Situaciones dudosas (parte 1)

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Sábado 04 de Marzo, Entrada de la preparatoria 7:50 a.m

Pov Dawn.

Faltaban cinco minutos para las ocho de la mañana, Serena y yo llegamos antes al lugar donde nos recogerían. Estaba tan emocionada pero mi mente aún quedaba rondando en lo que Paul me dijo ayer.

Flash Back.

Bajo un enorme árbol estaba sentada, buscaba algo de inspiración para mis nuevos diseños quería algo fresco, natural y único, la inspiración me vino en ese instante, dibujaba tranquila hasta que me quitaron mi cuaderno.

-- ¡Ey! -- exclamé molesta.

-- Así que eres diseñadora -- dijo con burla -- que pena que nadie reconozca tu talento -- miró mis dibujos -- estos diseños están tan pasados de moda -- miraba cada página de mi cuaderno.

-- ¡Devuelmelo Úrsula!-- me paré antes de lanzarme hacia ella para quitarle mi cuaderno.

-- como se nota que no tienes clase, una dama educada jamás debe lanzarse así, pierdes la compostura tan fácil que se nota que eres una salvaje.

-- sino quieres que te arranque el cabello más vale que me devuelvas mi cuaderno ahora.

-- si tanto lo quieres ve por él -- lo lanzó hacia la fuente.

No quería ver lo que pasaría, todo mi trabajo  está ahí, los diseños que e hecho desde los siete años hasta ahora estaban ahí. No..., de repente una mano se interpuso y agarró mi libro, era Poul, se acercó a nosotras a paso calmado hasta llegar frente a mi.

-- aquí tienes, no le pasó nada así que no tienes porque ponerte triste. -- me lo entregó.

-- muchas gracias -- lo cogí.

-- ¿se puede saber que haces? -- le regañó Úrsula-- ¿porque la ayudas?, ella no es como tu o yo.

-- ella no es como nosotros es cierto, pero no te a hecho nada malo, no tienes porque molestarla.

-- Pero por...

-- Vete de una vez, y no te atrevas a hacerle algo a ella.

-- Bien, pero esto no se va a quedar así -- me miró con enojo antes de retirarse.

-- Pero que carácter, muchas gracias por defenderme.

-- Ya estamos a mano.

-- ¿Eh?.

-- Me ayudaste cuando ni siquiera te lo pedí ahora estamos a mano.

-- ok -- me encogí de hombros.

-- ¿Puedo verlos?. -- extendió su mano

--  ... -- abracé mi cuaderno con fuerza.

-- No haré nada, te doy mi palabra -- di un suspiro y se lo entregué.

Se sentó debajo del árbol en el que yo estaba para ver mis dibujos.

-- Estabas haciendo este recién, ¿verdad?. -- me senté a su lado y asentí al ver cuál señalaba. -- no está mal.

-- Gracias -- cerró el libro y me lo dio.

-- Yo le pondría un candado a tu cuaderno.

-- ¿Por qué?.

-- Úrsula es aprendiz de una diseñadora de aquí, cuando no tiene inspiración le quita sus ideas a otros sin que se den cuenta y se las queda.

-- Pero si es aprendiz de una diseñadora reconocida, ¿por qué necesita copiar  los diseños a otros?

En Menos De Un Año Nos CasamosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora