· Heaven School Blessing [HuaLian]

18. LLuvia Sangrienta, desaparecido

El primer recreo había comenzado. Xie Lian se disponía a buscar a Hua Cheng cuando se dio cuenta de que le faltaba el factor más importante: ¿en qué aula estaba?

Bien podría preguntar a algún compañero por los pasillos. Era impensable que alguien no conociese dónde paraba el excepcional presidente del Consejo de Estudiantes. Cualquiera salvo él, ignorante de todo lo relacionado con "Los Cielos". 

No obstante, siendo "la escoria del instituto", la persona a la que todo el mundo trataba de evitar, ¿encontraría a alguien dispuesto a ayudarle? Incluso si todavía había gente con buena voluntad allí, ¿no sería ya demasiado tarde?

A decir verdad, le habría hecho ilusión presentarse en la puerta tal y como el de rojo hizo un par de días atrás. Sin embargo, las circunstancias lo impedían. Por lo que no le quedó otra más que acudir a la cafetería de la misma manera en la que se encontraron ayer. 

No tuvo que buscar demasiado entre las cabezas, pues una voz lo llamó enseguida, — ¡Su Alteza! ¡Estamos aquí!

Xie Lian se volteó al instante.

...

La expresión amable que siempre portaba se vio sustituida repentinamente por una pequeña mueca de decepción.

Era plenamente consciente de que aquel que le había llamado era Shi Qing Xuan. Pero, por alguna razón, tenía la esperanza de que sería como ayer, que Hua Cheng estaría en esa misma mesa sonriéndole gentilmente para que fuera a su lado.

Sin embargo, solo estaban verde y azabache. Faltaba el rojo carmesí.

¿Le habría pasado algo? 

Conforme se acercaba a la mesa donde ese par estaban, ambos se dieron cuenta de la preocupación que reflejaba el rostro de Xie Lian. El más animado fue el primero en intervenir, — Su Alteza, ¿está bien? ¿Hubo alguien que...?

Xie Lian negó con la cabeza. Estaba seguro que Shi Qing Xuan le iba a preguntar si había tenido problemas con alguien. No era como si no hubiera escuchado algún insulto hacia su persona a lo largo de la mañana. Pero no había pasado nada lo suficientemente grave como para darle importancia, al fin y al cabo, ¿no era habitual que siempre hubiera una pandilla de gente que no tuviera nada mejor que meterse con otros?

He Xuan le dedicó una mirada inquisitiva mientras engullía su comida. Al ver que Xie Lian no le había entendido, dijo después de tragar, — ¿Hua Cheng no te ha-...?

Antes de que pudiera terminar su oración, una estridente voz le interrumpió, — ¡VAYA, PRIMO QUE UNA VEZ INTERPRETÓ A UN PRÍNCIPE HEREDERO! QUÉ RARO QUE TÚ Y ESE CABRÓN NO ESTÉIS JUNTOS. PARECE QUE LLUVIA SANGRIENTA TE HA DEJADO TIRADO.

 Una desagradable risa acompañó el final de esas palabras. Por un momento, había olvidado que, de alguna manera, su primo también se había matriculado en "Los Cielos". 

Por lo general, siempre trataría todo lo que saliera de la boca de Qi Rong como puras tonterías. No obstante, en esta ocasión había algo dentro de sí que le impedía tachar tan rápido lo que había dicho. Claro que si fuera él quien tuviera que expresarlo, no usaría un término tan cruel, pero...

¿Y si su primo tenía razón? 

¿Y si San Lang verdaderamente...?

No, no quería pensar en ello. Hua Cheng le había dado suficientes motivos como para no dudar de su amistad. Si hubiera sido cualquier otra persona, quizá no las tendría todas consigo. Sin embargo, tratándose de él, estaba seguro de que simplemente le había surgido un imprevisto.

De la nada, esbozó una brillante sonrisa antes de decir, — Está bien para mí si piensas así. Solo no te voy a creer. 

Qi Rong lucía extremadamente iracundo. Siendo honestos, lo que menos le apetecía ahora mismo era soportar los horribles gritos de su primo. Por consiguiente, hizo una pequeña reverencia a modo de disculpa hacia Shi Qing Xuan y Aguas Negras, antes de abandonar la cafetería.

Una vez fuera, solo pasaron un par de segundos antes de oír un ruidoso chillido. Casi podía notar las paredes retumbar de la intensidad. Definitivamente se alegraba de no haberse quedado ahí a pesar de sentirlo por los que seguían dentro. 

Qi Rong era innecesariamente pesado y no tenía ánimos como para lidiar con él. 

.

.

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Todavía quedaba un buen rato hasta que la campana que anunciaba el regreso a clases sonara. Tenía pensado entrar en la biblioteca cuando recordó que todavía cargaba con el par de almuerzos que había preparado. Uno para él y otro para... Hua... Cheng... La biblioteca no permitía entrar con comida.

...

Después de caminar en círculos por sabe quién cuánto tiempo, acabó yendo involuntariamente a aquel patio trasero al que esa persona que no podía sacar de su mente le llevó el día en que se conocieron. 

...

Una vez que llegó allí empezó a sentirse estúpido. Hua Cheng lucía como un hombre que siempre anda ocupado, era obvio que no podrían estar juntos todos los días. Además, se conocían de un par de días como mucho. ¿Por qué no podía dejar de pensar en él?

No... De hecho, era precisamente por eso, porque solo habían pasado dos días. 

Temía que la misma rapidez que había forjado su amistad la destruyera. 

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¡Buenas a todos/as!

La parte en la que He Xuan comería el almuerzo de Shi Qing Xuan ocurriría una vez Xie Lian abandona la cafetería. Por lo que no estaría relacionado con el Hualian, que es la pareja en la que este FanFic está centrado. Por ello les pregunto, ¿quisieran igualmente una parte así?

Bien, y, una vez dicho eso, les dejo pensar sus teorías sobre por qué Xie Lian no se encontró con Hua Cheng.

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Por poco pude actualizar a tiempo... espero que les haya gustado, o al menos, sacado una sonrisa. Recuerden que si así fue pueden dejar una 🌟 o comentario, que motivan enormemente. Y si les encantó, siempre pueden seguirme <3

— Nos leemos, ¡cuídense mucho!