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Narra Antonella

Me arreglé con lo que tenía en la valija, por suerte siempre llevo una muda de salir en la valija, Rober me pasó la dirección y me maquille y salí rumbo al salón de la fiesta. Llegué, me estacioné y entré y rápidamente busqué a Rober y junto con ella estaban todas, todas mis amigas, tanto tiempo de no verlas por miedo de lo que digan.

-Hola amigas, me extrañaron o me cambiaron?- pregunté y me abrazaron.

-No te imaginas lo que te extrañamos, como te vamos a cambiar por la chiquita que se venía a hacer la amiguita, y nosotras la mirábamos como fuera bitch, hasta que bueno se cansó de ser ignorada por nosotras- Michaela, mujer de Rugani.

-Igual, vino re pocas veces y se la pasaba con el celular y si venían Alicia y Dolo, solo hablaba con Dolo, trataba de sacar tema con Alicia y ella como que la ignoraba- dijo Meli, mujer de Cuadrado, y reímos.

Pensarán que somos malas o forras, pero yo no podía parar de reír cuando me masajeaban en los partidos hablando de ella.

-Y Anto qué onda con Paulo?- me dijo Meli, mujer de Bentancur.

-Qué onda? No hay ni va a volver a haber onda con Paulo chicas- dije mientras nos sentábamos en unos sillones de ahí.

-No sé yo vi otra cosa en los pasillos, un querés venir a la fiesta esta noche- dijo Rober y la fulminé con la mirada.

-Le dije que no, y le volvería a decir que no- dije firme

-Estás segura que todavía no hay cenizas?- me preguntó Josephine

-Les aseguro a todas que no hay cenizas, ni nada entre Paulo Dybala y yo- dije segura y seguimos hablando de temas triviales.

Después de un rato me fui a la barra a pedir algo y cuando tuve mi trago en mano, un chico bastante lindo se me acercó a preguntarme si quería bailar y acepté y tomé mi trago y nos dirigimos a la pista donde estaban todos bailando. Estuvimos bailando un rato hasta que empezamos a balitar mas pegados y no me molestaba hasta que se empezó a pasar del límite pero no tenía la suficiente fuerza para alejarlo de mí. Hasta que se acercó Paulo y lo agarró del cuello de la camisa.

-No te acercas mas a ella entendiste, aléjate de ella- lo soltó y me agarró de la mano, no fuerte ni apretando solo un agarre.

-Qué te pasa nene? Yo podía sola, no te metas en mis problemas, no sos nadie para hacer la escenita que acabas de hacer- dije fría y enojada, en realidad tendría que agradecerle, pero no quiero quedar frágil ante él.

-Me pasa que te vi ahí con otro pibe pegados, bailando y me morí de celos Antonella, eso me pasa, que tuve celos- lo interrumpí

-No tenes derechos a tener celos, nosotros ya terminamos Paulo, me dejaste, me cambiaste, cortamos y al tiempo ya estabas con otra Paulo, entendes eso?

-Sinceramente no lo entiendo, no entendí porque te dejé Anto- dijo mientras se sentaba en los sillones de afuera.

-Yo saqué mis propias deducciones, ella era más joven que yo, más linda, más fama- mis ojo se aguaron pero rápidamente sequé-Sigo? Ella seguramente fue más que yo o no?-negó- respóndeme Paulo, decime algo, sabía que perdía mi tiempo viniendo acá- dije y me levanté.

Estaba por entrar al salónpara buscar mis cosas pero él me agarró del brazo, me dio vuelta me pegó a supecho y me hizo levantar la cara y me miró con esos ojazos verdes y me besó.

La periodistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora