Hipo:
Jack, Kristoff, mi padre y yo estábamos ayudando a cargar con las mesas hasta el jardín donde daría lugar la celebración de la fiesta de la boda. Era tarea difícil que requerirá de hombres musculosos como yo.
Aunque todo se complicaba más al saber que en unos días veré a Mérida. Espero que asista a la boda de Anna. Había escuchado que el cierre de las olimpiadas era el mismo día que la boda de Anna. Deseo con todas mis fuerzas que decida asistir esta boda, pero no puedo ser egoísta con ella. Tampoco iba a impedirle ir a esa celebración tan esperada por ella de las olimpiadas.
-¿Que te sucede? ¿Pensando en la segunda chica en llamas? -Dijo comparando el cabello rojo de Mérida haciendo referencia a una saga muy conocida.
-¿Tanto se me ve? -Suspire cabiz bajo.
-Si.
-Bueno, en realidad nose que hacer, ¿Crees que debería declararme cuando vuelva? Mejor la beso y salgo corriendo como gallina antes que me mate.
-¿Quieres que te de uno de mis ejemplos? -Dijo Jack guiñando me un ojo.
-¡Alejate de mi! -Tome una botella de agua y comencé a salpicarle a Jack con ella. -¡Atrás demonio de la lujuria, Atrás!?
-¡¡Idiota!! ¡Vas a estropear mi cabello!
-¡Te reprendo en el nombre de Dios! Te digo que te alejes de mi demonio de lujuria.
-Ustedes, dejen de jugar al exorcista y ayúden con las mesas que quedan. -Dijo mi padre con voz llena de autoridad.
-¡Si señor! -Respondimos al unísono, como si estuviéramos en el ejército.
-Tu padre aveces me asusta. -Dijo Jack como si tuviera escalofríos.
-A mi también, pero más miedo me das tu con tus explicaciones explícitas. -Ambos nos reímos ante mi comentario y continuamos llevando las mesas.
Mérida:
Apenas estaba entrando al aeropuerto cuando me percate de que Bárbara también estaba ahí. Ella se había dirigido hacia mi.
-¿Ya te vas? -Cuestiono algo triste.
-¿Padres me pueden dejar sola con Bárbara? por favor. -Ambos se retiran dejándonos a las dos solas.
-Sabes en tan poco tiempo te he tomado tanto cariño.
-¡Yo también! -Ambas nos dimos un fuerte abrazo. Sabiendo que probablemente sea el último.
-¡Ahora ve tras tu hombre! -Menciono eufórica.
-Lo haré. -Cerré un puño entre mis manos.
-Adiós que tengas éxito en tu vida. -Menciono mientras me retiraba de mi habitación.
-¡Igual! espero que tu vida este llena de muchas cosas lindas. -Mé despedí con la mano mientras veía como se alejaba poco a poco en la distancia.
Llegue a la conclusión que despedirse apesta y más cuando se trataba de personas tan especiales como ella. Aunque sabía que esto era un proceso natural de madurar.
"Es increíble como en tan poco tiempo puedes conocer personas tan maravillosas. Tener la más grata experiencia de haber ganado medalla de oro. Aprender valiosas lecciones de vida." Pensé mientras pasaba por la seguridad del aeropuerto.
-Has tomado una buena decisión. La boda de Anna esta quedando estupenda. El tema es "Cuento de Hadas." -Menciona mi padre al notar que había estado bastante pensativa durante los últimos minutos.
-Si ya muero por ver el traje que Rapunzel le esta diseñando a Anna. Nadie lo ha visto, incluyendo ella. -Se podía notar en los ojos de mi madre la emoción por ver el vestido de novia.
-¿Y tu madre diseñaste algo?
-En realidad diseñe nuestros trajes. Anna escogió para sus damas de honor un traje mi colección de primavera entonces no pase mucho trabajo. Descuida te hice un traje precioso con tu color favorito.
-Descuida se que quedo espectacular. -Le sonreí a mi madre y ella me devuelve la sonrisa.
Luego de largas horas de vuelo, finalmente había llegado a mi apartamento. Debía aceptarlo no había nada mejor en el mundo que regresar a tu hogar. Esa sensación no se comparaba a ninguna. Al asomarme la puerta instantaneamente se abre. La niñera de mis hermanitos me abrió y sorpresivamente los tres se abalanzan sobre mi.
-¡Hermana, por fin regresaste! -Dijeron los tres al unísono.
-Mé Alegra tanto de volver a ver mis tres chiflados. -Los abrace con mucha fuerza. -Más vale qe hayan sido niños buenos en mi ausencia.
-Sabes que somos unos angelitos de Dios. -Sonrió uno de ellos.
-¡Yo estoy feliz! -Un sentimiento de alegría ilumino el rostro de mi segundo hermano trillizo.
-¿Se puede saber a que se debe tanta felicidad?
-¡Si!... Por qué vamos a asistir a nuestra primera boda.
-Hermana, ¿Cuando te casaras?
-¡Woah! -me sorprendí ante dicha pregunta. -Eso es un tema de adultos.
-Pero miranos, hemos crecido tanto mientras te fuiste. ¡somos unos hombres ya! -Dijo orgulloso.
-Yo soy el más maduro de todos, por eso seré tu padrino de bodas.
-No yo lo seré.
-Esa labor me corresponde a mi.
-Descuida los tres pueden ser mis padrinos. -Les sugerí para tratar de calmarlos.
-¡SI! -Gritaron los tres al unísono.
-Ya dejen a su hermana tranquila. Debe estar agotada, hoy ha sido un día largo y cansado. -Grita mi padre con voz de autoridad.
-Ten te he preparado un te que ayudara a dormir como un bebé.
-¡Gracias mamá! -El te de manazanilla estaba caliente tal como a mi me gustaba. Al finalizar tome una ducha y me fui directo a dormir.
(...)
Estaba enrollada entre mis sábanas como un burito. Sumida en un sueño profundo, siento una voz no tan angelical que me grita en mis oídos...
-Despierta!! Despierta!! -Grito uno de mis hermanos. Mientras que los otros dos se ayudaron mutuamente para dejar entrar la luz del sol en mi habitación. Comencé a revolcarme entre las sábanas como si fuera vampiro muriendo a causa del sol.
-Es domingo! Respeten a sus mayores! - Volví a enrollarme entre las sábanas como burito.
-Ya se te olvido por completo que hoy es la boda de Anna.
-Prometiste que asistirías.
-Es cierto... la boda. Rayos se me había olvidado por completo.
...............
Capítulo dedicado a:Vane_haddock1
AstridVanessa2
Cristal_Frost
ArianCoronaFrost99
LuciérnagasdelaluzLas quiero a todas y nos veremos en el próximo capítulo.
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Merricup: ¿Amigos o Amantes?
ФанфикHipo y Mérida son dos grandes amigos. Aunque sin saberlo poco a poco Hipo comienza a enamorarse de Mérida. Hace todo lo posible para que Mérida logre fijarse en ella. ¿Lograra Hipo enamorar a Mérida? Una historia llena de risas, muchas sorpresas y...