Epilogo:

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¿Qué se supone que significa la muerte? ¿De donde se supone que alguien puede darle un significado? ¿O es que significa siquiera algo? ¿O tal vez significa nada y todo a la vez?

¿Es el final de la linea en donde termina lo que fue alguna vez la vida? ¿Es un lugar oscuro a donde van nuestras almas? ¿O es una infinita paz? Quizás es una tortura para las personas que querían seguir viviendo, y una paz para las que ya querían que todo terminara, ¿Y si ninguna de las anteriores? ¿Pero y qué tal que todas ellas?

Las preguntas para lo que podría significar la vida y la muerte, sin duda son infinitas.

Pero en la cabeza de Liam Payne, no cabe ninguna respuesta coherente para lo que significa la muerte, o más bien, para lo que significa que algo tan horrible y cruel como lo es la vida te arrebate al ser que más amas, y por lo que aún después de todo darías la vida.

La primera semana del accidente fue la peor de todas las que le siguieron después.

Porque justo un día después de haber escuchado en las noticias el escape y la huida de Frederic Payne, Niall Horan fue arroyado por su auto dejándolo inconsciente, y siendo el culpable arrestado, fue ejecutado semanas después.

Pero cuando creían que el muchacho estaba mejorando, e iba a despertar, les dieron la noticia de que había caído en coma. Él no estaba mejorando.

Los días tan lentos que pasaban y que parecían ser infinitos solo empeoraban aquella noticia y las situaciones que a uno, estando con vida, le sucedían día con día.

 El ver el cuerpo inmóvil de ese pequeño angel era doloroso para todos a quienes le conocían. Y en especial para sus padres, y para Liam, siendo que Niall era una parte importante en su vida.

Y así, yendo y viniendo todos los días, a todas horas, entrando y saliendo por las puertas de ese hospital, entrando y saliendo por las puertas de la habitación de donde se encontraba, pasaron uno, dos, tres, cuatro, cinco meses... hasta que en el sexto mes, la peor noticia que habían escuchado salió de la boca del doctor.

El corazón de Niall había tenido un paro, y luego él había fallecido.

Pero en ese entonces, justo en el instante en el que todos recibieron la noticia, Liam no pudo comprender cómo, después de haber escuchado al hombre, su corazón seguía latiendo, siendo que el chico por el que vivía, supuestamente había muerto. Siendo que Niall era su corazón, ¿Cómo es que seguía respirando, entonces?

Aquella respuesta llegó casi cinco minutos más tarde, cuando una de las enfermeras, salió corriendo de la habitación en donde se encontraba Niall, y sorprendida, apenas había podido pronunciar las palabras que dijo. 'El paciente ha... revivido' susurró.

Entonces, el corazón de Liam no había dejado de latir por esa razón, y sus palpitaciones se aceleraron, pero, ¿qué tenía que ver esto con la situación? No lo sabía.

Siete meses pasaron cuando decidieron trasladarlo a su propia casa con una enfermera contratada a cuidar de él, Helen, la misma que había cuidado de la señora Horan no mucho tiempo atrás. Entre cuidados constantes pasaron recordando aquellos tiempos en los que el chico estaba despierto y no inmóvil en una cama que, rogaron, no fuera el lugar de su muerte.

Ocho meses sintiendo ese hueco en el pecho, ese vacío en su ser que les decía que no estaban completos.

Nueves meses llorando y sintiendo, viviendo algo que una persona, que esa persona se merecía también. Viviendo, como toda persona y toda cosa con vida merecía, y sin embargo no todos podían o querían tener.

Diez meses desde que cayó en coma. Once meses desde la última vez que lo vieron caminar y sonreír.

Un año infinito, sin ver ninguna mejora. Dos años de su vida desperdiciados y dejados en el olvido.

¡Y todo por una apuesta! |Niam| (Reescrita)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora