¿Esto es amor? - (Got7/Yaoi)

Capítulo 22

Narrador omnisciente:

Era una tarde normal, claro que sí, Bambam estaba acariciando los cabello de Yugyeom mientras le cantaba y Jackson estaba con los brazos cruzados frunciendo su ceño por no tener la atención del tailandés. Habían pasado una hora desde que llegó y lo único que recibió por parte de su chico fue una sonrisa y eso estaba comenzado a calmar su paciencia.

— Mocoso no quieres ir a molestar a JB — gruñó y Yugyeom lo pensó, pero negó y siguió dejándose querer. 

— Sigue asustado por el mensaje que recibió — dijo Bambam tratando de justificar a Yugy, pues Jackson en cualquier momento se tiraba contra el menor y lo lanzaba por la ventana. 

— Seguro fue una fan — contestó — Solo bloquea el número y deja a mi chico — se paró y empujó a Yugyeom quien cayó al suelo y se sobó la cabeza.

— Eres un egoísta — gruñó el menor haciendo un puchero — Quiero cariño.

— Búscate un perro — dijo echándose sobre las piernas del tailandés, sonriendo tomó la mano de su chico y la llevó hasta su cuero cabelludo para recibir cariñitos.

Bambam se cruzó de brazos molesto con el chino celoso y Yugyeom se paró, caminó hasta su cuarto y cogió su celular, billetera y una casaca por el frío, se cubrió el rostro con un tapabocas y se colocó un gorro y salió del departamento de GOT7. Daría un pequeño paseo por las calles de Seúl para distraerse. 

— Interesante — susurró viendo como su hyung subía a un auto, rápidamente tomó un taxi e hizo que el conductor siguiera aquel auto en el que su hyung se fue. 

Solo iba echar un vistazo rápido, nada de chismes, no esas cosas son malas, curiosidad podía decirse o era un trabajo de investigación secreto. Sonrió por sus pensamientos y pagó el taxi, su hyung había salido caro, gastó más de lo que debería en transporte. Así que aquí era el lugar donde Mark había citado a su hyung Junior. Bueno debía darle puntos, el lugar era agradable. 

— ¿Tiene alguna reservación señor? — preguntó el mozo deteniéndolo en la puerta del restaurante.

— Yo... — susurró. 

No sabía que debía tener algún tipo de reservación. Ahora su investigación estaba perdida, nunca sabrá el chism... digo la información super importante. Estaba rezando por que alguien apareciera y le hiciera entrar al restaurante. Cuando está por rendirse e irse a su hogar con los ojos tristes volteó para caminar hacía la parada de buses sino fuera porque alguien lo tomó del brazo y lo llevó hasta el mismo señor que le preguntó hace un momento sobre su reservación.

— Viene conmigo — dijo aquella desconocida voz y Yugyeom volteó a ver aquel pelirrojo, su perfil era perfecto y esos ojos que acaban de voltear a mirarlo hizo que se sonrojara y se pusiera nervioso. 

El mozo asintió y llevó a ambos a una mesa, para suerte de Yugyeom estaba demasiado cerca a la mesa de su hyung y sonrió, el pelirrojo se sentó a su al frente y lo miró fijamente, inspeccionando el rostro de su menor. El bonito rostro que Yugy tenía, esos ojos oscuros, esos labios rosados y esa sonrisa tan brillante. Era hermoso.

Suspiró enamorado.

Aquel pelirrojo estaba llegando al lugar donde se encontraría con cierta persona, pero al final terminaron cancelando la cita hasta que lo vio, a un chico con tristes ojos queriendo entrar al lugar y dijo ¿Por qué no? Después de todo era su oportunidad para acercarse a ese chico que tanto le atraía. 

— ¿Vienes a espiar a tus hyungs? — preguntó rompiendo el silencio y la mirada y orejas paradas que tenía Yugyeom fueron descendiendo de la vergüenza. 

— No, yo vine a comer — respondió rápido — Bueno... — el pelirrojo sonrió — Gracias por hacerme entrar, no diga nada por favor — suplicó juntando sus manos — Mis hyungs no saben que estoy aquí.

— No diré nada si me cuentas el por qué los sigues.

— Es una historia larga — suspiró pensando que quizás aquel chico iba aburrirse — Estoy seguro que alguien como tú, se aburriría de escucharme.

— ¿Alguien como yo? — preguntó curioso por esa respuesta — Ambos somos personas, respiramos, sentimos, somos idols y compartimos escenarios en ocasiones. ¿En qué me diferencio de ti? — comenzó a reír y Yugyeom se encogió de hombros. 

Era verdad eran iguales estaban en el mismo rango por ser idols, pero nunca los llegaron a presentar formalmente. Solo un hola y adiós como respeto, había estado en ocasiones en casa de su grupo por un amigo que ambos comparten. Mas no habían entablado conversación alguna y quizás podrían tener cosas en común, uno nunca sabe. 

— Empezaré por como fue mi día — Yugyeom comenzó a narrar todo su día mientras el pelirrojo escuchaba atentamente. 

En otra mesa se encontraba Junior con Mark ambos en un ambiente incómodo. Sin saber como empezar la conversación, Mark estaba que se moría de los nervios y apretaba aquella cajita roja en sus manos cada vez que podía.

— Yo... Junior — dijo el americano llamando la atención de Junior — Quiero aclarar nuestra situación sentimental.

— Te escucho — dijo cruzandose de brazos — Porque aquí el único confundido eres tú, o quizás yo fui quien entendió mal tus intenciones de una relación seria y solo me querías para...

— No, jamás haría eso, eres importante para mí Junior — confesó — Solo que aún estoy inseguro de sí me amas — Junior lo miró indignado dispuesto a irse, sino fuera porque Mark volvió a retomar su palabra — Entiéndeme vivimos con la persona que fue tu primer amor hace años y lo peor de todo es que siento que lo prefieres a él. Tengo miedo que me dejes Junior, no soportaría perderte — sus ojos se cristalizaron y Junior tomó una de sus manos discretamente, sin llamar la atención de todas las personas a su alrededor — Te amo. 

Y Junior sonrió, tenía tantas ganas de besarlo en ese momento y con un sonrojo en las mejillas miró hacía la mesa y como una pequeña caja se acercaba hacía él con ayuda de la mano de su americano, Junior nervioso cogió la caja y la abrió y sus ojos lagrimearon de la emoción.

— Quiero que nos comprometamos y en un futuro nos casemos para formar una familia.

Y antes de que Junior aceptara, se escuchó un chillido y platos cayendo en todo el restaurante, ambos voltearon por el repentino ruido y escándalo que se había formado. Ambos sorprendidos por ver como Yugyeom se disculpaba con el mozo, un chico estaba lleno de comida y su cabello pelirrojo estaba manchado con una torta de chocolate. 

— Lo siento hyung — Yugyeom se agachó para ayudar al pelirrojo quien aún estaba confundido por como pasaron todo los sucesos en tan solo segundos — Una fresa — dijo cogiendo aquella fresa roja y jugosa que se encontraba en el cabello lleno de chocolate — Rico — sonrió y mordió un pedazo ante la atenta mirada de este chico misterioso, quien se sonrojo por observar aquellos labios bonitos de Yug.

— Eres alguien único Yugyeom y eso es lo que más me gusta de ti.

Y Yugyeom no pudo evitar sonrojarse ante las palabras de su mayor. Quizás ahora las fresas también le gustaban pensó Yugyeom en el auto mientras era regañado por Junior por todo el escándalo causado, mientras pensaba ese pelirrojo quien parecía una bonita y deliciosa fresa. 

- ¡HYUNG VAMOS AL SUPER POR FRESAS!

Holi.
¿Quién les gustaría que fuera aquel pelirrojo que estaba robando el corazón de Yugy? 👀🙄