Ivana | Magcon

106 • Matthew Espinosa

Matty.

Aquel día en el que me besaste por primera vez, lo recuerdo siempre.

Por alguna razón, no logro quitar de mi cabeza todo lo que he vivido contigo, no sólo hablo de cosas tristes, hablo en general.

No mentí cuando dije que estaba enamorada de tí, me haces sentir cosas que nunca experimenté, generas tantos sentimientos preciosos y es increíble, porque ha pasado un año ya, pero yo sigo amándote de la misma forma.

Siempre me recrimino el haberte dañado tanto, no lo merecías, no merecías nada de eso, pero estoy aquí para hacerte feliz, para cambiar los defectos y ser mejor persona por tí, por mi y por la familia que tenemos.

Y es más que hermoso decir que tenemos una, nunca me imaginé formando una familia al lado de alguien, hasta que llegaste tú y cambiaste mi manera de pensar y mi vida por completo.

Me haces feliz, siento que por una vez marcha todo bien y es porque te tengo a tí, siempre estás aquí para mí.

Me salvaste, Matthew.

Yo creía que ya nada tenía sentido, me faltaban ganas para todo y más para seguir intentando, pero te conocí.

Lo hice y entendí que tal vez no todo es malo.

Y desde entonces mejoré la confianza en mi misma, sé que puedo hacer todo lo que me proponga.

Me hiciste sentir amada por primera vez, me perdonaste mis estupideces, estuviste acompañándome en todo, aunque probablemente no debía ser así.

Eres un ángel, si te vieras con mis ojos, no dudarías en ningún momento de tí, ni de lo hermoso que eres (y créeme que no hablo solo físicamente), eres una persona realmente increíble.

Eres como el arte, que por más que pase el tiempo, sigues mirándolo porque te sigue atrapando.

Y tal vez sea así, porque tú me atrapaste hace mucho ya, sinceramente no puedo (y no quiero) soltarte.

Matty, gracias por ser tú, te voy a amar por siempre y eso no va a cambiar.

Tú eres mi hogar.