Capitulo 17

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Nos mirábamos con amor, pero...¿por lo menos conocimos ese sentimiento?

🌼🌼🌼

-¿Pasó algo en la cabaña?- la voz de su madre lo susto mucho, pues su corazón comenzó a latir rápido.

Jae voltio y negó con la cabeza.

Habían regresado de su "luna de miel", ya era de noche, el sólo estaba tomando sus últimas pertenencias y dándole un último vistazo a su habitación, aquella que había alojado sus sueños, esperanzas, anhelos, llantos, tristezas y demás sentimientos que ahora no eran más que recuerdos o imágenes que pasaban por su cabeza con tal velocidad que no le permitían analizarlas bien.

- No. Jaebum y yo aún estamos muy jóvenes para tener hijos... El y yo sólo queremos terminar la secundaria e ingresar a una universisda.

La señora Choi asintió no muy convencida. Su hijo aún seguía siendo un hombre, pero de a poco iba resignandose a lo que le habían designado, ser un Omega.

Camino con tristeza hasta la puerta principal de la casa y se despidió de su padre, este le susurró que debería tener un cachorro para fin de año, cuando su celo este en el punto más alto, pues eso era signo de fertilidad y por tanto, de bebés.

Youngjae aún se sentía cohibido ante aquellos temas, por lo que ignoro el consejo de su padre y pasó directamente a su madre, ignorando a su hermana y de esa manera, destrozando lo que quedaba del corazón de esta.

La señora Choi le deseo felicidad y fertilidad durante todo su matrimonio, el asintió no muy convencido de aquellas palabras, sin embargo, prefirió no opinar y sólo marcharse.

La casa de Jaebum se encontraba a un lado de la suya, pero el Alfa se encontraba ahí, en la acera, esperando por su Omega. Youngjae sabía que no era por voluntad propia, así que sólo optó por disfrutar el momento y entregarle sus moletas a su esposo, este las cargo y en poco tiempo recorrió, no hubo ni una sola palabra; al parecer, la luna de miel no sirvió de nada, ni siquiera el entrenamiento tan íntimo que tuvieron en el último día.

Los señores Im lo recibieron con las manos abiertas, cada uno de los Alfas abrazo a su nuevo cuñado, incluso Yeji comenzó a bromear con quitárselo a Jaebum al ver que era tan tierno. El Alfa miro a su Omega y luego a su hermana, la broma de esta no le pareció algo de que reírse, más no le dio la importancia debida, sólo ignoro y llevo sus maletas a la segunda planta, a su habitación para ser más exactos.

Youngjae se encontró rodeando de muchos Alfas, de distintos olores que le disgustaban en su totalidad y que no quería admitir al pensar que sería de muy mala educación, pero es que su lobo quería vomitar por dentro al sentirse confundido con tantos olores nuevos y asquerosos, incluso podía decir que el señor Im tenía un olor a tierra mojada y árboles, algo que el realmente odiaba, pues no le gustaba ensuciarse o algo parecido.

Jaebum entró a su habitación, era claro que había cambiado mucho en el último fin de semana que se marchó, pues está contaba, ahora, con una cama matrimonial y con la foto de ambos, enmarcado y colgado de la pared. Podía ver muchas de sus fotos, pero había más de la boda y de la fiesta. Los armarios habían sido remodelados, ahora parecían más espaciosos y con un diseño más maduro al que tenía antes. Sabía que casarse implica aquello, madurar y no le hubiera importado madurar si con la persona que se hubiera casado fuera Rose, sin embargo, no era así, esa persona era el hermano de la chica, un chico, al igual que el.

You're Not For Me || 2Jae ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora