No te soltaré

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Eri caminó directo a la escuela con una sonrisa.

-Parece que alguien está feliz- dijo Tamaki- ¿acaso ocurrió algo?

-Nada, mamá- dio brincos pequeños como si fuera una bailarina.

-¿En serio? Pues parece que verás a alguien en la escuela. Algún chico ¿acaso?

Eri se sonrojó- ¿qué? ¿Cómo crees? Por supuesto que no- río nerviosa.

-Con que es por eso- sonrió.

-No, espera, no es lo que te imaginas- movió las manos rápido tratando de justificar su respuesta.

-Mi niña está creciendo rápido.

-¡Qué no es eso!- eso no causó que su rostro se pintará de rojo.

Tamaki se despidió de su hija sin borrar su risa, a lo que Eri corrió hacia el salón para no seguir con esa incómoda conversación.

El maestro Aisawa les pidió a los alumnos que se cambiarán y se reunieran al campo de béisbol.

Así, Eri ya estaba vestida con el uniforme deportivo de la escuela, todos ya estaba listos para lo que venía.

-En esta ocasión, harán calentamiento- explicó el maestro- después, necesitó que hagan una fila de hombres y otro de mujeres, por estaturas.

-¡Sí!- contestaron unísono.

Así, Eri no perdió el tiempo, se esforzaba por hacer los ejercicios, sus compañeras la miraban con asombro al ver a la chica con tanto entusiasmo.

Después, llegó la hora de ir al campo de entrenamiento, ahí, en héroe trece los puso en equipo de tres personas, cada equipo fue dividido por los diferentes campos de entrenamiento. Su principal objetivo es rescatar a los civiles que se encuentran escondidos, deben pasar por robots de diferente tamaño para poder pasar.

Eri usó una de sus estrategias, y las chicas estaban más que felices el poder trabajar en equipo con ella.

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-¿Que quiere verme?- preguntó Izuku mientras toma una bebida que acaba de robar en una tienda- ¿Y por qué yo?

-Bueno, esa chica dice que le recuerdas a alguien que perdió hace tiempo- explicó Ali, saca una papa de una bolsa- y quiere confirmar si eres esa persona.

-No lo sé. Me parece sospechoso ¿no será acaso una trampa para entregarme a la policía?

-Si fuera así, ya lo habría hecho conmigo.

-¿Tú le hablaste? ¿Cuándo?

-Al día siguiente, después de que te venció en ese combate de cuerpo a cuerpo.

-Tal vez es por qué no fuiste el que la desafío.

-Es diferente. Por favor, sólo un momento, te prometo que cuando la veas, te darás cuenta de que no es una trampa.

-No lo sé, Ali. Me prohibieron que no me involucrara con un héroe.

-Ella aún no es un héroe.

-Pero es una estudiante de la escuela de héroes, está relacionado.

-Qué no es lo mismo. Izuku, te lo pido como amigo.

-Oh, no- sabía que su amigo conoce su debilidad, cuando quiere algo, usa su arma secreta, hace ojos de cachorro, e Izuku es propenso a acceder cuando alguien pide ayuda y su corazón le dice que debe hacerlo- esa cara y esos ojos dicen ¡Ah!- protestó- está bien, de acuerdo. Pero sólo por unos momentos.

El clonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora