Un Omega en Apuros // Luzuplay

Capítulo X: Psicópatas, Advertencias y una Cita

Canción en multimedia: All That — Carly Rae Jepsen — Emotion

- ¿Me veo bien? — le dijo el pequeño omega enfundado en aquel brillante traje elegante de una tonalidad rojiza que combinaba y hacía resaltar su piel blanca. Le vió esperando una respuesta certera o un asentimiento de cabeza que le indicara que lo que se puso le quedaba bien, aunque para ser honesto otra alternativa tampoco tenía, el alfa había dicho (obligado por medio de psicología) que usara tal traje que el alfa se había costeado específicamente para él, sería un descaro suyo si procedía a tal dichosa cena sin usar el dichoso traje elegante regalo del alfa.

El alfa ojiverde le vió, con brillitos en los ojos, boca abierta (que se te meten las moscas, coño), y cejas alzadas. Se quedó maravillado después de ver salir al pequeño omega con el traje puesto y sin zapatos del baño en el que se había escondido para probárselo y mostrárselo a su mejor amigo, el omega esperaba que el más alto estuviera de acuerdo en la elección de aquella ropa para la cita.

El alfa (si bien es cierto que le entregó el número de teléfono del omega al alfa pelinegro) aún no se sentía del todo dispuesto a dejar ir a su pequeño omega por ahí con un alfa al que sólo le conocía poco sino que nada, aún estaba esa espinita de inseguridad y preocupación, sin embargo no se lo diría al omega, este se veía esperanzado (a lo cual el alfa estaba algo temeroso, Auron nunca fue así, era un capullo) y Rubius no quería apagar ese pequeño brillo del omega al referirse al alfa pelinegro y su hermoso ser que ponía un poco (tal vez un poco) celoso al alfa ojiverde, aunque, ¿quién podría culparlo? Siempre fueron amigos, Rubius cuidó de él y siempre estuvo ahí, y ver que ahora alguien más tenía su corazón lo hacía quedar en segundo plano. Se juró controlarse y, claro, hacer mofa del alfa pelinegro para divertirse, sí, para divertirse.

- Te ves guapísimo, Auron, joder. Si Luzu no te marca yo sí — le dijo el ojiverde riendo a carcajadas mientras se mordía el labio y ponía una mirada pervertida. El omega sólo abrió sus ojos espantado pero después se rió acompañando al alfa con un toque de carmín acompañando sus mejillas. Claro que el omega ya había recibido halagos antes, pero nunca se los creyó, por eso siempre se sonroja.

- Gracias, ¿eh?, pervertido de mierda -- le dijo Auron, mientras se reía junto con el alfa — bueno, ya que ya vi que te gusta, iré a quitarme esto que ahoga de cojones -- Auron procedió a dirigirse a su baño para quitarse el colorido traje y cambiarlo por algo más cómodo.

- Oye, Auron, ¿quieres ir por un café, macho? — preguntó Rubius, mientras revisaba su celular.

- Claro, espera, ya termino — le dijo Auron metido en el baño aún.

- Que te tardas más que una chica, joder — le gritó Rubius sonando enojado pero en realidad, sólo quería enojar al omega.

- Que te esperes, coño — le gritó Auron algo enojado, frunciendo el ceño y sus labios en una ligera mueca que demostraba inconformidad. Rubius no dijo nada pero se rió un poco.

- Ya, ¿contento, gilipollas? — le dijo Auron, mientras salía del baño con su típica camisa negra y pantalones negros puesta mientras Rubius se reía de él -- eres un idiota, tío.

Rubius se acercó aún riéndose al omega que estaba cabreado.

- Que estoy bromeando, Auroncito — le dijo el alfa mientras se acercaba a él y lo abría sus brazos para envolverlo en un abrazo.

- Ni se te ocurra, estoy cabreado contigo, y ¿Auroncito? — preguntó Auron arqueando las cejas.

- Sí, Auroncito, ¿por? — preguntó Rubius.

- No sé, sólo he escuchado a Luzu decirme así — dijo Auron, contrayendo sus hombros.

- Ah, o sea que ahora sólo el estúpido "todo el pueblo me ama" Luzu puede decirte asi, ¿eh? — dijo Rubius mientras se giraba dándole la espalda al omega con sus brazos cruzados.