En media hora

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El sonido de la campana indicaba a toda la preparatoria que comenzaba el descanso. Me puse de pie y comencé a guardar los libros de literatura que la profesora nos dijo que lo leyéramos para la próxima clase que tendré en dos días. Tome mi mochila y los libros, cuando levante mi vista Astoria estaba esperándome en la puerta con unos cuantos libros también en sus manos para ir juntas a la cafetería.

-Historia, ¿y tú?- Dijo cuando llegué a su lado, mientras mostraba sus libros.

-Literatura.- Respondí cuando comenzamos a caminar en dirección hacia la cafetería.

Los días pasaron, creo que casi una semana, para ser exactos... 5 días. Estos días para ser sincera, Draco estuvo un poco extraño desde que recibió aquella llamada. Además, últimamente no hemos cenado o almorzado juntos desde el día en que Astoria y Neville  estuvieron en casa, ya que Draco está más tiempo en la oficina, o si está en casa, todo el tiempo está en el estudio de mi padre... supongo que hay mucho trabajo en la oficina. Además gracias a ello, sin darme cuenta... no me he alimentado muy bien que digamos. Pierdo el apetito si me encuentro comiendo sola, es como si fuera un trauma de mi niñez... supongo.

-¿Me estas escuchando?

Parpadeé un poco al volver de mis pensamientos. Estábamos en la cafetería, Astoria estaba sentada arriba de la mesa mientras que yo estaba sentada en uno de los bancos. Di un pequeño sorbo a mi jugo de naranja que había comprado hace unos instantes, mientras que Astoria comía de su manzana.

-Oh, lo siento... ¿Qué decías?

Rodó sus ojos y suspiró un poco triste.

-Harry  volverá a su ciudad.

-¿Qué? ¿Enserio?- Pregunté sorprendida.

-Si... sus padres volverán antes de lo previsto, por lo que tendrá que volver a irse.

-Ya veo...

Por alguna razón, me sentía un poco triste. Aún recuerdo lo que sucedió entre nosotros en mi cumpleaños, pero eso ya había sido aclarado hace unos días y nos convertimos en buenos amigos en poco tiempo.

Un fuerte brazo rodeo mis hombros y dejó un pequeño caramelo de chocolate frente a mí. Seamus se sentó a mi lado y me soltó de su agarre para comenzar a desenvolver un alfajor con ambas manos.

-¿Y bien?- Preguntó a Astoria.

-¿Y bien, que?- Astoria frunció el ceño.

-¿Tomaste una decisión?- Preguntó Seamus refiriéndose a su situación con Neville .

Astoria se sonrojó ligeramente.

-Oh con que era eso...- Murmuró.

-¿Entonces?- Me uní a la conversación.

-Mm... supongo que se lo diré.- Respondo con sus mejillas rojas.

Seamus sonrió.

-Esa es mi amiga.- Le guiñó un ojo a Astoria.

Reí.

-Oye, ¿Tienes los apuntes de biología? Es que se me olvido copiarlos...- Me preguntó Seamus.

-Los apuntes...- Hice una leve pausa-. Mm... creo que sí.- Busqué en mi mochila-. Si, aquí están...

Sonrió.

-¡Gracias!- Respondió realmente aliviado-. Eres la mejor...

-Lo sé.- Sonreí.

Estuvimos un largo rato conversando sobre todas las cosas que se nos cruzaban en la cabeza, hasta que la campana sonó indicándonos que había terminado el tiempo de descanso.

viviendo bajo el mismo techoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora