° INFIELES ° IMAGINA CON YEONJUN °

20. nueva vida

Estaba en el aeropuerto, en toda esa semana yeonjun no apareció, supuse que ya se había enterado.

Yo había vendido la casa, fue un poco difícil, pero alguien la compró, quedándome con algo dinero.

Al respecto con yeonjun, deje una carta en la casa de los chicos, contándole lo del trabajo, lo que yugyeom y que yo también sabía que me estaba siendo infiel.

[...]

Ya estaba adentro del avión, veía por la ventana. Tal vez a la gente le aburre y prefiere dormir, en mí caso estuve viendo cada fracción de las nubes, era hermoso, era como ver las estrellas acompañadas de la luna... pero en este caso de día. Claramente no había estrellas ni estaba la luna.

[...]

Baje del avión con una sonrisa de oreja a oreja, realmente estaba feliz. No podía creer que este en Los Ángeles.

Fui adentró del aeropuerto para agarrar mis valijas y salir, al salir había un hombre vestido formalmente.

— perdone, usted es t/a t/n?.— dice "mirandome" o eso creía ya que él tenía lentes de sol.

— sí, soy yo. — supuse que era unos de los  mánager de chanel.

— yo trabajo para chanel, me llamo Michel — dice estirando su mano para estrecharla.

— un gusto Michel — digo estrechando su mano.

— bueno... vamos al auto, que te llevo a las oficinas de chanel.

Nos soltamos y me llevo a un auto negro, acá me podían secuestrar o que salga todo bien.

Él me abre la puerta y yo me reí, pero entre. Al estar los dos en el auto había un silencio un tanto incómodo, con lo que decidí romperlo.

— sabes... Yo se abrir la puerta por mi cuenta— digo mirándolo con una sonrisa.

Michel a escuchar eso sólo da una pequeña risa y me mira por unos cortos segundos de reojo. Al parar en un semáforo me mira haciendo que lo mire.

— no hace falta que hagas eso conmigo... Me siento estúpida, aparte yo se abrir puertas. —digo regalandole una sonrisa.

— supuestamente a eso se le llama caballerosidad. — dijo para despues dar una sonrisa ladina.

— sí... pero, conmigo no va. — agarre sus mejillas llevando su cara al frente, dando al semáforo casi en verde.

[...]

Ya había salido de la oficina, mañana empezaba, por ahora me quedaría en un hotel que ellos pagarían, sólo hasta que consiga dinero para quedarme estable en una casa.

***