𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐀𝐅𝐓𝐄𝐑 𝐓𝐇𝐄 𝐖𝐀𝐑 - Tony Stark

8.

TONY STARK POV

Las palabras de Alba hicieron que unos escalofríos recorriesen mi cuerpo, estaba seguro de que me había quedado con una expresión embobada en mi rostro.

Antes de que pudiese acompañarla, Steve apareció de la nada diciendo que teníamos que solucionar unos problemas de la habitación de control y mandos primero, vaya manera de estropear una fiesta.

- Lo tendremos que dejar para otra ocasión- comenté guiñándole un ojo, esperaba que no tuviera que esperar mucho, aunque recordando lo que había dicho en Titán, iba a esperar el tiempo que hiciese falta para que estuviera lista a dar aquel gran paso.

- Hemos estado ocupados los últimos años- Steve comenzó a hablar mientras nos dirigíamos a la sala, obviamente refiriéndose a lo que había ocurrido entre nosotros en Siberia- así que debemos investigar la situación actual de Hydra, no se sabe si podrán volver a activarse.

Tenía razón, suponía que no lo había comentado antes para no preocupar a los demás ya que habíamos derrotado a Thanos hace tan solo unos días, era demasiado pronto como para preocuparse de otras amenazas.

- Está bien- comenté entrando detrás de él a nuestro destino- puedo empezar a filtrar toda la información sobre noticias y eventos ahora- afirmé con seguridad mientras me sentaba en una de las sillas del amplio escritorio, abrí el sistema y junto a la ayuda de Friday, miles de sucesos de la base de datos de la policía y el gobierno se proyectaron por toda la habitación.

Yo había estado ocupado ayudando a Peter y preparando armaduras y el equipo de Steve había estado ocupado huyendo de las fuerzas gubernamentales así que, no me sorprendió ver que había muchos ataques de los que no teníamos conocimiento. No se sabía si eran obra de Hydra, era posible que fuesen teorías nuestras, pero debíamos investigar antes de poder emitir un juicio, más valdría prevenir que curar.

No iba a dejar que nada me estropease la vida feliz que podía llegar a tener ahora.

(...)

- Estás increíble- Alba por fin apareció en el gran salón de la torre, donde estábamos la mayoría de invitados charlando antes de cenar y celebrar la victoria.

Rodeé su cintura con mi brazo y me acerqué más a ella, inclinándome para besar sus labios con cariño.

- Siempre lo estás de hecho- añadí con una sonrisa, mientras le daba un sorbo a mi copa llena de champán. - ¿Qué tal tu tarde?- no nos habíamos visto desde la mañana y esperaba que estuviese cómoda aquí. - Espero que tu baño no haya sido tan malo sin mi compañía- le di un suave golpe con el brazo mientras alzaba mis cejas. A propósito, Wanda y Nat me han comentado que se mueren de ganas por conocerte más y entrenar contigo, creo que les caes muy bien- añadí recordando lo que me habían comentado.

La comida no tardó en aparecer, la suerte de tener a un millonario en el grupo era que las fiestas eran de lo más lujosas con todo tipo de privilegios como caterings preparados por los mejores chefs de la zona.

- Vamos a buscar a los demás, hay mucha gente a la que te tengo que presentar- sugerí al ver que el resto nos había abandonado entre la gente.

Esta era la mayor celebración que habíamos hecho nunca, estaba seguro de que la noche iba a ser espectacular.