Hacía frío. Mucho además. Yo estaba en casa envuelta, quizá, en cinco mantas. Cinco, tu numero favorito. Estaba cansada. Debían ser casi las tres de la mañana. Y ahí estaba; esperando. Todavía me pregunto por qué, pero yo qué iba a saber... Qué iba a saber que esa sería la última vez... qué iba a saber... El teléfono se deslizaba prácticamente entre mis dedos, y lo conseguía atrapar justo antes de que lo hiciera. Así me despertaba. Y ahí seguía, esperando. Eso recuerdo. Como también lo feliz que me puse al ver que estabas escribiendo.
Y así como tantas otras veces lo hacías cuando salías de trabajar y me avisabas de que ya habías terminado el curro y que te ibas a casa. Pero esa conversación no fue igual. Y eso él lo sabía. Todo lo sabía. Y yo ahora lo sé.
Recuerdo cómo me dijo que no estaba bien, que no quería hacerme daño y que solo quería escapar. Ahora sé por qué.
Y ahora recuerdo, con tristeza, los días en los que me mentía.
Recuerdo.
Cómo puede llegar esa simple palabra a herir tanto con todo lo que conlleva. Y sé ahora mismo que tú, que estás leyendo esto, piensas lo mismo. ¿Querrías un botón para borrarlo todo? Yo no lo sé.
Quizá sí. Quizá.
Porque recuerdo también, lo feliz que me sentía al verle pasar todas las mañanas por el pasillo y lo mucho que me estremecía al ver cuánto se preocupaba por mí y cuánto me quería proteger. Ahora lo sé. Ahora sé por qué.
Pensé que sus demonios eran tan solo una ilusión que yo había creado con mi miedo. Ahora sé que eso no es cierto. Ahora sé que esos demonios eran los suyos propios que llevaba cuidando desde hace tanto tiempo del cuál no tengo palabras para expresarlo. Y yo nunca los pude echar de su vida.
Ahora recuerdo, con desconsuelo, los días en los que me mentías. Recuerdo tu risa y tu amor.
Recuerdo que todo eso siempre le perteneció a otra persona que no era yo.
Recuerdo.
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Mi pequeña destrucción
РазноеPoco a poco, pequeños pedazos son capaces de unir un corazón roto. Para aquellos que aman la vida pero a veces se pelean con ella. Para aquellos que buscan su alma gemela. Para aquellos que buscan una vía de escape. Bienvenidos a mi mundo, bienve...