Me duele.
Joder.
¿Cómo no va a dolerme?
Yo en un principio sabía a lo que iba a enfrentarme. Por supuesto que lo sabía, y por ende, nunca he dejado de hacerlo. Me río intentando evitar más romperme mientras escribo estas palabras vacías que no van a llegar a nadie, y que en el fondo, tampoco quiero que lo hagan. Aunque si llegan a tus oídos, vida mía, espero que las entiendas.
Lo estoy intentando. Estoy intentando cambiar todas esas cosas de mí que te decía que odiaba, que repudiaba porque me prohibían avanzar. Estoy intentando destruir todas esas barreras que no me dejan seguir con mi camino. Pero ahora, viendo justo lo que se me viene encima, me doy cuenta que una de esas barreras eres tú. Y la observo, detalladamente. Está agrietada por el paso del tiempo y los golpes que se ha llevado por la vida. Intento buscar algún mínimo hueco para poder pasar, porque no quiero terminar de romperla... Y veo uno. Y cuando miro a través de él te veo a ti. Y empiezo a replantearme qué hacer. Si termino de romperla, y la cruzo, te dejaría atrás, y no lo soportaría.
Pero es lo que siento que debo hacer.
¿En qué momento nuestra vida se volvió un caos tan absurdo y monótono? ¿En qué momento nos empezamos a necesitar como si fuésemos uno? ¿En qué momento dueles jodidamente tanto?
Yo siempre lo he sabido. Sabía que ibas a ser una barrera irrompible que iba a hacer de nosotros un tira y afloja por ver quién la derrumbaba antes en su lado favorable. Y eso es lo que nos ha destruido a ambos; esa necesidad mutua de intentar mantener la barrera estable, pero que jamás hemos podido mantener. Por unas cosas u otras. Por ti o por mí. Esto nunca pudo sostenerse.
Sé lo que se nos va a venir encima. Lo sé. Y lo voy a saber siempre. Y aún lo retengo, como si pudiese tener una mínima esperanza de que esto pueda mantenerse en pie. Intentando no poner punto y final y poder seguir avanzando contigo. Pero se me hace imposible.
Quiero poner punto y aparte y poder siempre regresar a leer ese párrafo de la historia que te conmueve como si fuese la primera vez. Y espero, en lo más profundo de mi ser, que él sea un párrafo que voy a querer releer siempre toda la vida pase lo que pase.
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Mi pequeña destrucción
De TodoPoco a poco, pequeños pedazos son capaces de unir un corazón roto. Para aquellos que aman la vida pero a veces se pelean con ella. Para aquellos que buscan su alma gemela. Para aquellos que buscan una vía de escape. Bienvenidos a mi mundo, bienve...