¿i hate you?

•14•

el finde semana había sido un nuevo descubrimiento para Angie, ahora que podía desahogarse con sus amigas, descubrió que estar clandestinamente enamorada de Brisa no era tan malo.. bueno era una mierda, pero ya no podía hacer nada para evitarlo.

El lunes todo iba bien, estaba con sus amigas caminando directamente a su casillero, pero cuando intento abrirlo, este no le dejaba.

—intenta otra vez— dijo Mindy y Angie volvió a introducir la combinación, pero otra vez no lo podía abrir.

Le dio unos cuantos golpes a la puerta y este seguía sin querer ceder, se hacia tarde para su primera clase y tenía ¡Inglés!.
Al final tuvo que desistir y fue hasta la clase, el profesor le resto puntos y ni siquiera se tomo el tiempo de escuchar la excusa de Angie.

Ella apreto los dientes, el dia no podía empeorar.
Milagrosamente, ninguna de las chicas insoportables, la habia molestado, aun asi la ojicafe esperaba que lo hicieran, pues tenia muchas ganas de ver a la castaña pequeña, a estas alturas, ver sus ojos era lo unico que le podía subir un poco el animo.

Despues de las primeras clases, al tomar su mochila y cargarla en sus hombros, las cuerdas se rompieron.

—¿pero que?—comenzo, observo como Julian y Yaco chocaban los cinco, disimuladamente antes de entrar al salón.

Miro las correas y era obvio que alguien las habia cortado, asi que cargo su mochila con las manos.

—seguro lo del casillero fueron ellos—murmuro Mica y un poco enfadada también.

Ya habia informado al conserje y este no habia logrado abrir el casillero, alguien manipulo la cerradura para cambiar la combinación de apertura, asi que Angie tuvo que buscar otro.

Se encontraba abriendo su nuevo casillero, mientras a lo lejos contemplaba como Julian se carcajeaba

sus amigas le habian ayudado a traer todos los libros y sus cosas, pero no se quedaron con ella porque tenian que ir a clases diferentes, se retiraron disculpandose con la ojicafe

Angie fue guardando cada libro, no podia creer que tuviera tantos
Fue casi una sorpresa cuando escucho el ruido de unos pasos acercandose y al levantar el rostro se encontró con Brisa.
Ella vestía una blusa y una falda, al igual que siempre, se había detenido mirando con asombró a la ojicafe

Angie no retuvo la sonrisa que se le formo en los labios, mirandola con cara de boba.
Brisa despues de mirar a Angie con la boca entreabierta y un poco sonrojada, carraspeo secamente.

—¿que haces aqui?—Angie fruncuo el ceño hacia el chico que las observaba con cautela, parecía estar vigilandola.

—tu querido novio saboteo mi casillero y me mudaron a este.—se encogio de hombros

—eso suena a algo que haría yo—dijo Brisa arrugando la nariz y Angie no pudo evitar mirarla con felicidad.

Era muy hermosa, debia ser un delito ser tan adorable y sexy al mismo tiempo. Si dependiera de ella, Brisa estaria tras las rejas por crimen desde hace años.

Brisa ante el silencio de Angie, volvió a sonrojarse e intento abrir la puerta de su casillero, ignorando a la peliazul.
Sus dedos fallaban y tenía que comenzar desde el principio, mientras que Angie la contemplaba, estaba feliz ya que eran vecinas.
Levanto la vista y observo con burla a Julian, quien abrio los ojos dandose cuenta que había cometido un error.
Angie se rio de su expresión y Brisa volteó a verla con ojos asesinos.

—¿de que tanto te ries fenómeno?—le pregunto a la defensiva, creyendo que se estaba burlando de ella por no lograr abrir su casillero.

—de la cara de espanto de tu novio—dijo la palabra con mal sabor en la boca y pronto su sonrisa desapareció y recordo la triste verdad "tu a Brisa no le gustas, ella de seguro no te soporta, asi que deja de actuar patetica frente a ella".