SILVER SPOON - HYUNJIN (현진)

XLV

Luego de una mañana con todos nuestros compañeros comiendo y hablando. Todos nos alistamos para ir a la playa. El sol estaba muy potente y todos iban con sus trajes de baño y sandalias.

Nos anduvimos bañando en las olas de mar por toda la tarde y en pocas horas el atardecer ya se exponía en el cielo. Claramente unas de las mejores puestas de sol para el atardecer era en la playa. Lo más bonito.

Hyunjin yacía solo acostado, con su abdomen a la vista y con su traje de baño completamente mojado. Me preocupé por él, ya comenzaba a correr viento helado y al parecer él dormía bajo el libro que cubría su cabeza. Las chicas decidieron irse porque el frío era muy grande, así que caminé hacía Hyunjin sin remordimientos. Saqué el libro que estaba en su cabeza y para mi sorpresa, estaba más despierto que nunca.

—Hasta que viniste por mi, Hansen. —Se incorporó en la toalla de baño y no podía evitar revolucionar mi lujuria y mis deseos perversos el verlo allí con su abdomen al descubierto. Entonces busqué su poleron y se lo tiré.

—¿Tú eres inmune al frío o qué? —Le regañé— Hay como diez grados bajo cero.

Se puso el poleron obedeciendome.

—Quería que vieras mi cuerpo pero no le prestaste la más mínima atención. —Reí— No funcionó mi plan.

Me hizo un espacio y me senté a su lado. Los colores cada vez bajaban el tono y en un abrir y cerrar de ojos aquellos colores tan hermosos dejaron de brillar, anunciando la noche estrellada y fresca.

—¡Ay qué hace frío! —Gritó Hyunjin y con esa excusa me abrazó fuertemente— ¡Qué hace frío, Hansen! Lamentablemente te tengo que abrazar...

Reí e intenté hacer que ya no tuviese tanto frío, le coloqué su gorro y él hizo lo mismo con mi chaqueta. Le sonreí y no se demoró en abrazarme de nuevo, dándome calor corporal.

Suspiré, mirando a aquel océano infinito hacia que mis pensamientos me atacaran cómo siempre. Hyunjin me tomó la atención de inmediato, sabiendo que diría algo.

—Qué miedo, ¿No? —Comencé a hablar, estaba tan cómoda allí con Hyunjin. Que sentía la necesidad y la confianza para hablar de lo que pasaba por mi mente.

—¿Qué cosa? —Preguntó, me miraba pero yo miraba el océano. Como las olas se movían lentamente y la acción era consecutiva.

—El futuro, Hyunjin. —Lo miré un poco, estaba muy cerca y sus ojos preocupados me motivaban a seguir; luego miré nuevamente el océano— No sé si estoy haciendo las cosas bien, si lo que estoy pensando es lo adecuado si debí de haber hecho las cosas de otro modo...

Tomé un respiro.

—Laurine. —Me llamó, sus ojos brillaron bajo la luz de las estrellas, miraron a los míos con ternura haciéndome sentir como si yo fuese lo más importante, la mujer más bella— Estás haciendo las cosas bien, eres una excelente persona. Estoy muy muy muy orgulloso de ti y de todo lo que haz logrado...
—Mi interior crujió y mi garganta quemaba por unas lágrimas, pronto comencé a ver la imagen de Hyunjin borrosa— Eres una de las mejores de la generación, eso habla por sí solo y para mí eres la mejor.

Entonces me quebré y comencé a llorar, Hyunjin me contuvo preguntando qué había hecho mal. Pero no había hecho nada mal, es más, me había dicho lo que había querido escuchar durante toda la vida. Una simple frase pero que tenía tanto significado.

"Lo estás haciendo bien"

Era lo único que quería escuchar. Lo único que me podía llenar y no podía dejar de llorar. Hyunjin me ayudaba a limpiar las lágrimas y me miraba con tristeza cuando ya pude verlo más claro. Le sonreí y  abracé, pero aquello, lo que me había dicho y el efecto que había tenido en mí. Era mucho más que un abrazo, tomé su rostro con firmeza y con confianza y acerqué aquellos labios tan perfectos a mí. Lo besé con tanta pasión, Hyunjin me había hecho sentir tan bien en tan poco tiempo y no sabía de que otra manera agradecérselo.

Sus labios suaves y gruesos los seguí sintiendo míos cuando me alejé. Hyunjin tenía sus ojos abiertos, estaba completamente sorprendido.

—Laurine...—Habló y reí. Sequé mis lágrimas que ya habían desaparecido.

—Gracias, Hyunjin. —Le dije hablando tan honestamente con mi corazón completamente lleno— Eso era justo lo que quería oír, fui muy dramática por llorar pero...

Hyunjin se lanzó sobre mis labios para besarlos, un poco sobresaltada y sin esperarlo para nada lo besé de vuelta con eso solo confirmaba que Hyunjin sí tenía los mejores labios. Me besaba con tanta urgencia que se me hacía difícil seguirle el ritmo, se alejó y me miró sonriendo.

—Eso es por todas las veces que te quise besar y no podía porque no me dejabas.

Reí. Aún sintiendo los labios de él sobre mí, su sabor, su esencia.

—¿Hace cuánto que me querias besar? —Pregunté realmente curiosa.

—Se puso a pensar— Uhm, desde esa vez que ese chico te estaba coqueteando. —Rodó los ojos en modo celoso y reí— Quería que todo el mundo supiera que me gustabas y que quería que fueses mía...pero verás, no podía.

Reí, no podía creer que desde hace tanto tiempo que aquello que recién hicimos se había podido concretar y por mi ingenuidad no se pudo lograr.

—Realmente no sospechaba nada, Hyunjin. Podría haber firmado un papel que seguías enamorado de Jamie Brooks. —El chico rodó sus ojos de nuevo.

—Siempre te daba pistas, te miraba todo el día, te hablaba todo el día, te mandaba mensajes todo el día. —Alargaba la palabra "todo" para exagerar— Pero ahí seguías hablando del tontito de Lee Minho.

Reí a carcajadas y es que ahora la situación me parecía muy cómica, pensar que sufría porque Minho no me había prestado atención teniendo a Hyunjin a un lado.

—Ay, sí qué chiste...—Reí. Hyunjin me abrazó de nuevo.

—Y yo sufriendo porque te gustaba otro, ts...—Hice un puchero y lo miré— Y que conste, que, nunca me acosté con tu amiga.

Alce las cejas, con eso sacando un peso que ni sabía y tenía dentro.

—¿No?

—No, ella inventó eso. Para poner celoso a Changbin parece, ahora no sé por qué a ustedes les siguió la mentira.

Frunci las cejas, si venía sabiendo que derrepente Adeline inventaba cosas o decía mentiras pequeñas. ¿Pero eso?

—Solo me siguió y después cada uno se fue para su casa. Ni siquiera nos besamos, seguí con la broma para ver si te ponías celosa pero ni siquiera te llamó la atención.  —Rió— De lo mejor que me querías emparejar con ella.

También reí al recordar aquello y Hyunjin con agilidad se las arregló para robarme un rápido beso de mis labios. Lo acerqué nuevamente y besé su labios, esta vez más calmado. Acariciando aquel cabello largo que se gastaba. Un beso mágico, un beso que si me hubieses preguntado hace tres meses que si se realizaba lo hubiera negado hasta el último.

Hyunjin no era más que lo que siempre desee.

-----------------
Muchas gracias por leer ♡
No olvides poner una ⭐ si así lo quieres 💖