Adora por poco y se atraganta con la cuchara en su boca.
—P-Pues... supongo que...—. Señaló su mochila y pude ver, junto al clip de girasol, uno con una bandera de tonos rosados—. Sigo con la misma bandera... —completó riendo nerviosa.
—Oh, lo recuerdas.
—Si... Lo recuerdo—. Un leve sonrojo se asomó por su rostro y comentó—. ¿Y tu? ¿Sigues con la misma bandera?—. Me alteró. Esa pregunta me alteró. Odio mentir. Con todo mi corazón, odio mentir. Pero no era seguro que Adora sepa, o por lo menos no por ahora. Hasta que pueda pagar mis malditos papeles, no podría ser libre por completo. No creo que mis "padres" acepten mi verdadera bandera. Y mucho menos si estoy "saliendo" con Rogelio. Aunque, no creo que sea una mentira del todo...
—Si, sigo con la misma bandera...—. Incrusté una gran cucharada de helado en mi boca, suponiendo que así lograría callarla antes de que suelte algún detalle innecesario que pueda delatarme.
—Entonces supongo que deberé pelear con más personas...—. Me atraganté. Giré mi cabeza con un evidente signo de interrogación plasmado en mi rostro. Adora me miró, pareció pensar algo y luego salto en su lugar de ¿Sorpresa?
¿Dijo lo que creo que dijo? ¿Escuché bien? ¿Habrá querido decir lo que creo que quiso decir?
—D-Digo, tendré que pelear con más gente para protegerte. Es que hay tantos patanes y tantas zorras allí fuera que nunca sabes quién podría hacerte daño, y no quisiera que terminases mal por alguno de ellos. Tendría que matar a un millón de personas porque, además de todo esto, eres hermosa y seguro tienes un montón de pretendientes allí fuera, y tal ve- —. Comencé a reírme. ¿Tanto le preocupaba?
—Tranquila, Adora. No soy tan ingenua como tú—. Volví a reírme ante la mueca que puso. Que puchero más tierno.
Luego, ella comenzó a reírse conmigo y nos empezamos a tentar. Nos mirábamos serias, nos aguantábamos la risa y explotábamos una vez más. Adora había terminado pataleando en el piso y yo estaba apoyada en un árbol sosteniendo mi estómago, procurando que la presión de la risa no me cause devolver el helado.
Luego de calmarnos, y de sobrepasar el hecho de que las personas que pasaban a nuestro lado parecían reírse (ya sea de nosotras o con nosotras, se reían de todas formas). Nos sentamos en un banco viendo cómo el sol daba lugar a las estrellas, oscureciendo el cielo y causando que las personas comiencen a dejar el parque.
Adora estaba apoyada en el respaldar con sus brazos estirados sobre el mismo, y yo sólo tenía mis codos sobre mis rodillas, y a la vez sostenía mi cabeza con una mano. Ambas mirábamos el cielo.
—¿Sabes? —comencé—. Necesitaba tener un día a solas contigo—. Adora bajó su cabeza y me miró a los ojos—. Por un momento, pensé que te estaba perdiendo... Habías comenzado a trabajar y yo estaba con Rogelio, que apenas y nos veíamos—. Miré el suelo, encontrando pequeñas margaritas debajo del banco, como si quisieran esconderse—. Antes de San Valentín, habías desaparecido, prácticamente. Pensé que no estabas de acuerdo con mi relación o que había hecho algo que te había molestado, o aún peor... —la miré a los ojos—. Que te habías cansado de mí.
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(Love &) Hate [Catradora]
Fiksi PenggemarCatra y Adora fueron amigas desde que tienen memoria, pero de repente una familia decide adoptar a Catra, y Adora no la vuelve a ver.. Hasta... ¿Los departamentos? Posee personajes OOC (Out of Character). Si es de tu desagrado, ruego que te dirijas...