Sugar master [Min Yoongi BDSM]

XI

(de nuevo, no tenía pensado escribir, mucho menos tan tarde. Pero (esto es 100% real, no fake) Jungkook es tan sexy que me dieron ganas incontrolables de escibir lemon. Osea, no voy a hacer un fic con él, pero es tan sumamente atractivo que me da fuerzas. Solo eso (este cap no tiene lemon anyways, el siguiente si tendrá)

Yoongi se duchó. Se sentía como la peor persona sobre la faz de la tierra. No sabía si era Hyesook la que le había malaconsejado, o si Seungbae, aparte de ser tóxico, le quería. Pero había hecho llorar a su novio. Todavía podía recordar su cara, con lágrimas en los ojos y su labio inferior temblando, mientras sonreía amargamente. Con la toalla alrededor de su cintura, se tiró sobre la cama. Seungbae se asomó a la puerta. Ya no estaba llorando, pero tenía los ojos hinchados.

–¿Puedo pasar?–preguntó. Yoongi asintió, y él entró en el cuarto, despacio. Se sentó en el borde de la cama –. ¿Quieres hablar de ello?

–No te odio. No me arrepiento de haberte conocido. Te quiero. Te quiero un montón.

–Mh –Seungbae asintió–. ¿Puedo acurrucarme...?

–Si. –Seungbae tumbó a su lado, abrazándole por detrás. Yoongi sintió el roce de su jersey con su piel desnuda, su olor invadiéndole, y sonrió –. Lo siento mucho. No pensaba nada de lo que te he dicho.

–Me gustaría llegar al fondo de esto. Para... ya sabes, resolver nuestros problemas. ¿Porque me dijiste todas esas cosas?

–Estuve hablando con Hyesook. Ella me dijo que estaba en una relación tóxica.

–Mh. ¿Y qué te dijo ella?

–Dijo que era emocionalmente dependiente de ti porque me decías que nadie me iba querer si no eras tú.

–Yo nunca te he dicho eso. Yo te quiero muchísimo. Ahora mismo, creo que nadie te quiere tanto como te quiero yo. Pero hay mucha gente que te puede querer. Eres maravilloso. Solo es cuestión de tiempo que alguien se enamore de ti.

–También me dijo que eres autoritario conmigo.

–Ah. Yoongi... Eso es parte del juego, por así decirlo. Pero si no te gusta, paro inmediatamente.

–No, no hace falta.

–No, tienes que decirme si no te gusta por que entonces hay que pararlo y...

–Me pone que seas autoritario –cortó la discusión Yoongi.

–Bueno, sigamos –cambió de tema Seungbae –. Te dijo que yo te manipulaba para usar tu cuerpo, ¿verdad?

–Sí.

–¿Tú te sientes así, Yoongi?

–No. Para nada. Me encanta todo lo que haces.

–No es si te gusta o no, Yoongi. ¿Te sientes forzado a hacerlo? ¿Te sientes forzado a decir que si a cosas? –El tono de Seungbae sonaba preocupado, y sus brazos le pegaban a su cuerpo. Yoongi dudó unos segundos, intentando hacer memoria. Pero se dio cuenta de algo.

–No me estás llamando cariño.

–Porque no es momento para poner carga emocional sobre ti –contestó Seungbae, confundido por el cambio de tema.

–Cuando empiezas a ponerte cachondo, tampoco me llamas cariño.

–Ah. Te has dado cuenta. Es por lo mismo. Para no poner carga emocional. –Yoongi giró para mirar a Seungbae a los ojos.

–Eso es muy dulce de tu parte. –Seungbae rió.

–¿Ser un ser humano decente es dulce por mi parte? –le besó con cuidado sobre la nariz–. Veo por donde van los tiros en esta conversación. Seguro que a tu mejor amiga no le hizo gracia que apartara a Youngmi de ti ayer. Lo siento si te molestó. Pero me pareció que te estaba incomodando. ¿Qué relación tienes con esa chica? –Yoongi suspiró. ¿Por dónde empezar?