero ya encontrarás a el indicado.- le aseguró el muchacho, Kaya sonrió.

-Cuidado Herondale, si sigues hablando así pronto querrás usar los tacones de Isabelle.- le advirtió la muchacha

-¿Quién puede resistirse a las botas rojas?- ironizó Jace.

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Bueno espero que hayan disfrutado este capítulo , lamento informarles que ya no quedan muchos. Quería hacerles algunas preguntas.
Por empezar, preguntarles qué clase de final prefieren: abierto o cerrado? Desean una segunda parte de esta "novela"? o algún otro fanfic que quieran que escriba sobre algún libro en especial o sobre esta misma saga?? Estoy abierta a sugerencias!
Beso!
CB.

Ciudad del fuego celestial fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora