Capítulo 24

417 50 14
                                    

Jimin

¿Nunca les ha pasado? ¿Nunca han experimentado un corazón roto al oír unas simples palabras? ¿Nunca se han sentido completamente destrozados por una sola confesión?

Lo pregunto, porque me ha pasado un sábado por la noche, cuando escuché una conversación que no debía. Cuando escuché de la propia boca de Yoongi hyung, que le gusta Taehyung, mi mejor amigo.

Pensaba que quien le gustaba, era Jungkook. Que ingenuo fui todo este tiempo.

Estoy frente a la casa de Yoongi hyung, a punto de llamar a la puerta.
¿Tengo derecho a hacer esto? No lo sé, pero necesito respuestas. Necesito de alguna manera saber que rayos está pasando, a pesar de que eso agrave este dolor que me carcome por dentro desde ya hace un mes. Lo he pensado mucho y creo que no estaré tranquilo hasta que tenga esta conversación con él.

Alzo mi puño finalmente, pero mis nudillos dan un toque inaudible a la puerta de madera. Exhalo y tomo una gran bocanada de aire, tratando de prepararme mentalmente para lo que se aproxima. Soy demasiado tímido a su alrededor, pero hoy tendré que, de algún modo, dejar eso de lado para lograr mantener una plática decente con él.

Luego de segundos divagando, me enfoco nuevamente y me dispongo a dar leves golpes en la puerta. Espero inquieto a que alguien me abra.

—Jimin. —Yoongi hyung está finalmente frente a mí, observándome con expresión apacible pese a tan, pienso yo, inesperada visita—. Adelante.

Él hace se hace a un lado y me invita a pasar. Camino despacio y me adentro a su hogar; este sigue igual a como lo vi por primera vez cuando me rescató de unos delincuentes. A mano derecha está la sala con muebles antiguos donde hyung me ayudó a calmarme luego de haber sido atacado. Una sonrisa melancólica se forma en mi rostro al recordar sus dulces palabras que me sirvieron de alivio.

—Sé que mi visita te debe resultar extraña —digo, dando lo mejor de mí para mantener una actitud confiada.

—Sólo un poco —admite él. Parece analizar cada uno de mis gestos, tratando de adivinar la razón por la cual me encuentro aquí.

—Necesito hablarte de algo importante —suelto finalmente, sabiendo que estas palabras solo lograrán que él tenga más curiosidad.

—Siéntate. —Me dirige hasta la sala y espera a que tome asiento. Cuando lo hago, él se acomoda en el mueble frente a mí y me mira seriamente—. ¿De qué quieres hablar?

Y es aquí donde tengo que reunir todas las fuerzas posibles para no sucumbir ante los deseos de mi propio corazón roto, que me pide agonizante que me vaya de inmediato, y me amenaza con derrumbarse en cualquier momento si no le hago caso.

Pero no puedo hacerle caso. Incluso si termino hecho trizas en el suelo, tengo que hacer esto. Con mi decisión ya tomada, voy a por el contacto visual nuevamente y comienzo a hablar.

—Lo sé todo.  —El ceño de hyung se frunce ante tal declaración, pero antes de que pueda preguntar a qué me refiero, continúo y suelto la bomba—. Sé que te gusta Taehyung.

Asombro, estupefacción, espanto. En eso se resume la mirada que me otorga el pelinegro frente a mí.

—¿Cómo...?

—Te escuché accidentalmente en el cumpleaños de Jungkook —explico.

Hyung se mueve hacia la orilla del mueble y apoya los codos en sus muslos. Junta sus manos y coloca su cabeza sobre estas, tapando su boca. Me observa pensativo durante unos segundos.

—¿Alguien más sabe?

—No, tranquilo. —Un peso parece caer de sus hombros cuando le digo esto.

A Mi Nivel [Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora