Capítulo dieciséis

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–Rachel, deja de... -me interrumpió cuando ella comenzó a vomitar todo el alcohol que bebió, tomamos demasiado las dos.

–Que asco –dije cuando el olor me llegó, comencé a tener arcadas y salí de ése baño al instante.

–¿Estás bien? –me preguntó una voz detrás de mí, volteé y era Tom.

–Sí –reí, que fea situación.

–¿Estás segura? –preguntó.

–Sí, Tom –respondí y se quedó mirándome.

–¿Hablamos? –me preguntó y reí, me causó gracia porque estábamos en silencio y de la nada me pregunta eso.

–Bueno.

Él salió, tomé su brazo y volví a hacer que entre al pasillo de los baños.

–¿Aquí? –me preguntó.

–Sí, allí no se escucha nada, está la música muy alta –dije y me sostuve de la pared.

(...)

No sé como pero anoche terminé teniendo sexo con mí ex. Maldita sea.

Joel no estaba, eran las 12pm.

Mí mamá en una hora se iba a no sé dónde. Y yo con resaca.

Joel|

Los resultados dieron positivo. Ahora a cumplir mí rol de padre.
Estaba feliz.

–Liam, ven aquí –dije mientras él gateaba por la habitación.

Él me miró y siguió gateando.

–Liam, ven –dije riendo y él rió.

–Na –dijo y gateo lejos de mí.

Lucía se fue a trabajar y me quedé a cargo de él, quería acostumbrarlo a estar conmigo.

Me quedé jugando con él y recibí un mensaje de _____. Desde anoche no me ve.

–¿Vamos a mí casa? Te voy a presentar a una personita especial –me levanté del suelo y lo cargué en mis brazos.

Junté todo lo necesario y guardé las listas que me hizo Lucía.

–Ahora sí nos vamos –dije, le dí un jueguete, salí de la casa y nos fuimos a mí casa.

Entramos a mí casa y _____ estaba almorzando.

–Hola mí amor –la saludé– Saludala Liam –agarré la manito de él y la agité.

–Hola –me dijo _____ y miró a Liam– ¿Es tu hijo?

–Sí, las pruebas dieron positivo –le respondí y ella se quedó en silencio– Dí algo, amor...

–¿Qué quieres que te diga? Felicidades –dijo ella.

–Ella es ______, Liam –dije y él me miró confundido– Es la novia de papá.

–¿Pa? –preguntó Liam– ¿Papá? –sonreí.

–Sí, papá, muy bieeeen –besé su mejilla.

_____|Rayita.

Joel llegó con un bebé en brazos, Liam, su hijo.

Liam era igual a Joel, sus rulitos, su boca, su naríz... hasta pestañas largas tenía.

Estuve pensando en Tom, por alguna razón no dejaba de pensar en él. Anoche tuvimos sexo, no sé qué nos llevó a eso.

Tenía varios mensajes de Tom en mí celular.

Al terminar de almorzar lavé todo y recogí mis cosas. Zabdiel me llamó preocupado que de anoche no sabía nada de Rachel, al parecer habían peleado y Rachel se fue. ¿Cómo dejó que se vaya sola?

–Me voy donde Zabdiel, Joel, te veo luego –dije.

–_____... –dijo él– ¿No puedes quedarte? Quiero que compartas con él también, amor...

–Luego, tengo cosas que hacer, Joel.

No esperé respuesta y me fui donde Zabdiel. Cuándo llegué me abrió él, estaba súper preocupado.

–¿Cómo dejaste que se vaya sóla, Zabdiel? –le pregunté enojada.

–¡Sólo entré a recojer nuestras cosas y al salir ya la perdí de vista! –exclamó.

–Ya, no grites, perdóname. También estoy preocupada, vamos a buscarla donde ella siempre frecuenta, Zab.

–Es que no... ya la busqué anoche, _____, ¿y si le pasó algo malo?

–No digas eso, vamos a buscarla y de ahí nos vamos a hacer una denuncia por desaparición, ¿sí?

Él asintió con la cabeza, se lo notaba angustiado y cansado.

–Desde anoche no duermo nada y no te avisé antes porque no quería molestarte.

–Zab, cuando algo así pasa no importa nada, me llamas y me cuentas, vamos.

Salimos de su casa y buscamos en lugares donde ella podía estar.

(...)

Llamé a Lei y me dijo que ella estaba allí, tanto buscamos y al final estaba en casa de Leilen. Fue un día muy movido.

Volví a casa y vi a Joel dormido con Liam a su lado. Me dió mucha ternura, amaba con locura a éste hombre.

Recogí los juguetes del niño y los guardé en la mochila que trajo Joel.
Fui a abrir la puerta porque alguien había tocado.

–Hola –saludó una chica– ¿Está Joel? Soy Lucía –me sonrió muy amable.

–Hola, sí está... pasa –dije, ella entró y fui a despertar a Joel– Amor, llegó la mamá del niño –dije moviéndolo.

–Ya voy –dijo dormido– Ayúdame.

Negué con la cabeza, cargué al bebé con cuidado y Joel me quedó mirando.

–Te ves bien de mamá –me sonrió tiernamente.

–Me veo mejor con una botella en la mano –ambos reímos y él se levantó– Dale que está la chica esperando.

–Lucia se llama, Boo –cargó al bebé, tomó la mochila y fue a la puerta.

Los miré y no pude evitar sentir celos, está mal pero saber que ellos tuvieron algo y nunca hablaron al terminar me hace sentir muy pequeña al lado de Lucía.

Ellos hablaron un poco y luego Lucía se fue.

Joel se acercó a mí, me tomó de la cintura y me dió un beso en los labios. Me sentí mal, yo lo engañé con Tom...

–¿Qué pasa? –me preguntó– ¿Te sientes bien? Estás muy pensativa –dijo acomodando mí cabello.

–Nada, todo bien –lo abracé. No es cierto, tengo miedo de perderlo, no me merezco todo el amor que él me tiene.

–¿Estás segura, Boo? –preguntó– Te siento como triste, no sé –acarició mí espalda.

–No Jo, estoy bien. Sólo estoy cansada –besé su mejilla y me fui a la habitación.

Tomé una ducha, me puse mí pijama y me acosté dispuesta a dormir.

Dí muchas vueltas pensando en Tom, los sentimientos por él regresaron y me estaban torturando lentamente.

–Jo, te amo mucho, ¿sabes? –lo miré con lágrimas en mis ojos– Me haces muy feliz, estoy muy orgullosa de vos... Y también quiero que sepas que estoy muy enamorada de vos, amor, gracias por todas las cosas que hiciste por mí, gracias por todo, mí vida –solté unas lágrimas, él estaba mirándome con una gran sonrisa y algunas lagrimitas saliendo de sus ojos.

–Que hermosa amor, sabes que te amo aún más y estoy muy orgulloso de ti también, orgulloso de nuestra relación –besó mis labios– Y me hace muy feliz saber que me apoyas con lo de Liam.

Nos dormimos abrazados ésa noche.

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•𝓜𝔂 𝓫𝓸𝓸 //𝓙𝓸𝓮𝓵 𝓹𝓲𝓶𝓮𝓷𝓽𝓮𝓵.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora