A veces la vida puede ser muy cruel y ponernos a prueba un millón de veces, algunas de estas pensaremos que no podremos más...que la vida jamás nos podrá sonreír o que simplemente estamos hartos y arrojamos la toalla...
La vida no significa derrota, la vida significa que siempre habrá un mañana y que siempre habrá una manera de encontrar soluciones, de hallar una nueva oportunidad, de poder cambiar las cosas, de poder ser mejor cada día y sobre todo nos brinda la oportunidad de empezar desde cero.
T.G.G
Candy se encontraba en un hermoso automóvil que los llevaría directo a Lakewood y de ahí tomarían un tren para ir a New York donde su madre tenía su hogar, ella realmente no deseaba tantas mentiras pero ya nada podía hacer.
-Aquí pasaremos la noche –Dijo Eleonor indicándoles a sus hijos que salieran del automóvil, ambos bajaron una nerviosa y molesta y el otro molesto y sin ánimos de nada.
Al ingresar al lugar pidieron las habitaciones y fueron a cenar algo, durante la cena nadie dijo nada hasta que Terrence decidió cambiar aquello.
-¿Qué le dijiste al duque, Eleonor?
-No le dije nada –Dijo la mujer cenando tranquilamente –Le deje una carta
-Bien entonces ¿Qué decía la carta?
-Que pasarías una temporada conmigo, por orden del abogado y que si tenía alguna objeción la viera con el –Dijo sonriéndole tratando de tranquilizar a su hijo o eso pensaba pero Terrence mas bien estaba indignado
-Le dijiste... ¿Le hablaste de Candy?
La aludida los miro, estuvo adversa en sus pensamientos sin poner atención hasta que escucho su nombre.
-Claro que no...ella es solo mi hija –Dijo Eleonor mirando a la rubia con amor y posesión, la joven estaba cansando de darle falsas ilusiones a aquella mujer.
-Quiero irme a descansar –Anuncio la joven levantándose de la mesa –Con permiso
-Yo también me voy a dormir, vamos te acompaño –Dijo Terrence yéndose con su hermana dejando totalmente sola a la mujer que dejo escapar unas lágrimas, deseaba el amor de sus hijos pero Terrence solo había aceptado ir por Candy y Candy solo iba para no ocasionar más problemas a sus antiguos padres, en cuestión legal, pero no por que deseara estar con ella, ambos se lo habían dicho.
.
.
.
-¿Estas bien? –Pregunto mirándole
-Sí, es solo que...extraño a mi familia
-Tranquila veras que llegaran a América lo más pronto posible.
-Eso espero Terrence –Dijo la rubia, llegaron a su alcoba y entonces ella le miro -¿Tu padre...vendrá? –Dijo con cierto temor
-Tal vez lo haga, solo para fastidiar a Eleonor, pero no pienses en seo ahora, descansa Candy
-También descansa –Dijo sonriéndole amablemente pero la sonrisa nunca llego a sus ojos y él lo noto.
.
.
.
Lejos de allí se encontraba en Londres un joven malhumorado pensando que su suerte no podía ser peor, pues se había aprovechado un poco de la situación y entonces convenciendo a la tía abuela....Anthony.
-No quiero –Murmuro molesto mientras miraba a una pelinegra que venía de lejos
-¿Qué quieres esta vez?
ESTÁS LEYENDO
AMI-ENEMIGAS
Novela JuvenilCandy y Annie fueron adoptadas por la familia Britter, los primeros tiempos son excelentes, ambas juntas siempre, ambas unidad y siempre apoyandose, pero...¿que harias si tu hermana te tiene envidia o celos?...¿que haras si se enamoraran de la misma...