17.
—¿Qué?
—¿Qué?—me hice la confundida. No podía repetir o si quiera afirmar lo que había dicho.
Aun no era el momento de decirlo, no cuando no había pasado más de una semana desde que se animó a hablar conmigo.
—Lana, ¿qué dijiste?—estaba frente a mí, tomando mis hombros con sus manos. Sus ojos me observaban con determinación, esperando que contestara.
—Que tengo frío.
Su cuerpo se relajo ante mi respuesta, como si lo que hubiera entendido no le gustara.
No sé qué es lo que hay escuchado, solo espero que no me haya entendido en un principio, porque eso solo significaría que le es repulsivo el hecho de que yo lo ame.
—Bien, vamos adentro, la temperatura está bajando y no hay nada más para que te abrigues.
Su mano tomó la mía y me guió dentro.
Si por fuera el lugar era precioso, por dentro era mágico. Los muebles, la decoración, y el paisaje que se podía observar por las ventanas lo hacía mágico. Rústico, acogedor, tranquilo; lo mejor de todo era que estaba con Zayn.
—¿Tenías todo planeado?
—Sí—sonrío—bueno no lo de tu padre, pero si el venir aquí—se encogió de hombros—iba a pedirle permiso pero, considere las opciones después de que nos encontró.
Reí sacudiendo la cabeza. Era probablemente de las cosas más dulces que Zayn ha hecho por mí. En realidad ha habido muchas situaciones como esta.
La vez que prefirió acompañarme en casa en lugar de ir a la fiesta de Brad de siete años de Superman—su super-héroe favorito-solo porque yo estaba enferma del estomago. La vez en que tomó la culpa por destrozar el jardín de su madre, cuando había sido yo la que había puesto las bolsas de la compra sobre las adoradas rosas de Trish. Y aquella última vez fue cuando me sorprendió tocando y cantando para mí en el salón de música.
Sé que hay más, más momentos hermosos que he compartido con él, pero sin duda este los sobrellevaba por completo.
—Gracias—sonreí viéndolo a los ojos.
Camino lentamente hacia mí. Sus manos se colocaron en mi nuca y pego su frente a la mía.
—Creo que tu papá nos interrumpió, estábamos haciendo algo interesante, ¿no es así?—preguntó con una sonrisa en la cara, su boca acercándose a la mía. Yo solo rodee los ojos y me apresure a tomar sus labios.
Dios, no podía alejarme de este hombre. No creo que haya alguien más adecuado para mí, nadie como Zayn para mí. Su sonrisa era todo lo que yo necesitaba para sonreír si mi día no iba bien. Su voz era lo más reconfortante que tenía cuando algo me ponía mal. Tan solo su presencia en la habitación hacia todo mejor.
Bueno, eso es lo que alguien enamorado diría.
—Tus piernas—susurró en mis labios cuando me alzó, sosteniéndome por la cintura.
Rápidamente enredé mis piernas sobre su cintura. Uno de sus brazos se coloco debajo de mi trasero y el otro me envolvió haciéndome estar más pegada a él.
—Maldición—tropezó en las escaleras y reí—¿te estás riendo de mí?
Se hizo el ofendido, y yo riendo asentí. Besó mis labios nuevamente y me tomo de nuevo en brazos. Oh dios mío, este probablemente sea el momento más caliente y ridículamente gracioso que haya tenido.
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Innocence Lost||Z.M||Fanfiction
FanfictionLana Green quien está en contra del alcohol, decide darle una oportunidad en una de las últimas fiestas de la preparatoria debido a la insistencia de su querido “Mejor Amigo” Zayn Malik;quien resulta ser también el joven del cual ha caído completame...