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Narra Antonella

-Y ahora vamos a Brasil, más precisamente a Salvador, donde esta nuestra compañera Antonella Cavalieri que el domingo asistió al partido de la selección contra Colombia en el cual nuestra selección perdió 2 a 0 contra la selección colombiana, es así Antonella?

-Así es, ayer los jugadores tuvieron la oportunidad de pasar un tiempo con sus familiares y hoy temprano salieron rumbo a Belo Horizonte donde se enfrentaran contra Paraguay- dije sonriendo

Hablamos un rato del rendimiento de los jugadores y de los posibles once en el próximo partido hasta que tocamos el tema de mi camiseta.

-Ahora te vamos a hacer una pregunta que estamos casi obligados a hacer- reí- El día domingo usted fue al partido o no señorita Cavalieri?- me preguntó y asentí- con la camiseta de nuestro selecciona no?- asentí nuevamente- Con la camiseta de un jugador en particular, la camiseta con el número 21 y el apellido del correspondiente a ese jugador no?- me preguntaron y asentí riendo sonrojada- Algo que decir?

-Es verdad que me dieron esa camiseta y me la puse porque fue un regalo

-Regalo del 21 de la selección?- me preguntaron y reí

-Me la regalaron, no voy a decir quién- dije

-Bueno, dejemos de dar vueltas, volviste con el 21 de nuestra selección?- preguntó otro y reí

-Como dije el otro día con el señor Paulo Dybala mantenemos una muy buena relación profesional, yo tengo buena onda con algunos familiares de él- seguí dándole vueltas Antonella, pensé

-Pero te vimos saliendo del hotel de la selección acompañada por las mujeres de algunos jugadores, y en el partido también se la vio hablando con ellas- ellos quiere que lo digan

-Estamos alojadas en el mismo hotel y pegamos buena onda- dije haciendo referencia a las Camis.

-Entonces, no confirmas nada con el 10 de la Juventus- negué- bueno, por hoy no te insistimos más, por hoy eh, te dejamos porque sabemos que en un rato vos también tenes que partir a Belo Horizonte- asentí y nos despedimos y me fui al hotel donde ya estaban todas listas, busque mis cosas y de vuela a la trafic que nos llevaba al aeropuerto, un vuelo cortito de una hora y cuarto.

-Tengo hambre- dijo Vicki que estaba sentada a mi lado y reí

-Ay amor, recién subimos- le dijo Galante que estaba del otro lado con Giovanni

-Yo tengo unas barritas de cereal de chocolate, querés?- le pregunté y asintió, busque en mi cartera y le di una.

-Cómo se dice Vicki?- le dijo Galante y reí

-Gracias Anto- me dio un beso en la mejilla y morí de amor, todos estos nenes son así de dulces.

-De nada linda- le dije y me puse a hablar con Paulo, le avisé que estábamos saliendo para allá y hablamos hasta que nos avisaron que teníamos que apagar o poner el celular en modo avión.

-Anto, querés ver mis dibus?- me preguntó Vicki

-Vicki, no la molestes a Anto- le dijo Cami y negué

-No hay drama Cami, que dibus ves?- le pregunté y me puso sus programas.

El viaje fue tranquilo hasta que empezaron unas mínimas turbulencias que asustaron a la pequeña Paredes.

-Tengo miedo- me dijo y la abracé sin quitarme el cinturón.

-Ya pasan bonita- le puse los dibujos animados y el resto del viaje pasó y aterrizamos.

-La próxima voy yo con Anto- dijo Gio cuando bajamos del avión

-No, yo voy con Anto Gio, vos anda con mamá- le dijo Victoria

-Hagamos algo, ahora si querés venís conmigo Gio, y en el próximo vuelo voy con Vicki- dije y asintieron

-Tenés ese carisma con los niños que te siguen a todas partes- dijo Galante y reí

-Parece que sí- dije mientras agarraba mis valijas.

Llegamos al hotel de Belo Horizonte que quedaba un poco más lejos del hotel de la selección. Nos dieron nuestras habitaciones y luego bajamos a comer, cenamos y luego subimos a nuestras habitaciones, mañana iríamos a dar una vuelta, ya que el partido recién se jugaría pasado mañana, mañana llega la familia de Paulo que se quedaron un día más en Salvador.

La periodistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora