Dionisio permanecía en silencio, con la vista fija en el asiento delantero mientras Refugio miraba por la ventanilla. En unos minutos el avión aterrizaría, estarían de vuelta en casa y todo lo que habian vivido se quedaría atrás. Esa mañana ninguno de los dos había sido capaz de decir nada que no fuera sobre el trabajo.
Hacia dos días que habian acabado la campaña, pero Dionisio había retrasado el regreso para pasar mas tiempo junto a ella ¿Por qué? Ni siquiera el mismo lo sabia.
Solo estaba seguro de una cosa, jamás olvidaría estos días ¿ella lo haría?
El avión toco al fin la pista y ambos, sin saberlo contuvieron el aliento, procurando no mirarse el uno al otro. Llegado el momento desembarcaron y fueron en busca de sus maletas. Por suerte, el resto del equipo viajaba con ellos, el estar rodeados de compañeros que no paraban de hablar relajaba el ambiente.
-Refugio¿esa no es tu maleta? –Mark frunció el ceño mirándola –Refugio, tu maleta
-¿Qué? –Ella reacciono y se dio prisa en tomarla –Me despiste
-Ya veo –El sonrió ampliamente -¿Tienes ganas de ver a tu sobrina?
-Sophia–Refugio susurro su nombre había estado tan encerrada en ella misma, tan confundida por el regreso y lo que aquí les esperaba que ni siquiera había pensado en su sobrina. Su niña Al fin volvería a verla –La necesito
-Señores –Dionisio se situó frente a todo su equipo mirándoles –Primero de todo darles las gracias y enhorabuena por su trabajo. La agencia Ferrer es un equipo y si no fuera por todos y cada uno de ustedes no podríamos seguir adelante –mientras hablaba posaba la vista en cada uno, cuando se fijo en Refugio no pudo dejar de mirarla –Ahora estamos de regreso en casa. Vuelvan con su familia
Todos aplaudieron, incluida Refugio que le miraba fijamente De regreso en casa, con la familia De regreso a su vida.
Con malestar y bolsas el equipo salio por las puertas hacia la sala de espera del aeropuerto. Familias al completo esperaban la llegada de sus maridos, sus hijos, sus hijas, sus hermanas, sus madres. Poco a poco cada uno corria hacia sus seres queridos, gritaban, se abrazaban.
-¡Dionisio! –Gabriel se encontraba en la otra punta de la sala con una sonrisa divertida, Daniel frunció el ceño ¿desde cuando su hermano venia a recibirle? Entonces tuvo la visión completa de la situación, su hermana, sus sobrinos, su padre, su madre, su cuñado ¿Pero que estaban haciendo todos allí?
-¡Tito! –Trevor salio corriendo hacia el
-Hola Trevor –Dionisio sonrió y por primera vez cargo a su sobrino entre sus brazos, toda su familia le observo sorprendida
-¿Quién eres tu? ¿y que has hecho con mi hijo? –Walter le observaba divertido
-Desde luego si que te ha sentado bien las vacaciones le miro sorprendido
-Dionisio, cariño –Merianne se lanzo a abrazar a su hijo
-Bienvenido a casa –George le dio una palmada en la espalda
-Hola hermanito –Melanie le sonrió, pero su mirada se centro tras el -¡Refugio!
Refugio que se encontraba al otro lado, saludando a Lucia que tambien había venido a recibir a sus compañeros, miro en dirección a los Ferrer.De repente Melanie salio corriendo hacia ella y la abrazo eufóricamente, después el resto de la familia se acerco a saludarla.
-¡Que bien te ha sentado el sol! –Melanie saltaba de un lado al otro
-Es cierto querida –Merianne se acerco a darle dos besos –Estas estupenda
-Gracias –ella se sonrojo, ¿Cómo mirarla a la cara? Sentía que si lo hacia, se enteraría de todo lo que había pasado en Acapulco
-Ey preciosa –Gabriel la abrazo delicadamente, ella se quedo estática sin saber que hacer ¿abrazándola? después se alejo y le sonrió -¿Mucho trabajo?
-Si, bueno –Refugio estaba visiblemente nerviosa
-Creo que alguien ha venido a buscarte –Lucia que había permanecido a su lado miraba sonriente hacia las puertas del aeropuerto
Damián caminaba sonriente hacia ellas, cargando a su pequeña en los brazos y junto a el Camila.Refugio se quedo paralizada mirándolo y las lagrimas comenzaron a desbordar sus ojos. La familia Ferrer la observaba atentamente, incluido Dionisio que sentía la necesidad de abrazarla al verla llorar .
-¡Tata! –Damián había dejado a la pequeña en el suelo y esta salio corriendo hacia su tía Sin pensarlo Refugio soltó su bolso dejándolo caer al suelo y corrió al encuentro de su sobrina, se lanzo al suelo para abrazarla y permaneció allí de rodillas, estrechándola entre sus brazos.
-Mi pequeña –las lagrimas seguían saliendo de sus ojos –Te he echado tanto de menos
-¿Y a mi? –Damian se paro frente a ellas mirándola con una sonrisa, Refugio no respondió. Se incorporo con la niña entre sus brazos y se lanzo en busca de los de su hermano.
-¡Ey! ¡¿Yo que?! –Camila se limpio las lagrimas y se lanzo a los brazos de ellos
-Ya te estaba empezando a echar en falta –Damián se aparto liberando a todas y sonriendo
Lucia con una sonrisa se despidió de los Ferrer y cogio el bolso y la maleta de Refugio y se dirigió hacia ellos.
-¿Por qué no estas tu abrazándola tambien? –Melanie observaba a su hermano de reojo
-¿Por qué tendría que estarlo? –Dionisio suspiro, aunque nada deseaba mas
-Entiendo –Ella negó con la cabeza
Aun con su pequeña entre los brazos y abrazada a su hermano, Refugio salio del aeropuerto, seguida por sus dos grandes amigas.
-Al parecer tu hermano llevo a Sophia al parque y se encontró con Lucia, tuvo el valor de invitarla a tomar algo –Camila sonreía emocionada –Y las segunda fue hace dos noches, fueron a cenar y yo me quede con la niña
-¿Estan saliendo? Estan saliendo –Refugio casi salta del sofá ¡Su hermano estaba dispuesto a rehacer su vida! –Un momento ¿tu y Gabriel?
-El día que tu hermano fue a despedirte al aeropuerto, Gabriel se ofreció a llevarles de vuelta al apartamento. Tu hermano tenia que trabajar, así que yo estaba esperando en la puerta para quedarme con Sophia–Camila suspiro –Nos invito a tomar un café, me pareció tan guapo, tan simpático. Le di mi teléfono y al día siguiente me invito a cenar.
-¿Y te acostaste con el? –Refugio la miraba atenta -¿Solo esa vez?
-No –Ella se encogió de hombros –Quedamos dos veces mas
-¿Y? ¿Hay algo? –estaba preocupada Ella sabia perfectamente como era Gabriel, aunque debía de admitir que su amiga era igual. Pero ¿Y si se ilusionaba? ¿y si el le hacia daño?
-No, bueno no se –Camila se encogió de hombros –Me gusta
-Ten cuidado –Refugio suspiro tendría que hacerle una visita a Gabriel y mañana seria perfecto. Era domingo y ya sabia donde estaba la casa de sus padres.
-Lo mismo te digo –Camila la miro de reojo
-¿Y como fue en Acapulco? –Gabriel miraba a su hermano con una ceja levantada
-Bien –Dionisio tomo la copa de vino y dio un sorbo –Las campañas quedaron genial
-No es eso precisamente lo que Gabriel pregunta –Melanie sonrió divertida
-Refugio parecía muy feliz –Merianne sonrió pensativa, cuando se dio cuenta de que todos la estaban mirando amplio su sonrisa –Al ver a su familia
-Quiere mucho a su sobrina –Dionisio respondió inconscientemente y todos le miraron
-¿Sabes que fue la modelo de la campaña de ropa interior de Lewis? –Melanie miro a su hermano esperando su reacción
-¿Modelo? –Walter observo a su hija sorprendido
-Si y precisamente aquí tengo la foto principal de la campaña –Melanie sonrió triunfal, metió la mano en su bolso y saco la revista –Mirad
-A ver –Gabriel arrebato la revista a su hermano y la observo sorprendido –Waoo Que secretaria ¿eh hermanito?
-Esta preciosa –Merianne sonreía mirando la portada
-¿Estas bien Dionisio? –George frunció el ceño, su esposa se estaba pasando y eso podía costarles una pelea nueva
-Perfectamente –Dionisio se levanto bruscamente de la silla –Disculpen
-Dame –Melanie le quito la revista a Gabriel y con una sonrisa salio a toda prisa tras su hermano
-¿Qué esta pasando? –Walter miraba la puerta sorprendido
-No quieras saberlo –George negó con la cabeza, su esposa era muy insistente
Dionisio atravesó la entrada dirección a las escaleras, la sangre le hervía ¿La foto? Ni siquiera había querido verla. Todo el mundo podría tener esa imagen de ella
-¡Dionisio! –Melanie corrió hasta pararse frente a el -¿No quieres verla?
-Te estas pasando Mel –Dionisio apretó los puños
-¿Por qué? –Ella puso cara de inocente –Solo es una foto
-¿Qué estas buscando? –Dionisio la perforo con la vista
-Bien, ten –Ella le choco bruscamente la revista contra el pecho –Observa a la mujer que estas dejando escapar. Buenas noches hermanito.
Y con una triunfal sonrisa regreso al comedor, dejando a su hermano frente a la escalera con la revista entre sus manos . Dionisio alejo poco a poco la revista de su pecho y bajo la vista hacia ella ¿Refugio? ¿Esa era ella? No podía dejar de mirarla y por una extraña razón eso le molestaba mucho mas Si el no podía dejar de mirar ¿Qué harían los demás? Cualquier hombre podría disfrutar de ella, de su imagen, de su cuerpo
Refugio paro su auto frente a la casa de los Ferrer , se sentía extraño estar ahí, llamo al telefonillo y dio su nombre. Inmediatamente la puerta se abrió para dejarla pasar, paro el auto frente a la entrada y se dirigió al interior.
-Refugio bienvenida cielo –Merianne camino hacia ella con una sonrisa –Me encanta tenerte aquí ¿en que puedo ayudarte?
-Vera necesito hablar con Gabriel–al ver como fruncía el ceño desconcertada, decidió buscar una buena excusa –Se trata de algo de la oficina
-Ah, claro –Merianne le señalo la puerta del salón –Adelante, le mandare llamar
-Gracias –Refugio camino hacia el salón y se paro tras el sofá, apoyando las manos en el
-¿Refugio? –Dionisio se encontraba tras ella, parado en la puerta y observándola con el ceño fruncido -¿Ocurre algo?
-No –ella le miro nerviosa –Necesitaba hablar con Gabriel
-¿Con mi hermano? –Dionisio apretó lo que llevaba entre sus manos, ella bajo la vista y abrió los ojos sorprendida al ver su imagen –Mi hermana la compro
-Ah –Refugio volvió a mirarle a la cara Claro su hermana ¿Por qué iba a comprarla el? Pero ¿Por qué la tenia ahora?
-Ey preciosa –Gabriel entro a la sala con una gran sonrisa, se acerco a ella y la abrazo eufóricamente -¿Qué puedo hacer por ti? Sabes que estoy a tu entera disposición
-No te quitare mucho tiempo –Refugio entorno los ojos mirándole –Seré breve
-Como quieras –El se encogió de hombros -¿Y de que se trata?
-Camila-Cuando Refugio dijo su nombre los ojos de Gabriel se abrieron sorprendidos y Dionisio miro tanto a uno como a otro confundido –Eres un buen hombre Gabriel pero te gusta jugar con las mujeres –Refugio se acerco a el lentamente –Me importa muy poco lo que hagas con tu vida, siempre y cuando no le hagas daño
-No es mi intención –Gabriel la miro serio
-Mas te vale, porque ella no esta sola –entorno los ojos mirándole –Y te aseguro que si le haces daño, no podrás escapar de mi. No habrá lugar en el mundo en que puedas esconderte, te encontrare y desearas no haberme conocido en tu vida –Refugio sonrió dulcemente como si lo que acabara de decir no fuera nada -¿Entendido?
-Si –el asintió sorprendido ¿Esa era la secretaria de su hermano? Por su parte Dionisio permanecía atento a toda la conversación y aguantaba la risa al ver a su hermano achantado ante ella.
-Perfecto, siento haberte robado tu tiempo –Y con su dulce sonrisa Refugio salio del salón pasando por delante de Dionisio
-¿Qué? –Gabriel miro a su hermano molesto
-Me estaba preguntando si necesitas cambiarte de ropa interior –Dionisio comenzó a reír a carcajadas
-¿Te estas riendo de mi? –Gabriel frunció el ceño
-Cada día me gusta mas esta mujer –Melanie se asomo a la puerta del salón con una sonrisa
-¿Estabas escuchando? –Dionisio la miro con una ceja levantada
-Si –ella sonrió ampliamente –Y no deberías burlarte de Gabriel , ¿tengo que recordarte que te escondiste en su cuarto de baño cuando te lo ordeno?
-¿Emh? –Gabriel miro a su hermano divertido -¿En su baño?
-Y tu cierra el pico –Melanie le miro seriamente –Yo misma ayudare a Refugio a despedazarte si le haces daño a Camila.
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La Secretaria
RomanceBueno aquí les traigo esta nueva historia espero que les guste y es una adaptación