Mirando hacia atrás, encuentro millones de cosas que hubiera hecho diferente. Me faltó valor. Me faltó certeza. Quiero regresar el tiempo. Mi corazón siempre desea lo imposible.
Cuando despertó, BaekHyun se encontró solo en la cama. El hombre se había marchado, ahora KyungSoo estaba en la habitación, sacando el dinero del cajón, donde siempre lo guardaba.
—¿Estás bien? ¿Te lastimó? —KyungSoo se sentó en la cama, contando los billetes—. ¿Quieres un masaje?
—Estoy bien... —BaekHyun suspiró y enterró el rostro en la almohada, luego comenzó a estirarse, para deshacerse del sueño.
—Pareces triste.
—Lo estoy.
—Te lo advertí, Baek —KyungSoo negó con la cabeza e hizo una mueca de desaprobación. Dejando el dinero a un lado, comenzó a masajear la espalda de su amigo, aunque no se lo pidiera.
—Sí. Pero, ya es tarde para sermones, Soo. No se puede evitar. Lidiaré con esto. No te preocupes.
—Él no te conviene, Baek. Tiene otros compromisos.
BaekHyun lo sabía. Lo tenía muy claro, porque Dark siempre actuaba con reservas, porque vivía bajo el manto del misterio, como la gente que tiene muchos secretos. Sin embargo, escuchar esas palabras de los labios de su amigo, rompió un poco más su corazón. Era un recordatorio de la realidad. Él le pertenecía al hombre, pero el hombre jamás podría pertenecerle.
—Soo... ¿Por qué no me dices quién es? ¿Por qué le debes tanta fidelidad? Se supone que yo soy tu mejor amigo, deberías estar de mi lado.
—Oye, eres mi mejor amigo, mi hermano... Y, no es fidelidad. Simplemente, tenemos un trato. Soy un hombre de palabra. Sabes que siempre cumplo.
BaekHyun suspiró. Retiró la mano de su amigo de su espalda, y dejó la cama para comenzar a vestirse.
—Me lastima no saber nada de él.
—Te lastimaría más saberlo. Confía en mí. Por ahora, deberías considerar detenerte.
***
Era tan incómodo. BaekHyun sabía que las cosas serían así entre él y el doctor Kim, pero igual lo sufría. Por el momento, el mayor se ocultaba en su consultorio. BaekHyun no iría a buscarlo, quería respetar ese alejamiento, quizá era lo mejor. Aunque extrañaba sus saludos matutinos.
YulRi sospechaba que algo andaba mal, pero tampoco quiso entrometerse. A pesar de todo, su hijo parecía contento, incluso sonreía más que de costumbre. Eso la hizo pensar que las cosas no eran un total desastre.
Mientras caminaba del brazo de BaekHyun, hacia la estación del metro, la mujer notó algo extraño en él.
—Hijo, ¿te sientes mal?... Caminas un poco extraño.
BaekHyun enmudeció por un momento, mientras su rostro comenzaba a teñirse de rosa.
—¿Qué? Estoy bien, mamá... Es sólo que, creo que estos zapatos me aprietan un poco.
—Mhm... Has estado comprando mucha ropa nueva últimamente. ¿Estás seguro que tu empleo en esa tienda te da lo suficiente? No está bien que aceptemos tantas cosas de KyungSoo. El pobre muchacho no tiene ninguna obligación con nosotros y siempre nos está dando más de lo que tiene.
Como a JunMyeon, BaekHyun también le había mentido a su madre. YulRi sabía que su hijo estaba trabajando en una tienda de conveniencia, aunque lo de sus turnos no le quedaba muy claro, decidió creerle. Porque el muchacho nunca le mentiría.
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Diario de un observador
Romance"Caminas por el mundo con los ojos cerrados. No imaginas que haya alguien observándote, deseándote, soñándote. Mis ojos no te miran, te mira mi corazón." Desde la primera vez que lo vio, BaekHyun cayó enamorado del chico nuevo. Su amor silencioso se...