Dulce chocolate. (Gemelier)

Capítulo V

Me dirijí a casa comi y salí a correr un poco.  Luego me puse a hacer los deberes y escuchando música me dormí.

Me quedo callado
Soy como un niño dormido..

Cojo el telefono. Número privado...

-¿Si?- dije medio dormida.

-Esta tarde a las 17.30-

-Pero...- dije antes de escuchar el pitido de fin de llamada.

Estaba demasiado dormida como para darle importancia de quedar con un desconocido.

Me volví a dormir...

Sobre las 11 me levante.

Miro la hora...

-¡¡MIERDA!! HOY TENÍA CLASE-

Me puse el uniforme y salí corriendo. Al llegar le explique lo sucedido al conserje y me dejo pasar.

Toque a la puerta y pase. Al sentarme fijé mi vista en mi sitio de al lado. Ya no estaba Dani. Ahora estaba Mario el niño más popular de todo el colegio.

-¿Y Dani?- le pregunte amable.

-Allí- dijo señalando al lado de Emma.

No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar. No voy llorar.

Me repetía una y otra vez.

Salí corriendo de la clase, dirigiendome hacia el baño, donde escuche una conversación.

-Ya os ha visto- dijo una voz chillona.

-¿Sí?, quiero hacerle sufrir por lo que me hizo.- dijo otra voz chillona.

-Yasta. Ahora me toca a mi con Jesús.-

Volví a salir corriendo refugiándome en el despacho de la directora para pedirle irme a casa. Ya que me encontraba "mal".

Ella me dejo y fui a clase. Allí le explique que me encontraba "mal" al profesor de química. Cogí la mochila y me fui.

Eran las 13.30 y era la hora de ir a la cafetería de siempre. 

Al entrar vi a Jesus y Dani en una mesa al fondo. Yo me senté en la otra punta. No quería ni verlos.

Vino su padre y me dijo que sus hijos estaban allí y me lo dijo señalandolos. Cosa que hizo que yo me girará para verlos. Ellos me sonrieron y yo seguía seria. No les correspondí la sonrisa.

Le dije que no me apetecía andar hasta allí (escusa) y el se fue.

Al momento vinieron los dos y se sentaron en mi mesa. Yo deje caer mi tenedor sobre el plato y me levante con la intención de irme.

-¿Se puede saber que te pasa?- dijo Dani.

-¿Que que me pasa?¿Me estas preguntando que que me pasa?¿tienes las narices de preguntarme eso?- dije yo dejando caer lágrimas de mis mejillas.-Me pasa que me creí que era tuya, pero creo que no soy la única.-

-¿Qué dices?- dijo Jesús.

-NADA DEJAME EN PAZ.-.

Cogí la mochila y salí corriendo. Estaba otra vez llorando.

Llegue mi casa. Iba a abrir cuando alguien me cogió del hombro y me dio la vuelta.

-Quiero saber que te hace estar triste. Lo que hace que te caigan lágrimas por tus rosadas mejillas. Porque no puedo dejarte que llores. Porque tu formas parte de mi corazón. Que eres mi mundo, eres mi vida, y que eres como me aire para respirar. Que sin ti no soy nada y si dejo que estés así me pondría tan tan triste que seria capaz de cualquier cosa...- me dijo Dani esta vez dejando que le cayeran a el lágrimas.

-¿¡¡CÓMO TIENES TANTA CARA DE PLANTARTE AQUÍ EN MI CASA DESPUES DE LIARTE CON EMMA Y LUEGO VENIR Y DECIRME TODAS ESTA COSAS!!?- le dije yo gritando haciendo que el vecindario se alertara.

El salio corriendo de allí. Yo me metí en mi casa sollozando.

Me senté en frente de la puerta dejando caer mi cabeza sobre mis rodillas.

Eran las 16.00 y me iba a preparar para esta tarde que había quedado con alguien que ni siquiera saber quien era, el problema es que no sabia donde hemos quedado.

Me quedo callado
Soy como un niño dormido...

Número privado

-¿Si?-

-En el parque de la rueda-

Pi.....

Vale.

Me duche. Me cogí unos pantalones negros con cremalleras artificiales como bolsillos, y una blusa blanca - beige  con la chaqueta de cuero. Me puse el perfume de dolce gabanna y unas converse negras.

Salí de casa a las 17.15 y me fui en dirección al parque. De camino me volví a emcontar a Dani y a Emma en un banco tonteando.

Las 17.20, me da tiempo. Me acerque a ellos y le dije a Dani:

-¿¿Como el aire para respirar eh??-

-¡Marina no es lo que...-

-Somos novios ¿algún problema?- dijo Emma igual de irritante que siempre.

-Pues si, ¿sabes cual?-

-No y no me...- dijo cuando le corte.

-Pues mira el problema es que tienes a un chico más falso de novio y tu la más irritante. Vamos la pareja perfecta.-

-OK- Dijo ella como siempre.

-Que comáis muchas perdices y que seáis muy felices- les dije alejandome.

Al llegar no vi a nadie excepto a un chico con capucha negra.

No le podía ver el rostro ya que lo tenia tapado. Cogió el movil y llamo a alguien.

Sonó mi móvil. Lo cogí y respondí:

-¿Si?- dije un poco preocupada ya que me daba muy mal rollo el tío ese.

-Acércate hacia mi. Y sígueme.- dijo el siniestro.

El chico se movió hacia un callejón. Yo inocente le seguí.

Al llegar me chocó contra la pared. Le quite la capucha y era...