Apartados.

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Sus piernas le estaban temblando, la piel la sentía de gallina. Toda la espina dorsal la sentía tensa y sus manos no podían evitar cubrir su estómago inconcientemente. Tenia muchos nervios y ganas de vomitar.

— ¿Pudiste decírselo? — Habló Cheng, sentado en la sala. Pasaba su mirada de su hermana a su hermanastro.

— No... Realmente no quiero decírselo. Escuchaste al doctor, no sabemos si el bebé puede sobrevivir.

— A-Xian...

— Madre ya viene, necesitamos saber que le vamos a decir. El doctor se lo dijo

— Madre y padre sabían la condición de A-Xian, estoy segura de que padre te hubiese apoyado en todo.

— Lo sé, shijie... Lo sé. ¿Sabes cuando llega?

—Estaba abordando hace unas dos horas — Consultó el reloj de su móvil, marcaban casi las 12 am. — debería de llegar a lo mucho en media hora o una hora. — Hermano, sabes que cuentas con nuestro apoy-

— Vaya forma de recibirme.

— Madre. — Yan Li y Cheng se levantaron de sus asientos. Wuxian ni siquiera levantó la mirada.

— ¿No te bastó con arruinar mi matrimonio verdad? — Esta levantó la ceja, dirigiéndose hacia el joven. Los hermanos la interceptaron.

— Madre, debiste tener un largo vuelo. ¿por que no vamos la cocina para tomar algo?

— ¿Me lo vas a decir, o lo descubro por mi cuenta?

— Tia Yu...

— ¿Lo repito?

— N-No puedo...

— Dímelo o sufrirás peores consecuencias de las que estoy por darte.

— Si se digo... Quiero que prometa que no le hará nada, por favor...

— ¿Que podría hacerle? Un favor sería desapareciendote.

— ¡Madre! No seas tan cruel. — Le suplico Yan Li.

— E-Es... Lan Wangji

—¿¡Qué!? ¿En serio crees que el menor de los hermanos jade te preñó? — Ella comenzó a reir pero al ver que sus hijos la miraban con preocupación dejó de hacerlo.— Vaya... ¿Él lo sabe?

— N-No... El doctor... El doctor dijo que de todas formas no tuviera mucha esperanza... Asi que no le he dicho nada.

— Mejor, le evitas un trauma al pobre. — Esta se quitó por fin el saco y los guantes. — Mucho tiempo he estado soportandote. Era el deseo de mi difunto marido, pero ya no más. Quiero que te vayas de esta casa.

— ¡Madre, no puedes hacer eso!

— Cállate Cheng, terminarás este año de escuela y te mandaré al extranjero para que puedas estudiar todo lo necesario para saber administrar la empresa de tu padre. Yo voy a cederte el cargo. Yan Li se casará con Jin Zixuan, su familia tiene dinero y aun que la empresa de su padre no genera tanto como la nuestra, su unión conviene a ambas familias. Que se amen es un extra, mi hija tiene mucha suerte. — La señora sonrió pero su hija no podía mirarla a la cara. — Wei Wuxian, tienes esta noche para preparar tus maletas. Te daré dinero, suficiente para que esta familia no sepa de ti, no me interesa en absoluto si esa abominación nace o no. Tú eres un secreto y desgracia en esta familia que ya no voy a cargar. — Diciendo lo último paso a retirarse, dejando a los adolescentes destrozados en aquella sala.

— A- Xian... Si te vas yo voy contigo, no dejaré que-

— Estaré bien, Shijie. — Aún con las lágrimas queriendo brotar de sus ojos, el corazón destrozado y con las ganas de saltar de un puente, le sonrió a su hermana. ¿Que mas podía hacer? Se levantó y la abrazó, ella lloró. Lloró lo que Wei Wuxian no podía llorar.

ReencuentroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora