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YJ.

Me senté en el sofá y suspiré con ganas, no faltaron ni cinco minutos para que Chan hiciera lo mismo.

—Bebé—Murmuró—Creo que es lo mejor—Suspiró—Además, si esa carrera no era para ti, siempre puedes conseguir más—El peligris beso mi frente.

—Ya no toleraba esa jodida universidad, yo quería ser pastelero—Me crucé de brazos mientras Chan comenzaba a reír.

—Bien, entonces, busquemos un curso de pastelería para ti.

Sonreí abrazándolo—Chan, eres el mejor.

—Uhmm, ¿Qué hay de lo que hablamos?—Acarició mi cabello—Mis problemas de ira se controlaron perfectamente después de ir a terapia.

Mordí mi labio inferior meditando—Channie...

—Es solo una sugerencia, las cosas se te podrían salir de las manos y... muchas veces, solo necesitas que alguien te escuche.

—Lo voy a pensar, ¿bien?

Una sonrisa se formo en los labios de Chan y de nuevo, ahí estaban las burbujas en mis estomago. Chan me gustaba, era lindo, amable, le gustaba hacerme sentir cómodo y siempre se preocupaba por mí, entonces... tal vez las cosas me estaban saliendo bien de una buena vez.

—Bebé~

—¿uh?—Sacudí levemente mi cabeza para desvanecer los pensamientos de mi cabeza—¿Qué ocurre?

—Jackson hará una fiesta esta noche, ¿quieres ir?—Cuestionó mientras dejaba besos en mi frente. Uhg, ¿por qué eres tan perfecto?

—Sí—Sonreí besando la punta de su nariz.

Nuestras miradas se cruzan por un momento, mi pecho se siente caliente por todas las emociones y la pequeña sonrisa que se forma en los labios del peligris me hace querer comérmelo a besos.

—Entonces, andando.

Sí, dios, sí, Chan me gustaba mucho.

Sí, dios, sí, Chan me gustaba mucho

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H.J

Sacudí mi cabello con frustración una vez más y negué. Lo extrañaba tanto, lo quería conmigo, justo ahora.

—Jaebum—Me removí—Necesito salir de aquí, quedas a cargo y cuidado con cerrar antes de lo acordado—Regañe.

—Como digas, jefe—Se burló—Jackson esta organizando una fiesta, tal vez debas ir, para pensar o beber, uno nunca sabe que esperar de las fiestas de Jackson.

Suspiré tomando mi teléfono. Bien, a casa de Jackson.

MH.

Mordí mi labio inferior y negué.

—Lix, de verdad, no estoy de humor para fiestas—Suspiré—Mañana sin falta.

—Piénsalo—Murmuró Changbin mientras besaba la frente del rubio—Si vamos a casa de Jackson, habrá mucha gente, tal vez te encuentres con alguien con quien necesites hablar.

Me senté rápido en el sofá y miré a la pareja—¿Han ira?, hoy le toca quedarse hasta tarde en el bar.

El azabache se encogió de hombros—Vamos a averiguarlo.

Coward ¢ MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora