Nuestra historia.

Capítulo 8.

- ¿Qué pasa? - río nervioso - Siempre lo mantengo en secreto al principio.

- No tanto tiempo, no con nosotros - dice Fletcher.

- La última antes de...

- Fallon.

- La última antes de Fallon, la conocimos en la segunda cita - sigue Shawn - Aunque el mundo nunca la conociera.

- No sé qué deciros, chicos - me encojo de hombros - He querido ir con más cuidado con ella.

Puedo sentir como Fallon se revuelve a mi lado, está incómoda. Me apuesto lo que sea a que, si pudiera, ahora mismo dejaría que la tierra la tragara; y eso si no ha podido volver atrás en el tiempo antes.

Todos quedan en silencio, la miran fijamente, lo cierto es que yo también quiero desaparecer.

Pero, entonces, Camilla suaviza su expresión, Lewis sonríe y Anne empieza a reírse.

- ¡Ven aquí, Fallon! - exclama Justin con ilusión.

Ella se acerca y todos la rodean. Brindan a su alrededor, la abrazan y gritan con una gran felicidad en su mirada. Están orgullosos, puedo sentirlo. Y yo lo estoy de ella, sé que esto no está siendo fácil.

- ¡Ey, Fallon! ¿Una cerveza? - dice Sam tendiéndole uno de los botellines - Esto hay que celebrarlo.

Tengo que aguantarme una pequeña risa. Es como vivir un deja vú de una de nuestras primeras citas. Desde luego, la cara que se le está formando es exactamente la misma. Me pregunto si se acordará de aquel día.

- No, gracias - sonríe avergonzada - Lo cierto es que... No me gusta la cerveza.

- ¿¡No te gusta!? - gritan todos al unísono.

Dios, cada vez parece más aquel día. Sonrío.

- Pero, Niall, ¿cómo acabaste con ella? - desespera Lewis.

Quiero decir algo, ayudarla a escapar, pero entonces la reconozco. Su expresión cambia y muestra esa seguridad que yo tanto amo y que a ella tanto le cuesta llevar como bandera. Esa es la cara que me puso para plantarme cara aquel día y hoy está igual de preparada frente a siete de mis amigos.

De verdad creía que la pregunta le incomodaría, que la tiraría, pero, en vez de eso, se coloca en posición firme y, simplemente, se echa a reír. Abraza a Lewis por los hombros, los mira a todos divertida y, una vez más, me demuestra que sí recuerda, como yo lo hago, nuestras primeras veces.

- Voy a responder lo mismo que le dije a Niall en nuestra segunda cita. No, no me gusta la cerveza, así que, con una chica como yo a su lado, ¿quién va a robárselas? Serán todas para él.

- A no ser que vengamos nosotros a verle - alza Shawn su botellín y todos le siguen.

- No es mal plan - sonríe Fletcher siguiendo su gesto.

- Ahora lo entiendo, amigo - sigue Lewis.

Y así, todos levantan sus botellines y brindan. Brindan por ella, porque ha ganado, porque ha tenido la oportunidad de ser y ha sido.

Fallon me mira entre la multitud, está feliz, ya no hay nervios, está cómoda con ellos. La verdad es que creo que, desde hoy, la quiero un poco más.

El timbre suena y más de uno pega un salto. Es cierto que no echábamos a nadie en falta, pero, después de casi dos horas, tal vez sí deberíamos haber notado que nos faltaba algo que comer.

Soy yo el que, como buen anfitrión, va a abrir. Pago el pedido y vuelvo al salón con todos. He hecho una lista de reproducción con singles de todos nosotros y ahora mismo está sonando Someone You Loved de Lewis, sé que a Fallon le encanta, que ama escucharla y que tener a mi amigo al lado cantándola al unísono con... el mismo estará siendo un sueño. Casi parezco estar viendo la escena perfecta de una vida feliz desde la puerta. Pero cuando Camila me ve, apoyado en el marco embobado mirando la escena... Bueno, desde luego no capta lo mismo que yo.

- ¿Qué haces ahí? ¡Ven ya! Mamá tiene hambre, ¿sabes?

- No sabía que comías por dos, Cabello - ríe Justin.

Cosa que Camila responde muy cortesmente con una sacada de lengua y unos ojos en blanco.

Fallon se ríe, pero no de ellos, si no de mí y supongo que mi expresión muestra mi gran por qué, pues enseguida me responde sin necesidad de que yo hable.

- Cuando me has dicho que ya habías encargado la cena, ¿te referías a pizza?

- Sí, ¿qué pasa? ¿No quieres?

- No, claro que quiero - me mira, sonríe y niega con la cabeza, a saber qué está pasando por esa cabecita suya - ¿Sabes qué? Da igual, es perfecto.

Estoy a punto de decir algo, pero, entonces, Fletcher va corriendo a su lado y la abraza fuertemente, se echa a reír junto a ella. Fallon no puede más que seguirla. Supongo que es por ello que levanta su copa de vino, nos mira a todos y exclama:

- ¡Brindo por nosotros! ¡Por esta cena perfecta a vuestro lado!

Y mientras todos vitorean y dejan chocar sus botellines, yo solo puedo hacerme una pregunta. ¿Qué hace Fallon bebiendo vino? Si tampoco le gusta.

Al final de la noche, ya se nos ha ido todo de las manos, solo un poco, claro. Shawn ha cogido una de mis guitarras, Lewis ha cogido otra, yo estoy en el piano y Anne y Fletcher cantan al unísono canciones que poco tienen que ver con las melodías mientras Fallon y Sam saltan por el sofá y se tiran uno encima del otro una y otra vez - sin tener ningún cuidado con Justin, que ha sido el primero en caer -. Todos nos reímos sin parar incluso a sabiendas del ruido que hacemos; y digo ruido, porque decirle sonido a eso es un insulto.

Los botellines se han acabado hace rato y Fallon ya se ha deshecho de los dos trozos de pizza que faltaban. Estamos bajo mínimos, llenos de energías y sin ganas de parar. Pero entonces recuerdo algo, yo mañana tengo una reunión y una fiesta de promoción de Heartbreak Weather. Y sí, la fiesta ya vino con esa fecha, pero la reunión se movió precisamente para que yo descansara.

Me levanto del piano y miro a todos, odio ser el aguafiestas, estoy a punto de hablar cuando veo a Shawn mirar el reloj con sorpresa y soltar la guitarra.

- Camila, ¿nos vamos yendo ya? Estoy cansado.

- Claro. ¿Te llevamos, Sam?

- Me haríais un favor.

- Yo también me iré - sigue Fletcher - Y tú deberías, Lewis, mañana tienes cosas.

- Pues yo no seré la única que se quede - dice Anne levantándose.

Todos se van directos a la entrada, casi como si les hubiera echado, pero sin que haya echo falta. Incluso Justin despierta sin que nadie le diga nada y, sin replanteárselo, coge sus cosas para seguirlos. Se miran, sonríen, y chocan puños. No mentiré, estoy extrañado...

- Mucha suerte mañana en la fiesta, Niall - dice Camila justo antes de salir.

- Sí, - sigue Lewis - sabemos que lo bordarás.

- ¡Será una pasada! - exlama Fletcher.

- Descansa, ¿vale? Has de darlo todo - acaba Justin, mirando a Fallon más que a mí, un poco más despierto - Le encantará vivirlo.

- ¡Lo harás genial! - se le oye gritar a Sam ya de camino al coche.

Sonrío. Asiento. Les envío besos. Al cerrar la puerta, simplemente, soy feliz. He tomado la mejor decisión.

- No sé tú, Niall Horan, pero yo me voy a la cama - sentencia Fallon una vez vuelvo al salón - y, créeme, no es precisamente para follar - acaba antes de poner rumbo a las escaleras.

Río, no me queda otra.

- Muy bien, amor, yo ahora subiré.

Aunque antes, voy a recoger un poco.