Raptada y vendida al mayor mafioso

Capítulo 37

POV Matías

Cuando nos sentamos en los bancos del parque con los cachorros vinieron muchos niños pequeños a acariciarles. Se ven tan bonitos...

-Enana, asi van a ser nuestros hijitos. -Camila puso una expresión de asustada que me salió una risa muy contagiosa que ella luego se rio también.

-Mati tu estas loco eh. -La pase un brazo por detrás y le di un bonito besos, de esos que te dejan con ganas de más. Al rato nos pusimos a jugar con los niños al escondite. Creo que esta es la mejor tarde de mi vida, entre risas y más risas llegó el tiempo de la cena.

Nos despedimos de ellos y fuimos todos a casa de los enamorados, a ver que preparamos. Por el camino las chicas iban hablando entre ellas por detrás de nosotros y Jack y yo fuimos comentando los planes de futuro.

-Me gustaría vivir con ella en una casa más grande porque esta se nos queda pequeña... -Empecé a reírme como un loco, vaya dos viciados...

-Pues para mi Cami es el amor de mi vida, me quiero casar con ella y tener mil nenes y nenas correteando por la casa pero todo esto no va a ser posible hasta dentro de mucho porque primero quiero que ella acabe sus estudios y se saque las oposiciones que es lo mas importante... -Nada más decir eso me entró la nostalgia porque quedan mínimo 5 años... pero por nada del mundo quiero arruinar sus estudios porque se lo mucho que desea ser maestra.

Jack me contó que él todavía no piensa en casarse que se acaban de conocer y quien sabe, tal vez se pueden torcer las cosas.

Nada más llegar Camila y Luna se fueron a la cocina a preparar la cena, ni nos dejaron entrar. Jack cogió dos cervezas y nos fuimos al salón con los cachorros.

-Matías no estés mal venga anímate. Todo llega a su tiempo, aunque nosotros queremos todo ya de ya. -Tiene razón si...

-No entiendo como hacen algunas parejas para abandonar todo por tener las cosas en el momento... yo me niego rotundamente. -Jack me dio la razón, las cosas hay que hacerlas con la cabeza, asi que voy a aprovechar al máximo estos años porque solo vamos a estar nosotros dos. Tengo que hacer algún plan para las navidades, pero es que luego en enero ella tiene sus exámenes... Que jaleo todo...

Mientras Jack y yo fuimos planeando cosas para navidades las chicas ya nos gritaron que vayamos a la cocina. Mientras andábamos hacia la cocina un rico olor se apoderaban de mis fosas nasales...

-Chicos... hicimos ¡Pizzas caseras! -Wow, me encantan las pizzas caseras, las tres tienen buenísima pinta, a por ellas.

-Esperar vamos al salón mejor. -Vamos que nos han llamado para cargar con ellas.

Cuando llegamos me senté en el sofá grande y no se como la enana vino y se sentó entre mis piernas, tiene gestos que hacen que me derrita.

-Te amo. -Le susurré eso y ella se giró para besarme.

-Tortolitos ya basta de tanto amor, tenemos que cenar venga. -Todos nos reímos y empezamos a devorar las pizzas. De vez en cuando yo le daba algún beso a mi niña en el cuello y ella acariciaba mis brazos que les tenía enrollados en su cintura.

Estuvimos un rato comentando sobre cosas varias, la verdad es que hoy ha sido un día genial y completito.

-Chicos lo sentimos pero os tenemos que dejar que mañana me tengo que levantar pronto para hacer tareas de la universidad... -En cuanto dijo eso mi enana enseguida nos levantamos. Cogimos nuestros cachorros y nos despedimos de ellos, ojalá volver a repetir días como estos.

POV Camila

Nada más llegar a la casa me di una ducha en lo que Mati llevaba a los cachorritos a su casita. Me puse el pijama y me metí en la cama. Hoy fue un día precioso la verdad, no podíamos haber hecho algo mejor pero mis deberes me llaman...

Mati también se ducho y luego se metió en la cama conmigo.

-¿Qué te pasa enana? -Me fui arrastrando hasta llegar a su pecho desnudo y me apoyé en él.

-Estoy muy cansada. -Me dio un beso en la cabeza y poco a poco los dos nos fuimos quedado dormidos.

-Pi pi pi pi... -Odio el despertador... me levanté y lo apague y acto seguido me fui a dar una ducha para despertarme del todo... solo son las ocho y media de la mañana...

En cuanto acabé me puse algo ligero para estar por casa y me fui a despertar a mi nene asi se me hace mas llevadero el desayuno, que mala soy.

Me senté encima de él y en cuanto lo hice el abrió los ojos.

-Enana... ¿Qué horas son estas? -Yo empecé a reírme y me quede abrazándole, es que no le puedo querer más.

-Amor... ¿A que me acompañas a desayunar? -Hice un puchero seguro que con esto le dejo muerto.

-Enana eres de lo que no hay... venga anda vamos. -Me puse a saltar encima de él de la felicidad y el quejándose. Al final me cogió en brazos y bajamos a desayunar.

-Pero mira que pareja más feliz. -Los dos nos reímos por el comentario de Abigail.

Hoy nos preparó una macedonia de frutas y Mati su café y yo mi cola cao. Mientras desayunábamos empezamos a comentar que haríamos durante el día.

Yo hasta la hora de comer voy a hacer el trabajo que nos han mandado y empezar a redactar mis resúmenes. Mati primero va a ir al gym del sótano y después a pasear a los cachorros.

-Te quiero mucho pero voy a ir a hacer mis deberes que sino se me hace tarde. Le di un beso y me fui al estudio. Primero haré mi trabajo porque va a ser largo...

Empecé con la portada que es lo más fácil. Después medio hice el índice para ver que quiero contar y ya luego me puse a buscar información. También lo iba comentando con María para ayudarnos mutuamente.

Al cabo de un buen rato llamaron a mi puerta, que raro... Dije que pase.

-Señorita perdón por molestar pero son ya las once y media y como desayunó muy pronto le traigo ahora la merendilla.

-Abigail eres un amor de verdad, muchísimas gracias. -Me levanté a darle un beso y empecé a comer mi sándwich y a beber mi zumo natural. Creo que es hora de descansar diez minutos.

Del trabajo solo me faltan dos caras, la verdad es que he trabajado mucho. Ostras se me ha olvidado preguntar a Tony que tal esta... Le mandé un mensaje. Acabé mi merendilla y fui a llevar las cosas a la cocina. Justo cuando volvía hacia mi estudio me encontré a Mati con los cachorros. Cogí un ratito a los cachorros en brazos y después le di un beso a mi amor.

-Enana tampoco te me pegues una paliza eh. -Le di otro beso y me fui a acabar con mis cosas.

En una hora y media ya acabé el trabajo y lo envié. Creo que hice un buen trabajo estoy orgullosa de ello. A continuación, comencé a hacer mis resúmenes con colorines para entenderme mejor. La verdad es que hemos dado muy poco temario por no decir casi nada, pero prefiero ir avanzando yo para ir buscando cosas que no entiendo y luego en clase enterarme mejor si ya sé de qué va el tema.

Casi todos mis apuntes tenían color rosa, morado y azul. Que chulos me están quedando.

Después de dos horas al fin terminé, ya era hora estoy muy cansada. Son las tres menos cuarto ya.. ¡Qué locura!

En cuanto salí de mi estudio llamaron al timbre, que raro... Fui a abrir yo.

-Enana llama a una ambulancia corre. -¿Qué hace Matías con una chica en brazos? No entiendo nada. 

NOTA DE LA AUTORA

Wow cada vez sois más los que estáis enganchados a la historia de Matías y Camila. Cada vez me saltan más notificaciones de los likes a la historia, comentarios y de que la habéis añadido a vuestra biblioteca. Muchas gracias a todos por tanto, me alegro mucho de que os guste, un beso para todos.