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Las semanas pasaron; siendo los días siendo cada vez más difíciles para Chan.

Cada vez se le hacía mas difícil el ocultar le la verdad de su embarazo a Woojin. En varias ocasiones estuvo a punto de soltar todo, de decirle que no podía esperar el dolor sólo, que fuese su compañía. Pero el sólo recordar sus ojos tristes cuando perdían a sus bebés, la idea era totalmente descartada. No quería, ni podía volver a verlo sufrir nuevamente.

Incluso, había olvidado a la estúpida de Jiwoo y sus tontas insinuaciones. Con su regreso al Instituto la chica se puso incluso más molesta que antes, pero tenía demasiadas cosas en su cabeza para perder tiempo con ella.

Woojin no perdía el tiempo tampoco a menos con algún alumno con dudas o dificultades, algún padre preocupado o en dirección. No salía siquiera de visita a la casa de su familia, pasaba su mayor tiempo libre posible junto a él.

En ocasiones, quería que se fuese, aunque sea a hacer las compras o dar una vuelta y así quedarse solo por unas horas, sólo para volver a reunir fuerzas y valentía para sobrellevar su embarazo oculto.

Pero otras veces, lo quería cerca suyo todo el tiempo, que lo abrazara y dijera que lo amaba y que nunca lo dejaría.

Woojin no era tonto, sabía que algo extraño le estaba pasando, ya no era el Chan alegre, que quería abrazos todo el tiempo, que reía a carcajadas. Ya no estaba.

No era su prioridad, pero no habían tenido intimidad en las tres semanas transcurridas. No tenían sexo todos los días pero tres semanas era un tiempo, a Woojin no le importaría el pasar meses sin hacerlo, si Chan era quien no quería, más si se sentía mal como veía.

Le preocupaba pero no decía nada, tal vez, esperando a que el rubio mismo se lo dijera o a que el tiempo pasara, para así volver a ver al Channie que tanto amaba.

「◖🌪️˖ ݁❟  ⊹࠭𓂃」

O

tra mañana de trabajo llegaba a su fin. Para así poder por fin irse a casa

Woojin ya con todo listo observaba como Chan guardaba con lentitud y cuidado los exámenes de sus alumnos, no le molestaba, sin embargo y prestaba atención a todos sus delicados movimientos con una pequeña sonrisa. El rubio se la devolvía igual de a ratos.

Hasta que alguien apareció a interrumpir su tranquilidad.

—Woojin oppa, ¿que tal si vamos a almorzar?

Todos en la sala quedaron en silencio al escucharla, incrédulos y a la espera de la respuesta de Woojin.

Chan, por su lado esperaba con su corazón latiéndole a mil la respuesta de Woojin, con una extraña inseguridad y miedo.

—Lo siento, pero lo haré con mi pareja... Cariño, ¿nos vamos?

El castaño dejo un sonoro beso en la mejilla de Chan, cariñosamente, que algo sorprendido asentía torpe.

—Oh, bien, nos vemos entonces, oppa

—Si, adiós- Woojin le respondió algo desinteresado mientras tomaba el bolso de su rubio y le llevaba por él.
No quitaba su mirada de él, dando a entender que era lo único que le importaba. Es que ya había sido suficiente, ya era tiempo de que dejara de molestar.

Chan le echó una última mirada a la pelinegra. Esta les miraba marcharse con un rostro serio. Al chocar sus miradas vio odio en sus ojos, asco y mucho odio. Nunca nadie le había mirado de esa manera. No le asustaba pero le sorprendía, más que fuese hacia él y no hacia el castaño que era quien la rechazaba.

「◖🌪️˖ ݁❟  ⊹࠭𓂃」

Jiwoo los miró hasta que desaparecieron detrás de la puerta. Odiaba a Chan, lo odiaba por tener al castaño tan prendido que siquiera era capaz de verla. Siempre debía hablar y acercarse a él para poder ser vista, sino sólo la pasaba desapercibida, sólo tenía ojos para el rubio.

Si el no estuviese en la vida de Woojin fácilmente el sería suyo. Eso pensaba.

—Ya lo verás, Chan. Woojin pronto será mío.







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Hey!
¿Como están?
Quería preguntarles algo.
¿A ustedes no le sale doble capitulo 13 y 14 o algún otro capítulo?

Una Vez MásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora