Detrás del vidrio me siento segura, pero extraño sentir la libertad en el cuerpo y el vacío en el estómago mientras disfruto de la caída, a pesar del miedo.Mis huesos flotan en el aire y veo el panorama cada vez más inmenso e infinito ante mis ojos que parecen dos puntos en la nada, pero en realidad son dos universos dentro de una fusión de todo.
Extraño sentirme caer llena de incertidumbre de si el final de todo será un piso firme o blando, o si caeré en el mar y ahora flotaré en él.
Extraño la libertad que se tiene en la piel cuando, a pesar de no saber, sigues tu intuición y terminas por disfrutarlo.
Extraño el «no hay marcha atrás» y el valor que viene con ello.
Extraño sentir, sentir más que nada, y saber que estoy viva.
Que la energía corre dentro de mí.
Que hay cosas que duelen y hay otras que te llenan de gozo.
Que pienso y extraño, y recuerdo y también dejo ir.Hay seguridad detrás del vidrio, pero prefiero la seguridad que descubres afuera cuando te enfrentas a tus miedos y ya no dejas que te hagan chiquito.
ESTÁS LEYENDO
Diario mágico
PoesiaUn poco de mí. De mis días, de lo que siento, de lo que vivo. Un poco de lo que soy. Para ti.