Capitulo 1

490 41 2
                                    

New York, tres semanas después.

Vi como mamá sacaba las cajas de la casa, miré tristemente el vecindario, no quería irme, pero sería mejor para mamá, para las dos, me hubiese gustado tener a mi hermano mayor aquí, se que suena egoísta, pero me gustaría que sintiera lo que yo siento, y que lo que hizo no ayudo en ningún sentido, lo extraño, sé que no va a volver, pero creo que en cierto modo lo entiendo, si yo estuviera en su lugar también lo habría hecho, sé que mamá diría que estoy loca, pero igual lo admiro, Finnick es un ídolo para mi.

-Vamos, Sian, no tengo todo el tiempo del mundo- Dijo mi mamá desde la puerta.

Sabía lo que quería, así que me levante del frío y verde césped, entré a la casa y agarré mis maletas, ella llamó un taxi, no tenemos auto porque hace una semana se lo vendió a un canadiense, lo cual no tenia mucho sentido, vivíamos en un tranquilo vecindario en New York, hubo problemas entre mi mamá y papá, y aunque los quiero a ambos finalmente me quede con mi mamá, 1)Mi papá y yo no éramos tan unidos, de hecho, apenas y nos decíamos hola, a pesar de eso lo quiero, 2)Ella es mí mamá, y no me importa que edad tenga, voy con ella porque fue conmigo adentro ocho meses, sé que son nueve pero yo nací a los ocho, no quiero dar detalles de eso, además de que la amo.

-¿Así esta mejor?- Le pregunté con los modales que ella me había enseñado.

Mamá me miró unos segundos, su mirada se cristalizó, desvió la mirada y finalmente asintió.

No sé como es que tenía una mamá así, no nos parecíamos mucho, ella es rubia con ojos verdes, mientras que yo soy castaña de ojos marrones, todos decían que me parecía a papá, y no pude evitar sentirme mal por ella, porque era como un recuerdo que no quería, como una cicatriz en el rostro.

Después de lo que para mi fue una eternidad abordamos el avión, volviendo a nuestras raíces, me pregunto si alguien me recordará, sé que era tonto pensar eso, han pasado tres años, lo más tonto es que pensaba en un chico en especial, y aunque no lo admita, me encantaría que no se hubiera olvidado de mí, pero solo son ilusiones.

Miré una ultima vez por la ventana antes de dormir, estaba cansada y el viaje era largo.

¿Cómo salvar a Ashton Irwin?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora