Capitulo 6: ¿Puedo conocerla?

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Una confesión de esa magnitud no era algo fácil de procesar, tantas cosas sucedían dentro de la mente de T'challa, desde el miedo hasta la felicidad, el hecho de saber que tenía una hija lo llenaba de tantas emociones.

Llevaban varios minutos parados en medio de la cafetería y algunas personas ya empezaban a dirigir sus miradas hacia ellos, algunas miradas eran de curiosidad otras de incomodidad, pero todas iban dirigidas a ambos. T'challa al notarlo se digno a hablar.

— Vamos a mi departamento— le ofreció a Bucky de forma cortes, no podía soltar una revelación de esa magnitud para después ignorar el tema, necesitaban hablar— ¡no hay nada que ver, todos vuelvan a sus asunto!— T'challa levanto la voz para que toda la gente los observaban lo escucharán, y como por arte de magia, todas las personas volvieron sus miradas a sus mesas.

— Vamos— volvió a hablar T'challa de forma más tranquila, Bucky lo acompaño hasta su auto donde ambos subieron en completo silencio. El camino fue silencioso e incómodo, la tensión se sienta en en auto pero ninguno de los dos sabía cómo iniciar de nuevo una conversación para aligerar el ambiente.

La mente de Bucky estaba trabajando al máximo, el destino parecía que le estaba jugando una broma pesada, muy pesada. Sin embargo, no podía tener un pensamiento tan pesimista, después de todo T'challa solo quería hablar, no era como si le quisiera quitar a su hija; el hecho de pensar perder a su hija le revolvía el estómago, debía haber ignorado su estupido sentimentalismo, ahora mismo debería estar con Ally y Sam y no con T'challa en un auto dirigiéndose a quien sabe dónde.

El camino siguió en silencio hasta que se acercaron al departamento de T'challa, Bucky estaba tan sumergido en su mente que no noto que ya se encontraba en el área más lujosa de la ciudad. No pudo evitar mirar asombrado el edificio en donde se había estacionado.

Entraron al edificio.

— Buenas tardes señores— saludo un hombre que se encontraba en la entrada del edificio, al parecer era el guardia de seguridad.

Ambos saludaron al hombre cortésmente, subieron al elevador, T'challa marco en último piso que había.

Cuando llegaron al apartamento T'challa abrió la puerta dejando pasar a Bucky primero.

— ¡Aquí vives!— exclamó sorprendido Bucky, no esperaba que T'challa viviera en un sitio así.

— Emmm... Si— habló T'challa dudoso — creo que tenemos que hablar seriamente sobre nosotros—.

Una vez más se quedaron en silencio no sabían cómo empezar. T'challa decidió que era más fácil que él empezará pues su historia era relativamente más corta.

— Bueno pues... Por donde empezar— comenzó a hablar algo nervioso T'challa— creo que lo primero que tengo que confesar es que soy rico, lo soy desde antes de conocerte— confesó algo avergonzado, la expresión en la cara de Bucky era inexplicable era una mezcla entre enojo y sorpresa. Pero antes de que Bucky pudiera decir algo T'challa continuo hablando.

— Realmente cuando estuvimos saliendo no era tan rico, mis padres eran los que tenían dinero, yo solo tenía una buena posición en la empresa familiar— hablar de su padre y de su ex relación con Bucky hacia que T'challa se sintiera fatal pero tenía que contar su historia, tal vez Bucky llegaba a perdonarlo— pero todo cambio cuando mi padre murió. Él decidió dejarme el liderazgo de la empresa a mi, por lo que ahora mi sueldo a aumentando— T'challa intentó bromear para aligerar el ambiente pero no dio resultado, la tensión seguía invadiendo la sala de estar del penthouse.

— Y bueno... Yo nunca te lo dije ya que creía que si conocía a alguien y se enteraba de mi dinero solo se quedaría conmigo por conveniencia, pero luego me di cuenta que tú ni eras así— termino de hablar T'challa. La mirada de Bucky se suavizó al mismo tiempo que el ambiente hacia lo mismo— en serio James yo nunca quise lastimarte—.

Esta ya no es tu familiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora