BALAS PERDIDAS #BBPP1

CAPÍTULO 30

SEPTIEMBRE 2019

Lisell - ¡Miriam!

Miriam - ¿Qué pesada?

Lisell - Lo primero, no me quites el teléfono que estaba leyendo el nuevo capítulo del fanfic del otro día. Lo segundo, me estás diciendo que solo los conoces dos días y ya te has tirado a Valentín. Eres más perra de lo que pensaba.

Miriam - No soy perra, solamente que he conseguido algo que tú quieres en muchísimo menos tiempo.

Lisell - Yo nunca me acostaría con mi mejor amigo.

Miriam - Pero con el del sombrero sí.

Lisell - No.

Miriam - Lo que tú digas... Solamente se ve que como Valentín me atrae, yo a él también.

Lisell - ¿Y que pasó después?

Miriam - ¿Después? Qué estábamos súper acaramelados [risas].

Lisell - ¿Entonces sois novios?

Miriam - Él no me lo ha pedido, y según lo que entendí ayer tampoco lo tiene en sus planes...

Lisell - Pero vos si queres.

Miriam - Bueno.., no tengo una relación desde hace más de un año. Más que tú nadie sabe lo que pasé.

Lisell - Miriam, madura, eres joven. Te van a romper una y mil veces el corazón, pero es ahora o nunca.

Miriam - Mira quién lo dice, la chica más reservada que conozco.

Lisell - Dicen que los menos expertos son los que mejores consejos dan.

Mara - ¿Cómo? [risas] ¿Leyendo en Wattpad fanfics?

Lisell - Eh, no te rías. La que leía Hermione con Ron todo el verano.

Miriam - ¿Y usted en la piscina qué? Solo sabía leer fanfics.

Lisell - Bueno, ese es mi problema. Pero no me cambies el hilo.

Miriam - Vale, ¿entonces qué hago?

Lisell - Invítalo a una cita, a un restaurante de Bilbao.

Miriam - Okey, lo voy a hacer, dame suerte.

Lisell - Mucha mierda, te quiero.

Miriam - Y yo más de lo que crees.

Estaba a una hora de quedar con Juanes en la heladería de enfrente a mí apartamento. Eran las nueve de la mañana, iba vestida con unos pantalones azules y blancos a rayas de tela con un polo sin tirantes rojo. El outfit lo acompañe con mis Reebok blancas y una chaqueta roja. Para las diez en punto ya me encontraba en el punto de quedada cuando lo vi venir. Llevaba una camiseta básica blanca con una cazadora vaquera y unos pantalones iguales a la chaqueta, complementando con unas zapatillas blancas y la gorra del melocotón rosa, no sabía que la usaba.

Juanes - Buenos días.

Lisell - Buenos días.

Juanes - ¿Has desayunado algo?

Lisell - No, recordé que me ibas a invitar a desayunar y me dio pereza.

Juanes - ¿Así que pago yo?

Lisell - Si quieres encima de mentiroso...

Juanes - ¿Mentiroso qué?

Lisell - Nada, que ya pago yo.

Juanes - A ver, si a mí no me importa pagarte el desayuno. Al revés, te invitaría una y mil veces sin rechistar y con gusto. El caso es que no me gusta que me acusen de algo que no soy.

Lisell - Vale, pedimos algo y usted y yo vamos a hablar de muchas cosas.

Juanes - Por cierto, no te he dicho que te ves muy guapa.

Lisell - Mira Juan Pablo, que esté aquí no quiera decir que te vaya a perdonar en un "plis plas". Y si quieres un consejo, los piropos conmigo no funcionan, viví mi adolescencia con Miriam.

Camarero - Buenos días, ¿qué les gustaría tomar?

Lisell - Yo quiero un batido de frambuesa por favor, y si puede ser espeso mejor.

Juanes - Yo voy a probar el batido de horchata.

Camarero - Perfecto.

Lisell - Salvado por el camarero.

Juanes - ¿Puedo saber ya por qué me citaste?

Lisell - Claro, solo quiero que me seas sincero, y te lo pido por favor. ¿Qué ha pasado desde que nos conocimos?