Capítulo 29:

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—¡Niall!

Escuchó el rubio que detrás suyo lo llamaban.

El rubio volteó hacia atrás, encontrándose con un chico de cabellos de color lila y ojos verdes, llevaba unos ajustados jeans negros, una camisa a cuadros blanca con negro y una chaqueta de cuero negra.

—Hey, Mike —saludó Niall.

—Hola chicos —sonrió Michael—. Creí que no vendrían, ¿qué tal todo?

Charlie asintió con la cabeza, y Niall lo tomó en seguida del brazo y se abrazó a él, Evans sabía que ya no lo volvería a soltar, y sonrió ligeramente.

—No te imaginas —respondió Evans soltando una risilla disimulada—. Pero no importa mucho —miró al rubio—. ¿Qué tal aquí? ¿Cómo va la fiesta?

—Oh bueno, aquí todo está...

—¡Excelente! —gritó una voz detrás del pelicolor. Michael sonrió al ver unos delgados brazos abrazarlo por detrás, luego sintió un peso sobre su hombro, y volteó, Luke tenía su barbilla recargada allí, y le sonreía muy grande—. Hola Mickey —lo saludó dándole un beso en los labios.

Clifford se volteó completamente hacia él, y lo tomó de la barbilla, acercándose a besarle otra vez. Niall y Charlie se dieron una mirada, y carraspearon al mismo tiempo. La pareja se separó.

—Oh, claro, lo siento —se disculpó Michael.

Luke soltó una risa y entrelazó sus dedos con su novio.

—Solo queríamos decirles que les tenemos una pequeña sorpresa —sonrió—. No se alejen mucho de esta zona, ¿sí? En cualquier momento puede pasar.

—¿De qué hablan? —preguntó Niall.

—Ya lo verán —respondió el otro rubio, tiró de la mano que sostenía a su novio, y se alejaron de allí sonriendo.

Niall y Charlie se quedaron solos de nuevo, solo viendo a su alrededor a las personas bailar, sonreír, platicar...

—Voy por una bebida —murmuró Evans, se soltó del agarre antes de alejarse.

El rubio asintió y sin mirarlo dio media vuelta para moverse de lugar. Caminó haciéndose paso entre la multitud de gente, y notó a algunos chicos populares saludándolo al verlo pasar, y él sólo hizo algún movimiento de cabeza sin responderles con la boca. La mayoría parecían alegres ahí, él no, ni siquiera sabía para qué había ido.

—Oh, Niall ¡sí viniste! —chilló una voz aguda a sus espaldas. Niall reconoció la voz en seguida, y se giró de inmediato, sonriendo—. Dios, que bien te vez, eh —lo alagó la chica, antes de darle un abrazo.

—Gracias, Lauren —besó su mejilla, y se separaron del abrazo, el rubio la miró detenidamente y levantó una ceja—. Pero mira nada más que hermosa estás —dijo.

La sonrisa en el rostro de la pelinegra creció, ladeó la cabeza. La chica llevaba un corto vestido strapless color celeste, con cola de gasa. Su cabello negro tenía algunas ondas, y su maquillaje era muy sencillo. La chica era verdaderamente hermosa.

—Recuerdame porqué no salí contigo —murmuró el rubio, haciendo reír a su mejor amiga.

—Ay, eres toda una pasiva, mi amigo —le guiñó un ojo, Niall agachó la cabeza escondiendo una sonrisa—. Y no creo que dos pasivas funcionemos en una relación, ¿eh? —bromeó, ambos soltaron una risa—. Además, me encantaría ir de compras contigo alguna vez. Y si fueras mi novio, y te gustaran las compras algo no estaría bien ahí ¿no crees? —se acomodó el cabello—. Todos los chicos con los que he salido, heterosexuales, odian las compras así que si fueras, aunque ni de broma, un poquito hetero, ya no tendría a ningún chico con quien hablar de otros chicos.

¡Y todo por una apuesta! |Niam| (Reescrita)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora