Dominic© ✔️

Capítulo 44

Dominic

Después de que ese tipo apareciera en casa y después de decirle todo aquello a Milan, llegué al club de Tony.

Diablos, la adrenalina corría por todo mi cuerpo, quería golpear algo, algo que me sacara de la cabeza el hecho de que ella podía estar con él en estos momentos. Vi el saco a lo lejos, estaba solo y parecía tentador, pero por alguna razón me contuve, pelear no me ayudaría. Yo sólo quería pensar.

—¿Estás bien chico?— me había preguntado Tony cuando llegué. Me vió ahí solo y sin hacer nada, estaba sentado sobre una banca mientras miraba a los otros chicos practicar sobre el Ring.

Asentí.

Él llegó hasta mí y se sentó a mi lado.

—¿Te gustaría contarme algo?— preguntó.

Lo pensé.

No sabía si hacerlo, había pasado tanto desde que me desahogué con alguien, Newt era mi mejor amigo, pero había algo en mí que ni siquiera me dejaba hacerlo con él, -tal vez porque él sabía decirme las cosas tal cual eran- y la última persona...había sido Milan.

—¿Es por esa chica?— volvió a preguntar ante mi silencio— es tu novia ¿cierto?

Bueno, él y yo llevábamos un tiempo conociéndonos, supuse que no sería tan mala idea contarle algo.

—Ahora mismo, no tengo claro lo que somos.

—Pero son algo, eso es seguro.

—No lo sé— negué — lo que tenemos es algo... incomprensible.

Lo escuché suspirar.

—Lo cierto muchacho, es que el amor en ocasiones suele ser incomprensible— se cruzó de brazos y piernas mientras miraba hacia el Ring— pero siempre se quedará así, si lo miras todo el tiempo de esa manera, hay que pensar que es comprendido para que así sea.

—¿Cómo es que ahora estamos bien y de un momento a otro, todo se va a la mierda?

—Eso se llama inestabilidad— informó— pero de cierta manera lo inestable puede llegar a ser lo seguro.

Lo miré frunciendo el ceño.

—¿Cómo puede ser lo inestable lo seguro? no lo entiendo.

Se encogió de hombros.

—Cuando eres inestable siempre luchas para que las cosas funcionen, no te das por vencido y esa es la clave.

Lo pensé por un momento.

Creo que Milan y yo hemos sido inestables desde un principio, aun siendo desconocidos. Y lo sabía, la mayoría de veces había sido culpa mía. Sin embargo, también había sido consciente de que siempre la había querido tener cerca, a mi lado. No me era indiferente la manera en la ella me hacía sentir, nunca lo fue.

Pese a ello, había una batalla en mi cabeza. Lo que sucediera hoy, dependería sólo de ella.

—Aunque quisiera que las cosas sean estables, en este momento no creo que vayan a funcionar.

Él me observó con desconcierto.

—Ahora soy yo el que no entiende ¿no quieres estar con ella?

¿Qué si no quería estar con ella?

Reí por lo bajo.

De repente empecé a hablar y de pronto sentí que no podía detenerme.

—Ella ha sido lo que tanto necesitaba, lo que sin estar buscando, encontré. La persona con la pieza que le hacía falta a mi fallido rompe cabezas, ese que intentaba armar pensado que estaba correcto. Me dijo que estaba mal hecho, que no era así como debía solucionarlo, y me ayudó a arreglarlo. La única que me ha sabido soportar a pesar de mi mediocre actitud....me hace olvidar a otras personas para sólo pensar en ella— era consciente de todo lo que decía ¿cuándo me volví tan cursi? Pero no me importaba porque era realmente lo que sentía. Entonces, supe que aquello que había estado negando, probablemente fuera cierto. Que eso que todos decían acerca de mis sentimientos, era realmente verdadero. Tal vez era un obstinado, pero necesitaba que alguien lo confirmara por mi— quiero estar a su lado, todo el tiempo, que me diga justo lo que necesito escuchar, como sólo ella ha sabido hacer. Y saber que puede estar con alguien más, me vuelve loco— lo miré — ¿cómo me hace ver eso? ¿Cómo un...enamorado?