✨LuzuPlay Month✨ 2020

18 🎶Canciones🎶

—Así que una serenata, eh.

Mencionó un pelinaranja con un rostro  que demostraba interés en el tema.

—Hombre, cumplimos 1 año ya y apenas lo recordé. ¿Qué más le puedo regalar?

—Bueno...

Miles de millones de ideas vinieron a la cabeza de Lolo antes que una serenata. Bueno, principalmente porque aquel pelinegro no era un gran cantante que digamos.

—¡Lolito, coño, haremos la serenata!

—Vale, vale. Si quieres llamo a Mangel para ayudar, eh.

—Claro, tráelo. 3 tontos son mejor que 2.

—... Por cierto, ¿crees que Luzu te hará caso? Digo, llevan 2 semanas sin hablar siquiera.

Auron se levantó sonriente de su asiento y le dio el último sorbo al vaso de refresco que tenía en manos, para luego estamparlo en la mesa.

—Está será mi gran disculpa.

—Pero tío...se comió tu pedazo de tarta, creo que él debería disculparse.

—Pues la verdad es que sí, pero si no me disculpo yo, él no lo hará...

El pelirrojo se levantó y, al igual que Auron, dio el último trago de su vaso y lo estampó en la mesa, por desgracia el vaso se rompió.

—Uhh... No ha sido a propósito, eh.

—Mira...No hay tiempo, coño, ya te mataré después. Llama a Mangel.

Lolito tomó su celular y llamó a su amado Mangel. Auron igualmente sacó el suyo y checó la hora.

—2:30 a.m. La hora de el amor, ¿verdad, Lolito?

—Ni que lo digas, eh. Oh, ¿mi niña?... Necesitamos tu ayuda, ven a casa de Auron pero corriendo, trae tu kazoo.

Y ahí esperaron varios minutos, hasta que llego aquel chico de gafas.

2:41 a.m

Todo estaba listo, Lolito llevaba sus ganas de bailar y Mangel también, además de su kazoo. Auron llevaba su voz y una guitarra la cual había aprendido a tocar 30 minutos atrás gracias a un tutorial de YouTube.

—Vayamos a la casa de Luzu ya, coño.

Y así fue, se pusieron en marcha hacia la casa de aquel castaño, del cual tanto estaba enamorado aquel pelinegro.

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Luzu estaba pensando acostado en su cama, el día anterior había cumplido 1 año con su amado, pero se había enojado con él 2 semanas atrás. Pensaba que pronto se reconciliarían, Auron no era mucho de molestarse por tanto tiempo, pero al parecer esa rebanada de tarta le había dolido más que nada. Estaba bastante decaído, no había recibido ni una llamada del pelinegro, y el tenía listo su regalo desde hace 1 mes, un regalo que quizás no podría darle a su chico por su pelea.

Estaba al borde de las lágrimas, hasta que escuchó unos golpes por pequeñas piedras en la ventana.

—¿Eh?

Luzu se levantó rápidamente de su cama y abrió la ventana para asomarse, se llevó una apedreada en toda la cara.

—¡Oh, Luzu, perdona! ¡Mejor asómate por el balcón!