capitulo 4

2K 104 3
                                    

ALBERT

—¿Se puede saber que te pasa? ¿Por qué me tratas así?—preguntó llevando mi mano a donde me dio el golpe y confirmando que si estoy sangrando.

—¿QUE, QUE ME PASA? ¿EN SERIO ME ESTÁ PREGUNTANDO ESO, DESPUÉS DE LO QUE ME HICISTE? —pregunta aun gritando y ahora estoy mas confundido que cuando me golpeó.

—Pero... ¿Qué diablos te hice? Si lo único que he hecho desde que te conocí es velar por ti y amarte como a nadie en este mundo —digo ya enojando no se que diablos le pasa, ¿Que diablo le hice? —¿Es porque no te llame ayer? ¿Es por eso? Mi amor estuve todo el día con los clientes y para cuando quise llamarte ya era pasada la media noche y no quería despertarte. Además mira teléfono no funciona miralo está dañado —le explico mostrándole el teléfono tratando de hacer que entienda porque no la llame creyendo que su arranque de ira y violencia es por eso, porque ¡Joder!, no encuentro otra explicación.

—¿SABÉS QUÉ? TU Y TU MALDITO TELÉFONO SE PUEDEN IR A LA MIERDA —dice quitándome el teléfono y lanzandomelo a la cabeza ¡De verdad que quiere matarme esta mujer! —NO ME INTERESAN TUS EXPLICACIONES YA SE PORQUÉ NO ME LLAMASTE Y NO FUE PRECISAMENTE PORQUE ESTABAS EN UNA REUNIÓN, PERO YA NO ME IMPORTA AHORA LARGO DE MI CASA SI NO QUIERES QUE TE TERMINE DE PARTIR LA CABEZA —me grita amenazandome con el sartén nuevamente —ESPERÓ NO VOLVER A VERTE NUNCA MAS. LAMENTO TANTO HABER PERDIDO MI TIEMPO CON ALGUIEN COMO TU, ME ARREPIENTO DE HABERTE CONOCIDO, DE HABERLE DADO MI CORAZÓN A UN SER TAN BAJO Y DESPRECIABLES COMO TU, Y TE JURO ALBERT LEX QUE CON LA MISMA FUERZA QUE TE AMÓ CON ESA MISMA FUERZA TE ODIARE. AHORA TERMINA DE SALIR PARA NO VOLVER NUNCA MÁS —me empuja hasta la puerta, la abre y yo estoy como ido que se hace en una situación como esta cuando la persona que mas amas en la vida rompe contigo sin razón alguna.

—Por lo menos dime que te hice para que rompas conmigo así como si yo fuera un perro después que te lo he dado todo de mi ¿No crees que me merezco al menos una explicación? —exijo con un gran nudo en la garganta y un dolor en el peso que amenaza con dejarme sin respirar y que joder mi vida sin ella no tiene sentido.

—No te mereces nada de mí, ni siquiera el saludo ahora largo y no vuelva. Ah, y no te preocupes por tus cosas están todas en tu casa juntas con tus llaves, no te preocupes por devolverme la mía mañana cambiare la cerradura. Ahora fuera de mi casa y de mi vida ¡Adiós para siempre! —dice cerrandome la puerta en la cara. Me quedo parado mirando la puerta, pensando en cómo una persona te puede volver la vida mierda en un solo segundo, sin darte ninguna explicación o un porque ¡Yo que sé!, algo que por lo menos no te deje tan destrozado y sin saber ¿Por qué? ¿Sera que ya no me ama? ¿Que dejó de amarme en cinco días? ¡Dios, ayudame!, dime ¿Que hice mal como para que la mujer que hace cuatros días me juraba amor eterno me odie y me desprecie tanto?, dime que hice, y como pudo arreglarlo, ¡Dios!, tu sabes que la amo mas que a mi mismo, que sin ella me siento muerto, sin vida, siento como si me hubieran arrancado la vida de un solo sopló.

No se cuanto tiempo llevo aquí parado solo se que sigo sangrando y sin entender nada. He buscado una y mil explicaciones e hipótesis que me puedan ayudar a entender donde falle, que hice mal, porque debo ser yo, en algo debí de haber fallado como para que ahora ella me odie tanto... Dejo de martirizarme con que hice o no hice y decidí dale su espacio para poder volver a intentar hablar con ella, porque si de algo estoy seguro es que no puedo dejar esto así. Necesito una explicación que me ayude a entender que paso. Me encamino al auto, me monto y manejo hasta mi casa necesito curarme la herida y ver si necesito puntada ¿Como pudimos llegar a la agresión física si lo que yo más odio y aborrezco es la violencia hacia cualquier persona? No soy un santo tuve mis peleas en la universidad, pero luego que me gradúe y empecé a trabajar deje atrás toda esas locuras solo me he concentrado en trabajar y hacer feliz a Patricia... ¡Uff!, Patricia, el sólo hecho de pensar en ella me hace volver a repasar lo que pasó hace un rato en su casa ¡Por Dios! ¡Me golpeó!

Llego a mi casa y llamo a mi papá para que venga. Necesito hablar con alguien y quien mejor que me padre quien también es mi mejor amigo y el hombre más sabio que he conocido, quizás el me ayude a entender que esta pasando, porque yo cada segundo que pasa estoy peor que el anterior. La ansiedad, la incertidumbre y la desesperación están a punto de matarme, que se supone que haga cuando ni siquiera se que hice, voy al baño por el botiquín de emergencia para curarme la herida que aún sangra pero ya no tanto.

Luego de curarme la herida y verificar que no necesito puntadas me di un baño de agua fría para refrescarme y relajar mi cuerpo la verdad que todo esto me esta superando... Estoy en la sala esperando a mi papá que no debe tardar en llegar, voy a la cocina por un vaso de agua me gustaría algo más fuerte pero no bebo licor cuando mucho una copa de vino o una cerveza pero nunca mas de ahí. Y aunque quisiera hacerlo ¡No puedo! Con beber hasta perder la consciencia no solucionaré nada. Me tomo el vaso de agua de golpe, justo en el momento que termino tocan la puerta y estoy seguro que es mi papá, voy hasta la puerta la abro y efectivamente es mi papá.

—Hola hijo ¡Que bueno verte! ¿Cómo estuvo el viaje? —me pregunta abrazándome.

—Bien papá, pero no quiero hablar de eso necesito tus consejos hoy más que nunca lo necesito —digo dejándome caer en el sofá.

—Que pasa hijo ¿Por que tan abatido? —me pregunta. Lo invitó a sentarse y le cuento todo lo sucedido hoy hasta le cuento que no la llame ayer y el porque, también le cuento el encuentro que estuve con Leidy. Aunque no tiene nada que ver pero buen debía contarle todo, cuando termino mi relato el se queda pensativo.

—La verdad yo tampoco sé que pudo haber pasado para que ella se porte así. Ella siempre ha sido una chica muy linda, muy centrada, no me parece el tipo de persona que actúa así impulsivamente sin un porque algo debió de haber pasado para que actúe así —dice y yo se que es cierto.

—Eso lo se papá, pero ¿Qué? ¡Joder!, ella no quiso decirme nada, solo me echo como perro de su casa y me estoy volviendo loco ¿Qué hago papá? —preguntó más como una súplica que como una pregunta.

—Dale tiempo hijo deja que se calme un par de días y luego intentas hablar con ella nuevamente, se que será difícil porque ella es la mujer que amas, pero debes darle tiempo. Y cuando hables con ella escucha todo lo que tenga que decirte sin interrumpirla aunque lo que te esté diciendo no te guste. Y ya no te preocupes todo estará bien ustedes se aman y sea lo que sea que halla pasado lo solucionaran juntos —me aconseja y aunque no esté tan tranquilo al menos ya me siento mejor con algo de esperanza... Nos quedamos hablando un rato más hasta que el se va porque debe volver a la oficina tenía una reunión importante. Yo me quedo un rato más pensando que pudo haber pasado hasta que decido pararme y hacer algo de comer. Llamo a los chicos para invitarlo a cenar y preguntarle si saben algo sobre lo que le pasa a Patricia para que actúe así. Me pongo a preparar la cena y dejo eso aun lado ya veré cómo lo averiguó porque de que lo averiguó lo averiguó.           

La Boda Del MillónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora