𝟎𝟔. 𝐄𝐗𝐏𝐋𝐎𝐒𝐈𝐎́𝐍.

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Mi cuerpo se tensó y mi mandíbula casi cae al suelo, mis ojos empezaron a picar, pero opté por no llorar.

-¿Dónde está?-Susurré.

-Está en la base de Donovant- Dijo Vicenzo.

-Ragazzi, tenemos que idear el plan para acabar con esos bastardos.- Exclamó Lorenzo.- Manos a la obra. 

Todos empezaron a moverse de un lado a otro, mientras yo seguía parado en el mismo sitio desde que había llegado. Sé que Donovant no vive en su base, tiene una casa grande a las afueras de Brisbane y Chiara estaba en la base, ¿qué coño estaba pasando? Solo quería ir y volverla a tener a mi lado.

-Ashton.-Lorenzo interrumpió mis pensamientos.- Ve a casa a descansar y por la mañana vienes.

Negué con la cabeza.

-Quiero ayudar a joder a ese imbécil.

-Ragazzo, te entiendo perfectamente - Suspiró.- Pero debes ir a descansar y mañana te contaremos lo planeado ¿Capito?

-Está bien.- Finalmente acepté.

Me dirigí a la salida para ir a casa.

-¿Ashton?

-Dime, jefe.- Me giré.

-La tendrás de vuelta contigo.- Me dio una sonrisa fraternal.

Llegué a casa y entré sin hacer mucho ruido, no quería un interrogatorio de mi madre. Subí a mi cuarto, me cambié y me acosté. No me podía creer que la habían encontrado y que probablemente pronto la podría tener de vuelta.


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Me despertó el horroroso sonido de la alarma y la apagué. Pensé en hacerme el remolón, pero a mi menté llegó la llamada de anoche y Chiara, así que pegué el salto de mi vida hacia la ducha y mi armario.

-¡Harry, Lauren, Ashton el desayuno está listo!-Llamó mi madre desde la planta baja.

Hice caso a su llamada y bajé. Saludé a mi hermano revolviéndole el pelo y dándole un beso a Lauren.

-¡Hey! No me despeines.- Se quejó Harry y yo reí.

Vi que mi madre me miró extrañada al escucharme reír.

-¿Y esa alegría?- Preguntó.

-Eh, nada mamá, hoy simplemente me he levantado mejor que otros días.- Susurré.

Terminé de comerme mis cereales y fui a fregar el plato, cuando llamaron al timbre. Harry fue a abrir la puerta.

-¡Ashton, es Jack!- Gritó.

-Ya salgo, solo déjame coger mis llaves.-Dije.

Cogí mi chaqueta vaquera y mis llaves, tanto del coche como de la casa y salí de ella.

-¿Qué pasa, Ashton?- Saludó y le choqué la mano.

-¿Vamos?-Pregunté y asintió.

Nos montamos en mi coche y él venía en su moto. Vino a recogerme porque tampoco recordaba bien el camino al cobertizo y prefería no perderme.

Al llegar, aparcamos y entramos dentro del cobertizo. Estaban todos reunidos y nos miraron al entrar.

-Bien, ragazzi- Comenzó Lorenzo a hablar- Ahora que estamos todos, debo decir que el plan es muy bueno, pero hay que perfeccionar.-Nos señaló con el dedo a todos.- Porque no queremos que todo salga mal y esos hijos de puta salgan vivos de ahí.

Todos asentimos.

-Ahora, es momento de repartir los papeles para la escena.- Soltó el jefe amargamente.

Estaban repartiendo el trabajo del ataque, cuando se escuchó una explosión fuera del cobertizo.

-¡Los cerdos alemanes han reventado nuestro almacén de bombas!- Entró gritando una chica que, en los dos días que llevaba aquí, no había visto.

Todos salimos corriendo y, efectivamente, todo el material para hacer las bombas y ellas, habían quedado en cenizas. Lorenzo comenzó a gritar de todo en italiano, la vena de su cuello iba a reventar y su cara estaba roja de ira.

-¡Vaffanculo! ¡Figlio di puttana!- Empezó a darle patadas a todo lo que veía.

-Jefe, relájate.- Se acercó Jack.- Vamos a organizar todo para deshacernos de ellos.

-Sergey Donovant, sei morto.- Escupió.- Vamos a continuar organizando el ataque.

Nos volvimos a adentrar en el cobertizo y nos sentamos todos en los sofás y sillones. 

-Hola, bombón.- La chica de antes se sentó al lado mía.- Me llamo Ivana, creo que no te había visto antes por aquí.

-Ivana, deja al chico.- Marco habló.

-Solo me estoy presentando.- Puso cara de inocente.- ¿Cuándo llego esta preciosidad y porqué?- Volvió su cabeza hacia mi.

-Llegué ayer porque Donovant tiene a mi novia.- Escupí.-Así que hazme el favor de dejarme en paz.

-Ivana, fuera de aquí.-Entró Lorenzo, un poco más calmado.- Esta misión no es para ti, no de momento.

-Está bien, jefe.- Se levantó y se fue.

-Muy bien, comencemos.-Empezó Jack a repartir la función de cada uno en el ataque.

Pasó un buen rato explicando el plan a cada uno, y a mi aún no me había dado mi parte. Estaba temiendo de que no participaría.

-Y por último.- Lorenzo habló.- Ashton irá con Vicenzo y cuando Marco dé la orden, entráis en el sitio donde se encuentra Chiara, sé que no es una parte fácil del trabajo, pero confío en ti y en tu amor por ella, Ashton.




𝐍𝐎𝐒𝐓𝐑𝐀 𝐂𝐈𝐓𝐓𝐀́ | 𝐀𝐒𝐇𝐓𝐎𝐍 𝐈𝐑𝐖𝐈𝐍 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora