El secreto del Duque

La decisión

Alexi Lubomirski se encontraba feliz de que de su lente saldrían las fotos oficiales del evento del sigo... Con cámara en mano y un grupo de asistentes siguiendo sus pasos, se sentía totalmente realizado en su carrera.  Hoy sin duda alguna tomaría la foto que lo haría viral y famoso a nivel mundial.

Había llegado el gran día; era el encabezado de todos los periódicos del mundo:  La boda del principe con la americana. 

La boda real entre el príncipe Enrique, duque de Sussex y Meghan Markle se celebraba en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor.  Todos afuera esperaban por la llegada de aquella pareja que había robado el corazón de muchos.

Ya la reina le había otorgado titulo de duques, lo que convertía al príncipe Enrique tras su matrimonio en Su Alteza Real el duque de Sussex, y Meghan Markle, por matrimonio, se convierte en Su Alteza Real la duquesa de Sussex. 

Los primeros en llegar fueron los duques de Kent, la anciana duquesa vestida de negro y blanco junto a un no muy sonriente duque, que era ayudado por una joven mujer para poder lograr llegar al lugar asignado.  Era sin lugar a duda el evento del año y por nada se lo perderían.   Aunque su huesos les rogaran que se quedasen en casa; ellos tenían que estar presentes.

Los invitados de honor seguían llegando y mostrando sus mejores galas, títulos y las más valiosas joyas que pudieron sacar ese día.  Los sombreros eran lucidos junto a aquellos colores pasteles y trajes negros de los hombres.

Los condes de York se presentaron junto a sus hijas, Doralix, la menor vestida con un traje color verde pálido, mientras que Lady Magaret vestida de amarillo.  Ella miraba sin cesar a todos lados en busca de aquel que le robaba el sueño.

Varios suspiros y murmullos se escucharon.  Era el duque que Granchester que se dirigía a aquella elegante iglesia acompañado del brazo de su madre; Lady Eleonor Baker, antigua duquesa de Granchester.

Lady Margaret pudo ver aquel que deseaba más que la vida misma y rompiendo todo el protocolo que llevaba un evento como este, comenzó a caminar de forma rápida y sin quitar los ojos de su más preciado deseo.

Ella había decidido que en este evento dejaría bien claro que él, Terrence, sería suyo. 

La joven condesa se molestó al darse cuenta que el duque no le prestaba la mínima atención y sin mirar por dónde iba tropezó con unos de los cables de sonido y terminó en el suelo mojado y toda sucia.

Muchos había visto la cara de la joven mujer y Alexi Lubomirski por fin, y mucho antes que comenzará boda ya tenia la foto que se haría viral y llevarla su carrera al nivel que deseaba; la cara de Lady Margaret mientras caía y terminaba sucia. Muchos reían, mientras que los encargados y los padres de la joven salían a ayudarla.

El divertido evento, el cual fue comentado en segundos por millones de personas en todo el mundo, colocó a la joven mujer en la protagonista de los más graciosos memes de las redes sociales. 

– Es lo mejor que le pasó; por resbalosa –dijo una de las jóvenes mujeres allí presente.– No la soporto, se cree la gran cosas., ufff

– Estoy totalmente de acuerdo contigo. –le dijo la otra sin dejar de mirar aquella pequeña TV que se encontraba en el área de descanso del hospital.  Estaban totalmente concentradas en aquel evento sin siquiera escuchar cuando alguien les hablaba.

– No entiendo la fascinación que tienen ustedes por esta boda. –dijo la joven doctora de ojos esmeralda.

– ¡Candy! –gritaron las dos jóvenes ante la sorpresa de verla parada junto a ellas.

– Dejen ya de perder el tiempo viendo eso. –les recriminó mientras tomaba una taza de cafe y evitaba mirar la tv.

– ¿Ay no me digas que no nunca has soñado con un principe azul? O mejor dicho ¿Con el duque de Granchester?  –le preguntó Melissa señalando el televisor en el momento en que presentaba a un Terrence preocupado por la caída de Lady Margaret, pero debía continuar con el protocolo y le había sido imposible ir a ayudarla.

Candy lo miró por segundos que parecieron eternidad.  Una solitaria lagrima corrió por su mejilla y negó con la cabeza aquella pregunta de su amiga.

– Creo que deberían estar pendiente de los pacientes y no de este teatro. 

– Por favor Candy... No me digas que ese bizcocho inglés del papi Granchester no esta para comérselo sin dejar huellas... -dijo que amiga mordiéndose el labio de forma atrevida.- Ese es el tipo de hombre que hace que uno se olvide hasta del apellido y produzca los pensamientos más impuros que una mente tan santa como la mía pudiese tener.

– Ay Rossy, si tu esposo te escuchara... Ese hombre jamás podría mirar  a una de nosotras. 

– Candy, si Meghan pudo ¿Quién dice que yo no pueda?

– Melissa digamos que unas miles de millas, millones de euros y la arrogancia de ellos...

– ¿Por qué eres tan negativa Candy?  Soñar no cuesta nada y soñar tener a el papi del duque de Granchester envuelto debajo de las sabanas, es  volver a creer en Santa.

– Es que simplemente soy realista y no vivo de sueños imposibles.  Discúlpenme pero creo que me voy a mi ronda y las dejo soñando en las nubes. —dijo la rubia mientras salía de aquel lugar.

La boda y recepción fue el éxito que todos esperaban; los novios lucían felices y todos los que compartieron en aquel evento hablaban de todos los detalles y de la elegancia del mismo.

Ahora sentado en su estudio a media luz, el joven duque, recordaba aquellas palabras que su abuela le había dicho momentos antes de la partida del los novios.  La reina le había dado un ultimátum.  Tenia que casarse antes de los 30 años, ya no aceptaría ninguna excusa y tenia que tener un heredero para el ducado y peor aún tenia que hacerlo cuanto antes.  La reina temía morir y no ver a su nieto realizado y por ello le obligaba a ello.

Se levantó de aquella silla, se dirigió al mini bar que tenia en aquel lugar, se sirvió wishy y caminó a la ventana. 

No había sido feliz nunca y tampoco pensaba serlo ahora.  ¿Entonces que más daba casarse con ella?   Era lo que todos esperaban... Era lo mejor para la corona. 

Había tomado una decisión... Se casaría.

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Hola mis bellezas... No podía dejar pasar la semana sin postear. Sorry no está 100% editado.

Y sí mis golosas están @Doralix palasatenea2018... Falta la golosa mayor...

¿Qué les pareció? Se nos casa nuestro duque...

¿Se imaginan un meme de Lady Margaret?