Me importa tanto que duele

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El letrero del parque Candleridge decía que allí había un número de caminos y senderos naturales, pero eso no era por lo que estábamos allí. No, estábamos allí para enterrar un cuerpo. Con suerte, solo uno. Harry flotaba por entre los árboles, después de haber sido enganchado dentro del auto de Spade sin una palabra. Él tenía que tocar algo para viajar largas distancias. La excepción era si estaba en la línea LEY**, lo cual yo todavía no entendía. Algo sobre las corrientes invisibles de energía que actúan como carreteras espirituales. Mas tarde, le preguntaría más detalles sobre eso. Ahora mismo, estaba discutiendo con Joel, otra vez.

// línea LEY o campo magnético terrestre, que serían unas alineaciones de energía que se encuentran en la mayoría de los lugares sagrados del mundo construidas con propósito desconocidos desde tiempos prehistóricos.//

―Spade actuando en el calor del momento es una cosa, pero si tu matas a estos tipos ahora, sería a sangre fría, Joel. Ellos deberían ir a la cárcel, además realizarles algo de lavado de cerebro que los haga desfilar toda la noche, por no mencionar los derechos civiles, tan pronto como los dejemos escapar. Pero ellos tienen familias que no merecen llorar sobre sus traseros muertos.

―Todos tienen alguien que se preocupe por ellos,― replicó Joelmsin piedad. ―Incluso los monstruos. No es justo, pero no cambia la necesidad.

―El arma no estaba cargada ― murmure, cambiando de táctica. ―Lo verifique. Además, no es como si algo hubiera pasado. Tenía todo bajo mi control.

―¿Es ese el sangriento punto?

Exasperado, Joel apago el auto y se volvió para mirarme.

―Tu no puedes escuchar sus pensamientos. Yo si. Esta no es la primera vez que hacen una cosa así e incluso si tu los detuviste y los forzaste a disculparse histéricamente, sus intenciones fueron las mismas. Si ellos no fueran humanos, ¿estarías discutiendo conmigo sobre matarlos?

Él me tenía allí. Por la mirada de sus ojos, él lo sabía, también.

―Los vampiros y ghouls tienen sus propias reglas. ― Trate de nuevo. ―Ellos saben lo que podría pasar si ellos hacen algo así. Esos payasos no obtuvieron una copia del libro de juego. Ellos merecen un tiempo en la cárcel, sí, pero no la muerte.

Joel resopló. ―¿Porque no se les ocurrió a ellos que estaban haciendo algo tan espantoso, si los atrapaban, hubieran sido ejecutados en el acto? No es mi culpa que los vampiros tengan una forma más justa para castigar a los violadores que los humanos.

Puse mi cabeza en mis manos. Me dolía. Concedido, probablemente dolía mucho menos que cuando el cabello tupido golpeó el concreto del estacionamiento. Lógicamente, Joel estaba en lo correcto. Pero igual se sentía mal.

―Tu obviamente te decidiste, así que haz lo sea que vayas a hacer. Eres muy fuerte como para que yo te detenga.

Joel me dio una mirada insondable antes de saltar fuera del auto y abrir el maletero. Escuche mientras hacía que los dos hombres cargaran a su amigo hacia el bosque. Entonces Joel les ordenó que cavaran con sus manos.

Fueron tal vez cuarenta minutos antes de que se fueran. Entonces escuche algo como un suspiro resignado.

―Esto va en contra de mi juicio, Gatito... miren justo aquí, los dos irán a la estación de policía más cercana y confesaran sobre cada maldito crimen que hayan cometido, excluyendo sólo el entierro de esta noche. Cuando sean arrestados, se rehusaran a un abogado y cuando estén enfrente del juez, se declararán culpables. Pasarán su tiempo asignado en la cárcel sabiendo que se merecen cada segundo en ella. Ahora tomen sus inútiles vidas y váyanse.

Destined for an early grave  [joerick]    -ADAPTACIÓN-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora